MIERCOLES Ť 18 Ť ABRIL Ť 2001

Ť Insisten en llegar a La Paz

Nueva intercepción a la marcha de los cocaleros

AFP, DPA, AP Y REUTERS

La Paz, 17 de abril. La policía boliviana interceptó por tercera vez una marcha de trabajadores y campesinos cocaleros que avanzan hacia la capital del país desde el altiplano, al tiempo que en La Paz se suscitaron violentas manifestaciones de pequeños deudores que fueron dispersados por la fuerza pública.

La nueva acción represiva de la policía contra los marchistas cocaleros ocurrió este mediodía en la localidad de Panduro, aunque no fueron dispersados, pero se reportó que la medida de fuerza no respetó ni a las mujeres participantes ni al líder Evo Morales, que como congresista goza de fuero.

La nueva acción policial tampoco impidió que la Central Obrera Boliviana (COB) reiniciara las pláticas con el gobierno, con el que negocia un amplio pliego sindical, pese a que esa central se había levantado de la mesa la semana pasado cuando tuvo lugar la primera arremetida policial contra los marchistas.

Las explicaciones sobre la actitud de la COB parecen obedecer al hecho de que la central apoyaría al líder indígena aymará Felipe Quispe por el control de la Confederación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos de Bolivia, y de allí también que éste no hubiera apoyado la marcha que encabeza Morales.

Los marchistas exigen el cese de la erradicación de cultivos de hoja de coca y la revisión de las leyes de agua y tierra, en tanto que fuentes policiales reiteraron que tienen instrucciones de no permitir que la marcha arribe a La Paz, por lo que quienes son detenidos son regresados en autobuses a Cochabamba.

Mientras, unos 5 mil pequeños prestatarios procedentes de distintas partes del país llegaron a La Paz, en demanda de la condonación del equivalente de 20 millones de dólares a 30 mil pequeños deudores, protestas que derivaron en que turbas de manifestantes apedrearan los bancos Santa Cruz y Unión.