JUEVES Ť 3 Ť MAYO Ť 2001
Ť Sugiere que México aumente la vigilancia fronteriza para disminuir los cruces ilegales
Descarta Davidow incluir en el TLCAN un apartado sobre temas migratorios y laborales
Ť Funcionarios y legisladores de Zacatecas protestan por el trato racista a mexicanos en EU
ALFREDO VALADEZ RODRIGUEZ CORRESPONSAL
Zacatecas, Zac., 2 de mayo. Está descartada la posibilidad de hacer cualquier modificación al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) para incluir un apartado específico sobre la cuestión migratoria-laboral, manifestó el embajador de Estados Unidos en México, Jeffrey Davidow, quien dijo que este fenómeno no podrá detenerse mientras nuestro país no logre un mejor desarrollo económico y aumente la vigilancia de la frontera norte para disuadir a los mexicanos de cruzar la línea divisoria.
Al sostener una reunión con legisladores y funcionarios estatales, el diplomático escuchó una demanda generalizada para que se dé un mejor trato en su país a los trabajadores migrantes mexicanos -legales e indocumentados-, y se le planteó la urgencia de que el gobierno estadunidense instaure una amnistía para que todos los connacionales tengan oportunidad de regularizar su estancia.
Destacó la protesta que hizo el procurador de justicia estatal, Aquiles González Navarro, por el trato ''xenofóbico y racista'' que en el país del norte se da a los mexicanos. ''Es cuestionable y es preocupante la circunstancia de que personas que no son autoridad en Estados Unidos, actúan como cazaindocumentados, realizando actos no sólo de detención, sino de barbarismo en contra de ellos'', le reclamó al embajador estadunidense.
Doble responsabilidad
Por su parte, Davidow respondió que el asunto de los derechos humanos de los migrantes, y el buen trato que a éstos se da, ''es una responsabilidad de ambos países'', ya que -argumentó- es una obligación del gobierno mexicano acabar con los polleros, quienes son los que sacan ventaja del contrabando de migrantes y son quienes más los exponen.
Pero además, planteó, la responsabilidad de México radica en que debe aumentar el número de efectivos que vigilen la frontera norte, para que quienes intenten cruzar desistan de ese propósito, y eliminó además la posibilidad de que su país acepte una revisión del TLCAN, para incluir el tema de los trabajadores migrantes en Estados Unidos.
Al mismo tiempo, el diplomático descartó el planteamiento de la amnistía para los indocumentados mexicanos, ya que en su país no existen los consensos al respecto, sobre todo de los opositores, quienes plantean que de aprobarse una amnistía, aumentaría el flujo migratorio de latinos a Estados Unidos.
Sobre el alto costo que cobran empresas como Western Union y Money Gram a los migrantes mexicanos por el envío de remesas a México -otro de los reclamos de funcionarios y diputados locales-, Davidow opinó que ''la respuesta final'' a este problema es que exista más competencia entre las empresas de envío de dinero, pues en la actualidad son pocas las compañías que se dedican a este rubro. ''Me gustaría que todas las empresas de envío de remesas vinieran aquí, a Zacatecas, pero eso no va a suceder'', expresó.
Por ello otra salida, mencionó, es la de que los bancos mexicanos ''grandes'' lleguen a abrir sucursales en Estados Unidos, y que cada mexicano migrante deposite allá y aquí en México su familia, con su tarjeta ATM, pueda retirar el dinero con un costo mínimo.
Al abordar el tema de los problemas económicos en nuestro país, Jeffrey Davidow se refirió a la reforma fiscal: ''No quiero entrar en la política mexicana, sin embargo, debo decirles que la recaudación impositiva en México podría ser mayor''.
Esto, ejemplificó el embajador estadunidense, porque en la mayoría de los países las contribuciones fiscales de los ciudadanos son muy superiores a las que aquí se cobran y por ello es difícil que el gobierno alcance a solventar todas las necesidades sociales de la población.
''El estadunidense común y corriente está pagando al gobierno federal entre 20 y 25 por ciento de sus fondos en impuestos. Otros países, como Argentina o Chile, entre 18 y 19 por ciento; Alemania, Bélgica, 30 a 37 por ciento. El porcentaje del PIB que maneja el gobierno mexicano para asuntos de la inversión, la infraestructura y la educación, y todo lo que debe hacer un gobierno, es más o menos 10 por ciento''.