JUEVES Ť 10 Ť MAYO Ť 2001

Ť Exhibición en hotel capitalino; cerrará el 13 de mayo

Collares de perlas desde 800 hasta 120 mil pesos

Ť En México, la perla negra de Tahití es la que tiene mayor demanda

MARIANA NORANDI

"Hay perlas para todos los bolsillos" afirmó este martes Salvador Sandoval, propietario de la empresa perlera Aplijsa, en la exposición de perlas negras de Tahití que se llevó a cabo en el salón Oaxaca del hotel Camino Real. Varias vitrinas exhibieron gran variedad de joyas realizadas con perlas y a pesar de que hubo un predominio de perlas negras tahitianas, se exhibieron perlas de otras caracteríticas y colores. Los precios son muy diversos: se pueden encontrar collares de perlas de 800 hasta de 120 mil pesos. Un anillo desde perla pequeña cuesta alrededor de unos 700, mientras que uno de media perla grande unos mil 200. Pero los elevados precios no sorprendieron a nadie, ya que muchos asistentes, en su mayoría hombres, sacaron su tarjeta de crédito para comprar alguna que otra alhaja. Aunque hubo mucho joyero entre los compradores, el cercano Día de las Madres fue otro de los motivos para adquirir perlas.

perlas-tahiti-5Durante el evento se realizó un desfile que presentó una exclusiva colección de joyería con perlas tahitianas. Cuatro modelos con vestidos largos de licra negra y guantes hasta el codo, a lo Rita Hayworth, mostraron una variada colección de joyas elaboradas con perlas negras de Tahití y piedras preciosas, especialmente diamantes. Perlas engarzadas en anillos de oro, elegantes y clásicos collares de puras perlas negras, hilos rígidos de oro banco con dijes de perlas, aretes de diamantes y perlas, detalles para el cabello, gargantillas y conjuntos de collar, aretes y anillo fue lo que desfiló por la pasarela.

Las perlas se forman en el interior de las ostras perleras de labios negros que habitan bajo las tranquilas aguas de la Polinesia Francesa. Si en un principio la perla se extraía de las profundidades de los mares, actualmente predomina el sistema de perlicultura. Por medio de la intervención del hombre, se estimula el proceso natural de la formación de la perla. La gestación dura alrededor de dos años, y debido a la extremada delicadeza de la ostra perlera, de cien ostras cultivadas sólo se cosechan treinta, de las cuales sólo una o dos serán perfectas. La perfección de la perla influye directamente en el precio de la misma. Se llama imperfección a los defectos de la capa perlífera, los cuales son perceptibles a simple vista como rayaduras, manchas, o arrugas en incrustaciones. Cuanto más perfecta, además de grande y redonda, más caro es su valor. Aunque existen diversos gustos en cuanto a la belleza de la perla, hay personas que prefieren las llamadas perlas "gota", redonda, perfecta y grande; en cambio existen otros que se inclinan por la rareza de la perla, cuanto más rara, más atractiva.

El color de la perla negra de Tahití posee una amplia gama de matices, que va desde el gris hasta el negro. Según Salvador Sandoval, "en México la perla negra de Tahití es la más popular, la que más gusta últimamente". Comenta también que hace 40 años, cuando él comenzó en este negocio, vender una perla en el país era muy difícil, la gente la relacionaba con la forma de una lágrima y pensaba que daba mala suerte. Hoy, el gusto ha cambiado, y la perla es, como en gran parte del mundo, un codiciado y atemporal complemento en la elegancia del vestir.

La exhibición y venta permanecerá hasta el 13 de mayo en el salón del hotel y su horario es de 11 a 20 horas.