MIERCOLES Ť 18 Ť ABRIL Ť 2001

Ť No nos someterán a exámenes de confianza: Ibarrola

Niega la PGR que EU dé línea a México para combatir a narcos

Ť Senadores estadunidenses reiteraron a Macedo que Bush considera inoperante la certificación, dijo el subprocurador

GUSTAVO CASTILLO GARCIA

El gobierno de Estados Unidos no dicta línea a las autoridades mexicanas en el combate al crimen organizado ni al narcotráfico, y, además, ha quedado muy claro que nuestros policías y funcionarios no serán sometidos a exámenes de confianza en aquel país, aseguró el subprocurador de Asuntos Jurídicos e Internacionales de la Procuraduría General de la República (PGR), Eduardo Ibarrola Nicolín.

En conferencia de prensa al término de la reunión que el titular de la PGR, Rafael Macedo de la Concha, sostuvo con senadores estadunidenses encabezados por Jesse Helms, destacó que el grupo de legisladores de aquel país estableció que "soplan vientos favorables para que se inicie un proceso serio de cambio de carácter legislativo, en cuanto a la certificación, porque el gobierno del presidente Bush considera que ya no es operante el esquema actual como fórmula efectiva de cooperación y evaluación de los trabajos y de la lucha de los países contra el narcotráfico".
ibarrola
Recordó que el presidente Vicente Fox ha señalado que la "única forma en que se pueden evaluar, de manera seria, despolitizada, objetiva y transparente los esfuerzos de los países en la lucha contra ese flagelo es con un examen multilateral que comprenda a todos los países involucrados, no a unos sí y a otros no. Debe practicarse de manera técnica, y este mecanismo es precisamente el que está en vigor en la Organización de Estados Americanos".

Durante el encuentro, dijo, se hicieron comentarios respecto a las evaluaciones de confianza, y quedó muy claro cómo en México el gobierno es el que practica esos exámenes, y que Estados Unidos no lleva a cabo esas evaluaciones a nuestros miembros de las corporaciones policiacas, sino que es el centro nacional de control de confianza.

Sin embargo, señaló que "solamente aquellos elementos de la Policía Judicial o del Ministerio Público de la Federación que reciban información sensible de otros países, tienen establecido un acuerdo del procurador, por medio del cual se permite la presencia de representantes de esos gobiernos que nos proporcionan datos de inteligencia para verificar la práctica de estos exámenes de confianza".

Reconoció que Estados Unidos, "en su momento, aportó todo su apoyo para la capacitación técnica de los poligrafistas, para la instalación del centro de control de confianza, y no solamente fue asistencia técnica, sino que también otros países nos ayudaron, como fue el caso de Canadá".

El subprocurador afirmó que fue "una reunión muy buena, excelente, de intercambio de ideas, donde hubo respeto mutuo, y también un reconocimiento a los esfuerzos que está realizando la administración del presidente Fox y la gestión del procurador general, Macedo de la Concha, así como a los resultados que se están teniendo".

Indicó que "durante la reunión, el senador Joseph Biden señaló que ellos no vienen a dictar lineamientos ni a dar instrucciones, y que tampoco están en condiciones de hacer recomendaciones, sino que vienen a ver, precisamente, la relación que tenemos con Estados Unidos y los esfuerzos que estamos llevando a cabo, y  con el propósito de ofrecer toda la ayuda que sea posible para que, de común acuerdo, México y Estados Unidos puedan ser más eficaces en la lucha contra un enemigo común, como es la delincuencia".

El procurador Macedo de la Concha señaló la convicción que existe en la PGR de luchar en contra de la delincuencia organizada, pero dijo que esto no puede darse en forma aislada, que todos los países tienen que cooperar para vencer al enemigo común, que es la criminalidad.

Se manifestó por que Estados Unidos y México realicen las acciones necesarias para que en la frontera común exista seguridad de que los criminales no utilizarán las respectivas soberanías y jurisdicciones territoriales como santuario para ocultarse de la acción de la justicia.