Ť Con su grupo Huapangueros de Rioverde, se presentará el día 25 en Nayarit
Dar opinión es una de las prioridades del trovador moderno, dice Elías Chessani
Ť ''Esté el PRI o el PAN, Salinas o Zedillo o Fox, siempre hemos sido así'', indica
Ť Lanzarán su casete número 20, que incluye un repaso al actual gobierno federal
ARTURO JIMENEZ
Para los trovadores del son arribeño o huapango arribeño, la crítica política y social a través de este género musical no se detendrá en los nuevos tiempos de foxismo, cuando la Presidencia del país ya no es de los priístas, hasta hace poco el blanco principal de esos ingeniosos poetas, cronistas y maestros de la improvisación en verso rimado.
''Esté el PRI o el PAN, esté Salinas o Zedillo o Fox, siempre hemos sido así, informativos; dar opinión ha sido una de las prioridades fundamentales que tiene el trovador actual moderno", señala en entrevista Elías Chessani, cabeza del grupo El Dr. Chessani y sus Huapangueros de Rioverde.
Con sede en la capital potosina, esta es una de las agrupaciones más importantes del son arribeño y ha participado en diversos festivales del país, así como en foros de Estados Unidos y Europa.
El son arribeño se crea y recrea en la parte media de San Luis Potosí, así como en el norte de Querétaro y de Guanajuato, que incluye la sierra Gorda y la sierra de Xichú. Su momento máximo son las ''topadas" o confrontación de versadores, las cuales pueden durar hasta 12 horas, de la noche a la mañana.
Este son o huapango arribeño es vecino y primo del huapango o son huasteco. De hecho, los instrumentos son los mismos: dos violines, guitarra quinta o huapanguera y jarana, aunque el son arribeño también utiliza vihuela.
El gallo y la gallina
Pero Chessani y su grupo no sólo dominan estos dos tipos de son, pues en sus presentaciones y grabaciones suelen tocar también sones y jarabes michoacanos. De este repertorio ''surtido" es ejemplo su casete número 19, presentado de manera reciente.
''Los sones huastecos se prestan más a los temas amorosos y chuscos, como El gallo, una controversia, pelea o contrapunteo entre un supuesto gallo y una supuesta gallina. Yo hago al primero y mi esposa (Hilda María Cabriales), a la segunda", dice Chessani.
Como ejemplo de son arribeño, en este casete debe destacarse Zapata y Villa van a volver, que comenta la situación de pobreza de los campesinos mexicanos. La grabación salió dos días antes de la toma de posesión de Vicente Fox, pero pronto lanzarán el casete número 20, donde repasarán los primeros meses de ese gobierno y asuntos como la marcha zapatista. Chessani adelanta una de las décimas:
''Marcos, el subcomandante/ es parte de nuestra historia/ en lucha con mucha euforia/ por un México constante/ es cual volcán arrasante/ como fiero vendaval/ el que destroza el bozal/ del indígena afligido/ y como él también yo pido/ por más justicia social."
--Como trovador, ¿cuál es su opinión de los primeros meses del foxismo?
--Es muy prematuro decir que con Fox llegaremos al triunfo máximo. Puede ser que cambie la situación porque él tiene otra ideología diferente a la del PRI. Tiene disponibilidad para arreglar las cosas. Fue el primero que se acercó a Marcos, tuvo muchas deferencias para él. Creo que trae ganas de colaborar por el país, por la paz y por un México nuevo.
--¿Y en el caso del IVA?
--Ahí sí nos partió don Vicente Fox. Yo no soy economista y no podría opinar si es cierto lo que anuncian, pero por lo pronto los alimentos y las medicinas será algo de lo que se tendrán que reprimir muchas personas.
Luchador del tablado
Este trovador publicó en 1999 el libro Canto al gusto y a lo que arde. Décimas, valonas, sextetas y cuartetas de Elías Chessani (Instituto de Cultura de San Luis Potosí). Autora del prólogo, su esposa Hilda María describe así a Elías, médico de profesión y cuyo primer apellido es Naif:
''Es altamente sensible, le conmueven las desgracias y las hace suyas; también es violento y brioso, no le gusta dejar que se le humille. Las topadas en las que ha participado dejan un testimonio en su carácter como un luchador del tablado."
Controvertido, Chessani fue amagado por el Estado Mayor Presidencial durante la campaña de Carlos Salinas para que no ofendiera a éste ''sin razón" con sus versos, aunque finalmente el político lo apoyó para crear la escuela de huapango en Río Verde. Y en los tiempos de Salvador Nava, Chessani se manifestó opuesto al luchador.
Alguna vez improvisó: ''El poeta es un valiente/ que desafía los destinos/ que expone los desatinos/ del pueblo y su noble gente/ debe ser como un torrente/ como una luz para un tuerto/ como el agua para el huerto/ sangre de un gran corazón/ pero sin libre expresión/ desde cuando hubiera muerto".
El ha topado con los principales trovadores del son arribeño, como Guillermo Velázquez, cabeza de Los Leones de la Sierra de Xichú y con quien mantiene una conocida rivalidad creativa.
Aparte de Chessani en la voz y la quinta huapanguera y Cabriales en la voz, en los Huapangueros de Rioverde participan Rogelio Hernández, primer violín; Nicomedes (Federico) Martínez, segundo violín; Omar Naif Cabriales, vihuela, jarana y segunda voz, además de abogado e hijo de la pareja. En las presentaciones zapatean Rodolfo González y otra hija del matrimonio, Martha Naif Cabriales, también abogada.
De manera reciente el grupo se presentó en Tlacotalpan y El Tajín (Veracruz), Zacatecas, San Luis Potosí y Tamazunchale. El 25 de mayo estará en el festival de Nayarit.