Por distintas causas

76 indocumentados hidalguenses han muerto en EU de 1999 a la fecha Entre los connacionales fallecidos está Roberto Chávez Reséndiz, a quien asesinó a mansalva un agente de la Patrulla Fronteriza cuando intentó cruzar la frontera estadunidense por tercera ocasión. Hoy sus familiares, organismos de derechos humanos y diputados priístas piden que su crimen no quede impune.

CARLOS CAMACHO CORRESPONSAL

Mixquiahuala, Hgo, 15 de abril. Roberto partió por primera vez el 13 de agosto de 1998, con dinero que le prestaron amigos, y regresó un año después. En enero del año 2000 emigró nuevamente y retornó a los seis meses para el entierro de su hija recién nacida.

El 5 de marzo pasado, cuando tenía 22 años, intentó por tercera ocasión llegar al vecino país, pero Marco Rivera, agente de la Border Patrol supuestamente de origen hispano, le dio muerte luego de someterlo en Tucson, Arizona, junto con su hermano menor y un cuñado.

Ignacio Chávez, de 20 años, llora al recordar hechos que presenció junto con su cuñado Adrián Bautista, de 17 años, luego que con Roberto llegaron a Hermosillo, Sonora, y de ahí los llevaron en una camioneta a Tucson.

Ya en la frontera, el pollero que los guiaba los bajó de la unidad y les ordenó echarse a correr. Minutos después, una patrulla de la Patrulla Fronteriza los sorprendió y se ocultaron "atrás de un mezquite".

Cuando los tres cruzaban la línea divisoria entre México y Estados Unidos, Roberto vio que elementos de La Migra detenían a sus parientes y detuvo su carrera. Volvió con las manos en la nuca y los fronterizos lo recibieron a patadas.

-Okey, okey, okey --cuenta Ignacio que dijo su hermano al intentar ponerse de pie.

-¿Para qué te levantas? ¿Quieres pelear conmigo? ?retó a Roberto el agente Marco Rivera.

-No hay bronca --replicó el migrante.

-¡Cochino mexicano! --gritó el policía, quien desenfundó una pistola calibre .40 con la que le disparó en la cabeza.

Versiones diferentes a la de Ignacio aseguran que Rivera disparó en tres ocasiones sobre el migrante.

A los 30 minutos llegó al paraje una ambulancia que se llevó al joven indocumentado. Rivera argumentó ante sus superiores que le disparó una bala de salva a Roberto.

Tanto Ignacio como Adrián fueron llevados a un hotel de Arizona. Narraron que las autoridades migratorias estadunidenses les compraron ropa y los atendieron "muy bien", para luego regresarlos a su tierra en avión.

La reacción de familiares, autoridades, representantes populares y grupos defensores de los derechos humanos derivó en la intervención del despacho de abogados estadunidense Risner and Graham, de Tucson, que a nombre de la familia interpuso una demanda penal contra la Border Patrol y exige una indemnización de 25 millones de dólares.

La Patrulla Fronteriza tiene seis meses de plazo para aceptar o no su responsabilidad en torno al caso, que ha tomado en sus manos el abogado William J. Risner.

Pide el PRI "castigo ejemplar" al policía asesino

A principios de marzo anterior, en conferencia de prensa, los diputados federal y local del PRI, David Penchyna Grub y Medardo Becerril Jiménez, dieron a conocer que promueven en los Congresos de la Unión y de Hidalgo un punto de acuerdo, para exigir al Congreso de Estados Unidos, así como a los gobiernos de Vicente Fox y George W. Bush, que se castigue "ejemplarmente" al policía que asesinó a Roberto Chávez.

Los dos legisladores visitaron a familiares de Roberto para informarles sobre los avances en las gestiones al respecto ante el gobierno estadunidense y organismos internacionales defensores de los derechos humanos, así como de la demanda de los 521 diputados locales del PRI en el país, sobre el esclarecimiento del crimen y castigo al homicida.

Era su tercer intento

La primera vez que Roberto Chávez, a sus 20 años de edad, decidió irse de mojado dejó una carta en la que exponía a la mujer con la que vivía en amasiato las razonas de su decisión: "Yo te abriré paso para que después le llegues".

Laboró en Long, Island, Nueva York, ciudad que se ha convertido en una suerte de refugio de los mixquiahualenses y donde, según un censo elaborado por el regidor de Mixquiahuala, Mario García Martínez, hay alrededor de 4 mil migrantes originarios de Hidalgo.

Roberto, como muchos jóvenes de su edad, era albañil. Este oficio y el de campesino son las dos únicas opciones de empleo para muchachos de Mixquiahuala que no siguieron sus estudios por falta de dinero.

Desde Long Island, envió otra misiva manuscrita a sus familiares:

"Para la mejor jefa del mundo, de sus hijos queridos:

"Hola jefecita, cómo está, espero que muy bien eh, porque aunque no lo crea nos preocupa, por eso cuídese mucho má, y le volvemos ha decir: para cualquier cosa échenos un fonazo, hasta cuando se sienta sola, haga de cuenta que estamos junto a usted.

"Hay mandamos dos camisas una para usted, la que le guste, y para el Nacho la otra, también unos juguetillos hay los reparte; el blanco es para el Justo, el de peluche para la Juana y 10 dólares, el rojo para el Uriel y los chicos para el más chico de los sobrinos, para el de la Mari, también el traje".

Sus padres, Mario García y Belén Reséndiz, lo recuerdan desde niño como "muy estudioso, muy cariñoso. Tenía muchos amigos, era muy solidario".

Al día siguiente del percance, Belén recibió una llamada telefónica del agregado cultural en el consulado de México en Tucson, Enrique Muñoz, quien dijo: "¿Es usted la madre de Roberto Chávez? Le tengo una mala noticia, le suplico que sea usted muy fuerte: su hijo sufrió un accidente y murió".

76 muertos en dos años

En su vivienda, Belén colocó 25 veladoras. Dice que su hijo se fue a Nueva York y "le entraba a todo", construcción de albercas y casas de madera, podaba pasto, lo que fuera. "No se enfermaba". Recuerda que como Roberto "muchos han salido del pueblo y han regresado igual, muertos".

De acuerdo con el delegado de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Enrique Santana Velázquez, desde que la dependencia se abrió en Hidalgo el 23 de marzo de 1999, se han registrado 76 muertes de hidalguenses en Estados Unidos, la mayoría en accidentes automovilísticos. Ninguno ha sido asesinado como Roberto.

Santana indicó que el caso de Roberto "es un asunto federal", y por ello lleva las investigaciones el Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), aunque la SRE ha demandado que "la ley se cumpla hasta sus últimas consecuencias".

Según la Coordinación de Atención al Migrante Hidalguense en Estados Unidos, que dirige Dolores Parkinson, en el vecino país hay unos 100 mil hidalguenses ?la mayoría de municipios del Valle del Mezquital? que dejaron la entidad "por falta de oportunidades".