DOMINGO Ť 15 Ť ABRIL Ť 2001

Ť Según información estadística de la Secretaría de Salud correspondiente a 1999

Entre 10 y 15 por ciento de las muertes en zonas pobres, por enfermedades prevenibles

Ť Chiapas, el caso más grave, donde fallecen 7 años antes que la media nacional

Ť Se reportan al año 443 mil 950 decesos; 80 por ciento por males transmisibles

ANGELES CRUZ

Al año se reportan en México 443 mil 950 muertes, 56 por ciento de las cuales son de hombres, y aunque casi 80 por ciento de los decesos se originan por enfermedades no transmisibles, todavía en las zonas pobres del país como Oaxaca y Chiapas, 10 y 15 por ciento de la población, respectivamente, muere a causa de enfermedades que pueden prevenirse.

De acuerdo con las más recientes estadísticas -dadas a conocer por la Secretaría de Salud (Ssa), con base en información de 1999-, la situación más grave ocurre en Chiapas, entidad en la que la edad promedio al momento de la muerte (49.8 años) es siete años menor con respecto a la media nacional, que es de 56.7.

A nivel nacional, las 10 principales causas de mortalidad se ubican como sigue: las enfermedades del corazón ocupan el primer lugar con 15.6 por ciento del total, seguidas de los tumores malignos (12.1 por ciento), la diabetes mellitus (10.3 por ciento), los accidentes (ocho por ciento) y las enfermedades del hígado (6.1 por ciento).

Enseguida se ubican los males cerebrovasculares con 5.8 por ciento; las afecciones originadas en el periodo perinatal, como la dificultad para respirar del recién nacido, que representan 4.3 por ciento; influenza y neumonía 3.2 por ciento; por homicidio fallece 2.8 por ciento de los mexicanos; y por enfermedades pulmonares obstructivas crónicas 2.6 por ciento.

En el sitio 11 se encuentra la desnutrición y otras deficiencias nutricionales, por las que fallecen al año 9 mil 776 personas, equivalentes al 2.2 por ciento; la anemia está en el sitio 17 con tres mil 581 muertes (0.8 por ciento); y las enfermedades causadas por el VIH/sida son responsables del deceso de cuatro mil 204 individuos (uno por ciento).

Con base en los certificados de defunción, la Ssa ha podido determinar lo anterior y también establecer que en los estados de Durango, Guerrero, Nayarit y Sinaloa prevalece un problema de subregistro de la información. El de 1999 fue el segundo año en que para la realización del estudio estadístico se tomó como base la nueva Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-10), por medio de la cual se ha podido precisar más la información.

Así, desapareció el paro cardiaco de las enfermedades cardiovasculares porque en realidad se trata de una forma de morir y no constituye una causa. Ahora se codifica dentro de un capítulo denominado "de signos y síntomas mal definidos".

Por otro lado, la dependencia destaca que en el año de estudio hubo un ligero descenso en el número absoluto de muertes. De 444 mil 665 decesos que se reportaron en 1998, se pasó a 443 mil 950 en 1999. El impacto se reflejó en todos los grupos de edad.

De los 443 mil 950 fallecimientos, 247 mil 833 correspondió a hombres (con una tasa de 5.1 por cada mil habitantes de este sexo) y 195 mil 979 a mujeres (tasa de cuatro por mil habitantes). Por grupos de edad, destaca que aun cuando el índice de mortalidad entre los niños menores de cinco años continúa a la baja, todavía se reportaron 48 mil 57 decesos.

En cuanto al tipo de afecciones, el reporte de salud indica que a nivel nacional 78.2 por ciento de las muertes se debe a las enfermedades no transmisibles: sin embargo, en entidades como Coahuila, Distrito Federal, Nuevo León y Yucatán, el porcentaje se eleva hasta 83 por ciento, mientras que en Durango, Jalisco, Sonora, Tamaulipas y Veracruz el peso de estos males crónico-degenerativos es de 80 por ciento.

Por el lado de las enfermedades transmisibles, el estudio detalla que el promedio nacional es de 9.2 por ciento, pero en Chiapas representa 15.2 por ciento, en Quintana Roo 14.3 por ciento, Puebla 11.8 por ciento y estado de México 11.3 por ciento. Con 10 por ciento se encuentran las entidades de Guanajuato, Guerrero, Oaxaca, Querétaro, Tabasco y Tlaxcala.

Un dato revelador de las precarias condiciones de salud que prevalecen en Chiapas y Oaxaca, principalmente, es la alta prevalencia de enfermedades infecciosas intestinales, la cual prácticamente triplica la tasa promedio nacional, que es de 5.7 casos por cada 100 mil habitantes. En Chiapas es de 14.9. En Oaxaca la incidencia registrada es de 14.6 por cada 100 mil personas.