DOMINGO Ť 15 Ť ABRIL Ť 2001
Ť Buscan cerrar el caso
Dolo, en exámenes a Pinochet: peritos
AFP Y AP
Santiago, 14 de abril. Los exámenes mentales que podrían determinar el cierre del proceso contra Augusto Pinochet habrían sido practicados cuando se encontraba bajo los efectos de la droga Citalopram, cuyos residuos aparecieron en la orina del ex dictador.
Los especialistas afirman que dicha droga habría producido la confusión, dificultad de concentración y amnesia que presentaba durante los exámenes en los que se le diagnosticó "demencia moderada".
Mientras esta denuncia se presentaba, la Corte de Apelaciones de esta capital se apresta a estudiar esos exámenes, para aceptar o rechazar los argumentos de la de-fensa, que solicita archivar el juicio por los crímenes de la caravana de la muerte sin sanciones, en consideración al deficiente estado mental de su representado.
Los psiquiatras Paz Rojas, Andrea Bahamondes y Martín Cordero prepararon un nuevo informe que será entregado en breve al juez Juan Guzmán Tapia, quien lleva la causa contra Pinochet, y en él afirman que hubo otras irregularidades en los exámenes mentales a Pinochet, como el hecho de que uno de los doctores del ex dictador, Sergio Ferrer, tuvo acceso a las pruebas psicológicas que le aplicarían a su cliente cuatro días antes, lo que permitió que el acusado "llegara a los exámenes informado y preparado".
También denunciaron que se excedió por mucho el tiempo apropiado para las sesiones, lo que también contribuyó a que Pinochet, de 85 años, apareciera como menos apto de sus facultades mentales.
Los médicos señalan también, en el documento, que una de las pruebas más extensas a las que fue sometido el ex dictador fue el test Luria Nebraska, dirigido por la psicóloga Siomara Chahuán, que fue la única que participó en la redacción de las conclusiones entregadas a la Corte de Apelaciones, y aseguran que en una prueba de esa naturaleza debieron participar más peritos, para asegurar la transparencia de los resultados.
El informe de los psiquiatras asegura que estas irregularidades, y en particular la presencia de Citalopram en el organismo del acusado, provocaron el errado diagnóstico de "demencia moderada".
"Sostenemos que el señor Pinochet, des-de un punto de vista psiquiátrico, se en-cuentra capacitado para participar en un proceso en los tribunales de justicia, con las debidas contemplaciones relativas a su edad y a sus problemas de movilidad", concluyen en su informe los peritos.