DOMINGO Ť 8 Ť ABRIL Ť 2001

Ť Es la principal oferta del gobierno federal para que el Congreso apruebe la reforma fiscal

A los estados, igual cantidad que los intereses por el rescate bancario

Ť Los 40 mil millones de pesos prácticamente equivalen al costo anual del salvamento financiero

Ť Aduce que con la ampliación de IVA obtendrá recursos adicionales por $140 mil millones

ROBERTO GONZALEZ AMADOR

Convertida en la principal oferta gubernamental para que el Congreso apruebe la reforma fiscal, los 40 mil millones de pesos que serían canalizados por la Federación a los gobiernos estatales representan una cantidad prácticamente similar a los recursos que son destinados en un año al pago de los intereses generados por el rescate bancario, de acuerdo con documentos oficiales.

La propuesta de "Nueva Hacienda Pública Distributiva", enviada por el presidente Vicente Fox al Congreso el martes pasado, establece que con la aplicación del 15 por ciento de Impuesto al Valor Agregado (IVA) a bienes y servicios que hoy no pagan ese gravamen, el gobierno obtendrá recursos adicionales por 140 mil millones de pesos, equivalente a 2.2 por ciento del producto interno bruto (PIB). De esa cantidad, el gobierno federal, según la iniciativa, transferirá a los gobiernos estatales 40 mil millones de pesos, que podrán ser gastados libremente sin que estén etiquetados para rubros específicos como ocurre ahora con las aportaciones federales a las entidades.

Los recursos que serían aportados por la Federación a los estados de ser aprobada la reforma fiscal prácticamente equivalen a los 39 mil 177.9 millones de pesos de recursos públicos que en este año son empleados para financiar el costo anual del rescate bancario.

En el presupuesto de egresos de la Federación para 2001 se establece que el Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB) requerirá este año de recursos públicos por 24 mil 270 millones de pesos para financiar exclusivamente el componente real de los intereses causados por la deuda derivada del rescate bancario, que está representada por los pagarés que el gobierno federal entregó a los bancos para capitalizarlos después de la crisis de 1995.

Los otros 14 mil 907.9 millones de pesos corresponden al monto que corresponde pagar al gobierno federal para atender el costo de programas de apoyo a ahorradores instrumentados también como parte del rescate bancario realizado por la anterior administración federal.

Según información de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), la deuda del gobierno federal con los bancos por la emisión de los pagarés Fobaproa ?que sirvieron para capitalizar a los bancos durante la crisis y por los que las instituciones de crédito reciben intereses cada año- alcanza 312 mil 635 millones de pesos, cantidad superior en 123 por ciento a los 140 mil millones de pesos que la administración federal espera captar de ser aprobada la propuesta de "Nueva Hacienda Pública Distributiva".

De acuerdo con la más reciente información disponible de la CNBV, Banamex tiene un pagaré de capitalización emitido por el extinto Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa, hoy IPAB), por 32 mil 605 millones de pesos, es decir, esa es la cantidad que el gobierno debe a esa institución de crédito como parte del rescate bancario.

En tanto, Bancomer ?antes de la fusión con BBVA- tenía a su favor un pagaré Fobaproa por 58 mil 532.11 millones de pesos, mientras que en el caso de Serfin, el pagaré con cargo al Fobaproa era de 61 mil 742 millones de pesos