JUEVES Ť 26 Ť ABRIL Ť 2001

Ť "No me afecta la presión"

Descarta Loyola liberar a zapatistas

ALEJANDRO GONZALEZ ANAYA CORRESPONSAL

Queretaro, Qro. 25 de abril. El gobernador Ignacio Loyola aseguró que la presión no le afecta, por lo que descartó cambiar su postura en relación con no liberar a Anselmo Robles y Jerónimo Sánchez, presuntos zapatistas, e informó que la semana próxima se reunirá con los integrantes de la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa), que busca la liberación de los internos.

El mandatario estatal refirió que el pasado martes recibió un comunicado del presidente de la Cocopa, Félix Castellanos, donde le solicitó un encuentro para hablar sobre el tema.

Loyola Vera consideró que ahora se reiniciará la presión "en ambos sentidos" en torno a la excarcelación de los dos supuestos zapatistas recluidos en Querétaro. Explicó que en la entidad la tónica es que no se les dé libertad, mientras que órganos externos al estado, "como la Cocopa", pugnan por lo contrario.

Cuestionado sobre por qué no recibe a los integrantes de la Cocopa durante su estancia este jueves en la capital queretana, Loyola Vera aseguró que su agenda no se lo permite, además de que "no es un asunto que si no se resuelve hoy va a haber un problema".

En torno a su próximo encuentro con el presidente Vicente Fox Quesada -previsto en el marco de un cónclave de alcaldes panistas, a realizarse aquí el sábado-, el mandatario estatal comentó que dependerá del Ejecutivo federal abordar el tema de los dos presos zapatistas.

En tanto, el presidente estatal de la Confederación Patronal de la República Mexicana, Tonatiuh Salinas Muñoz, respaldó la política "de respeto al estado de derecho" ejercida durante la actual administración. "Le damos (al gobernador) nuestro respaldo para que en Querétaro se sigan respetando las leyes y no dejarnos intimidar por gente que se protege bajo supuestas luchas sociales".

Más tarde, en su primera conferencia de prensa como dirigente estatal del PAN, Francisco Garrido Patrón favoreció la posición de denegar la liberación de Anselmo Robles y Jerónimo Sánchez.