JUEVES Ť 26 Ť ABRIL Ť 2001

Ť Pidió a perredistas definir su proyecto de nación antes que el de su organización

El PRD debe convertirse en una izquierda moderna y mayoritaria: Felipe González

Ť No se puede seguir ofreciendo "el paraíso terrenal" para el futuro mientras la derecha gobierna el presente, señaló el ex dirigente del PSOE durante el sexto congreso partidista

MATILDE PEREZ, MIREYA CUELLAR Y ENRIQUE MENDEZ ENVIADOS

Zacatecas, Zac., 25 de abril. El desafío y la responsabilidad del PRD es ser la izquierda moderna y mayoritaria que México necesita, porque no se puede seguir prometiendo "el paraíso terrenal" para el futuro mientras la derecha gobierna el presente, dijo el ex dirigente del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Felipe González, luego de presenciar parte del debate que se dio hoy en el sexto congreso nacional perredista, y advirtió a los dirigentes de dicho partido que si no hay coherencia con lo que predican, los mexicanos se lo van a cobrar, pero si lo asumen, se los van a premiar.

Como vicepresidente de la Internacional Socialista, Felipe González pidió a sus "amigos y compañeros de izquierda en el mundo" que cumplan tres requisitos: tener vocación de mayoría, ya que hay mucha gente de izquierda que prefiere seguir siendo sectario para continuar con su seguridad; ser consecuentes, ya que las mayorías son complejas y a veces contradictorias, y no discutir qué organización necesitan sin antes haber decidido qué proyecto mayoritario tienen.

Si ustedes tienen un proyecto con vocación mayoritaria -puntualizó Felipe González- se van a encontrar con una gran sorpresa, ya que "para que sea mayoritario" debe tener "elementos de coincidencia con otra gente insospechada", incluso de derecha, y no por ello habría que cambiar las propuestas, porque "eso de que es de derecha y esté de acuerdo en lo que yo quiero para México, entonces no quiero y lo cambio". Díganlo si quieren, pero "así no se hacen países fuertes, los que tienen renta histórica", enfatizó.

Aclaró que tampoco es prometer el paraíso terrenal para que la derecha gobierne la mayoría todos los días. "Eso, me parece, es traicionar el objetivo de la izquierda. Por eso creo que la definición de proyecto mayoritario siempre le da a uno la sorpresa de encontrarse con esa fortaleza de los países fuertes o, como los llaman ahora, centrales".

Insistió en que el PRD primero defina el proyecto político que quiere para México antes de definir el tipo de organización que necesita para conseguir lo que quieren. Debatir al revés "no sirve", expuso en su intervención ante los delegados del sexto congreso nacional de ese partido.

Aclaró que las "corrientes" al interior de un partido político corresponden a banderas personales. "Las corrientes es un concepto muy serio y no conozco a ninguna que no responda a intereses personales".

En un discurso improvisado, el ex secretario general del PSOE alentó a los rosari-imanol perredistas: "Cuesta trabajo decir que el PRD tiene futuro cuando estamos en un ambiente que no parece de optimismo sino de autocrítica y a veces de autoflagelación, típico de los partidos de izquierda; en donde hay tensión y pasión en los debates y hasta dramatismo en los medios de comunicación. Pero son los partidos de derecha los que no se equivocan nunca, los de izquierda son los que se autocritican, así que estamos en el ambiente apropiado".

También preguntó: Ƒcómo se alcanza el futuro que anhela la izquierda si no es gobernando mayoritariamente el presente y cambiando la realidad del país?, Ƒcómo se alcanza ese futuro?, Ƒsólo predicando? Y respondió ante una militancia perredista atenta al mensaje: "predicar sin dar trigo no es de izquierda ni de derecha, simplemente no es intelectualmente honesto. Quien esté dispuesto a predicar tiene que estar dispuesto a dar trigo".

En el caso de la Internacional Socialista, explicó, mi encargo fue, hace cinco años, abrir un debate a nivel internacional para crear una plataforma de ideas con que enfrentar los nuevos desafíos. He hecho un trabajo en ese sentido y he llegado a algunas conclusiones y ahora falta desarrollar ese trabajo. "Hace meses hablé con el ingeniero (Cuauhtémoc) Cárdenas y en otras ocasiones con Amalia (García) (porque) tenemos que ayudar a definir cómo América Latina se va a parar ante los nuevos desafíos, ya que la izquierda tiene una vocación de solidaridad, de lucha por la igualdad y vocación de redistribución de la riqueza.