JUEVES Ť 3 Ť MAYO Ť 2001
Ť Exhortó al diálogo
La ley indígena es "mejor que nada", según Obeso Rivera
JOSE ANTONIO ROMAN
Aun cuando es una voz que debe tomarse en cuenta, el EZLN "no representa a todos los indígenas del país", y debe reconocerse el esfuerzo que legisladores de distintos partidos hicieron para aprobar la Ley de Derechos y Cultura Indígenas e incorporar en ella la problemática de estos pueblos y comunidades, afirmó ayer el ex presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) y uno de los seis integrantes de la Comisión Episcopal para la Paz en Chiapas, Sergio Obeso Rivera.
Pidió a los zapatistas "reconsiderar" su decisión de suspender el diálogo con el gobierno federal y admitir que en dicha legislación hay un "paso importante" para la dignificación de los pueblos indios. "Esta ley es mejor que nada", dijo.
Entrevistado luego de encabezar la peregrinación anual de la arquidiócesis de Jalapa a la Basílica de Guadalupe, el prelado se refirió también al planteamiento de que la ley fuera vetada por el presidente Vicente Fox. Creo, dijo, que no sería conveniente, pero de darse, éste (el veto) deberá ser resultado de una acción concertada, pues de lo contrario esta decisión podría traer fuertes repercusiones para el país.
"Esperamos sinceramente que (el EZLN) recapacite, porque creo que se ha hecho un gran esfuerzo para restablecer el diálogo y porque se ha tomado en la ley la problemática indígena, pero también debemos reconocer que el EZLN no representa a todos los indígenas del país", dijo el también arzobispo de Jalapa, en cuyo territorio existe un gran número de comunidades indígenas.
La legislación es perfectible, pero debemos ser optimistas
"Ciertamente, como toda obra humana, la ley sin duda alguna es perfectible, y ya han surgido inconformidades, pero debemos verla como un primer paso y muy importante para el país y para los indígenas. Así que debemos ser optimistas".
Obeso Rivera estimó que "todos los sectores, sin excepción", debemos tomar en serio este paso tan importante que se ha tomado con la aprobación de esta ley, asumiéndola a cabalidad. "Debemos verla (a la legislación) como un paso importante para lograr la paz y para lograr la dignificación, por caminos de justicia y legalidad, de las comunidades indígenas del país".
Poco antes, casi al final de la celebración religiosa con la que concluyó la peregrinación de su arquidiócesis, sacerdotes, religiosas y laicos oraron porque se ilumine a los legisladores y gobernantes a "promulgar leyes justas" para que vivamos en paz.
Durante su homilía, monseñor Obeso pidió a la Virgen de Guadalupe su intercesión para el "progreso de México, por caminos de justicia y paz". Ante unos 30 sacerdotes de su presbiterio y cientos de feligreses que casi llenaron la Basílica, el arzobispo comentó la carta del papa Juan Pablo II Al comienzo del nuevo milenio y exhortó a los católicos a buscar la santidad, que contrario a lo que se cree, "no es prerrogativa de un grupo privilegiado de la Iglesia católica".
Todos, agregó, estamos llamados a seguir a Jesús, a vivir la radicalidad del Evangelio y a dar testimonio, con nuestras acciones y vida, de la cercanía con Dios.