Ť Las Aguilas volvieron a estar a merced del rival, pero los acompañó la fortuna

América herido; Pachuca se impuso 2-0

Ť Andrés Chitiva y Sergio Santana, los anotadores Ť Duilio Davino, expulsado

Pachuca, Hgo., 9 de mayo. Aunque perdió, la fortuna volvió a ser esta noche un aliado del América. Al igual que una semana atrás en León, los de Coapa estuvieron a merced del Pachuca, pero los Tuzos no fueron del todo contundentes y únicamente consiguieron una ventaja de 2-0 en el partido de ida.

En la revancha, las Aguilas necesitarán dos goles de diferencia para ser uno de los invitados a la final del torneo de Verano 2001. Su empresa, no parece imposible.

Desde la primera etapa el Pachuca inclinó el marcador a su favor. Los azulcremas sólo tuvieron un buen arranque. Dominaron territorialmente y al minuto 6 Pável Pardo se animó a disparar desde los linderos del área. El portero Miguel Calero tuvo que emplearse a fondo para desviar el balón, que llevaba como destino el fondo del arco.

Los anfitriones no reaccionaban y la visita seguía monopolizando el control del balón y no dejaba pasar ni el aire en su zaga. Al 22, Calero tuvo otra intervención acertada, al quitarle la pelota a Luis Hernández, quien amenazó al llegar solo al área.

Siete minutos después fue el propio Matador quien lanzó un tiro que el guardameta tuzo, con algunos problemas logró controlar.

Los rezos del portero Hugo Pineda, poco antes del inicio del partido, no eran su único blindaje. El accionar del Pachuca dejaba mucho que desear. No creaba nada de peligro, pero poco a poco el avión empezó a tener piloto.

Andrés Chitiva, Marco Garcés, Pedro Pineda y compañía empezaron a juntarse mejor, y al minuto 31 coronaron una estupenda jugada.

Pineda, por el lado izquierdo, sirvió muy bien para Chitiva, quien entró al área y definió de manera impecable con la izquierda para el 1-0 y los americanistas empezaron a sentir más frío, sobre todo porque hasta Zamorano falló en un remate con la cabeza, en el 43.

Al regreso del descanso, el portero de Coapa tuvo que implorar más que nunca la protección divina. Aunque lo que le llegó primero fue la ayuda terrenal.

Al minuto 54, el árbitro Armando Archundia "les echó una manita" a los azulcremas, al no marcar un penal por la falta de Pardo sobre Chitiva.

Sin embargo, Pachuca no se desanimó y siguió presionando en serio a las Aguilas, que ya no sentían lo duro, sino lo tupido. Alberto Rodríguez desperdició una buena oportunidad, cuando disparó mal, tras llegar bien perfilado por la derecha.

Después, al 58, el arquero Pineda controló un lejano disparo del veterano Sosa. A Chitiva le tocó al minuto 63 echar al cesto de basura un gran pase de Rodríguez y al 70 Sergio Santana dio un cabezazo infame, cuando lo más fácil era fusilar a Pineda.

Al 73, la visita se empezó a complicar más la existencia. Duilio Davino le hizo una entrada de "pocos amigos" a Santana; recibió su segunda amonestación de la noche y, por ende, la tarjeta roja.

La suerte abandonó un momento a los americanistas, porque al minuto 79 Chitiva apenas y alcanzó a pegarle al balón en el área, luego le llegó a Santana, quien remató, pero Santibáñez rechazó.

No obstante, la pelotera ante el marco de Coapa terminó con el segundo intento de Santana. Era el 2-0 y la locura en el estadio Hidalgo.

Los de casa trataron de llegar con un marcador más amplio al estadio Azteca, pero al 89 el mismo Santana cruzó demasiado un tiro y sobre el tiempo Caballero mandó un cabezazo fuera.

América se fue herido, pero no de muerte.