MIERCOLES Ť 28 Ť MARZO Ť 2001
Ť Nueve muertos
Choque de trenes en Bélgica
AFP, AP Y DPA
Bruselas, 27 de marzo. El choque de dos trenes de pasajeros en la localidad belga de Precto, a 25 kilómetros de Bruselas, dejó este martes nueve muertos y ocho lesionados, tras lo cual el gobierno creó un comité de crisis para atender esta tragedia, la más grave de este tipo que ha ocurrido en Bélgica en los últimos 25 años.
Medios de prensa belgas informaron que los dos trenes viajaban por la misma vía y chocaron de frente entre las ciudades de Wavre y Lovaina, en el sudeste del país.
Un portavoz de la compañía nacional de ferrocarriles belga SNCB-NMBS dijo uno de los trenes transportaba a 80 pasajeros y el otro iba vacío, pero por la vía equivocada.
"Seguramente se debió a un error humano", comentó el director general de SNCB-NMBS, ya que el maquinista del tren que iba vacío hizo caso omiso a una señal para detenerse, aunque algunos automovilistas denunciaron numerosas irregularidades en las señalizaciones de la vía que conecta a Wavre con Lovaina.
Cuando advirtieron que los dos trenes marchaban por la misma vía, los operadores del centro de señales en Bruselas intentaron cortar el suministro eléctrico para accionar automáticamente los frenos de emergencia, pero era ya demasiado tarde para impedir la colisión.
Los dos conductores de los trenes, dos trabajadores de la compañía belga de ferrocarriles y cinco pasajeros murieron, mientras tres de los ocho heridos que quedaron atrapados entre los hierros retorcidos están muy graves.
El rey Alberto II y la reina Paola acudieron a la zona del accidente y expresaron sus condolencias a las familias de las víctimas. También el primer ministro Guy Verhofstadt y la ministra de Transporte, Isabelle Durante, se trasladaron al lugar de la catástrofe para evaluar directamente la amplitud del percance.
En los últimos diez años, 15 personas perdieron la vida en varios accidentes de ferrocarriles en este país. En el útimo percance, siete persona murieron y 30 resultaron heridas en octrubre de 1991, cuando dos vagones de un tren sin conductor descarrilaron en Dalheim, cerca de Luettich.