Ť Confusión en la SSP sobre las rutas de contingentes

Aplican dispositivo vial "de última hora" en la movilización magisterial

SUSANA GONZALEZ G.

Prácticamente "sobre la marcha" la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP) aplicó el dispositivo de vigilancia y vialidad en torno a la movilización magisterial realizada ayer en la mañana por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) debido a que no conoció, sino hasta último momento, la ruta que seguiría el contingente. Para la policía capitalina los participantes no fueron más de 5 mil y fuera de las complicaciones de tránsito provocadas al paso de los profesores, no hubo ningún incidente.

A diferencia de otro tipo de movilizaciones, esta vez la SSP no pudo planear ni difundir con antelación los cortes viales que realizaría debido a que sólo tenía conocimiento de que los maestros partirían a las 10 horas de la Normal hacia el Zócalo capitalino, pero no se descartaba que los contingentes de provincia determinaran realizar marchas paralelas desde otros puntos de la ciudad.

Así, en su agenda de ayer la Dirección de Inspección de la SSP ?responsable de informar sobre protestas y movilizaciones en la ciudad? se limitó a señalar como "pendiente" el arribo de profesores de diversos estados de la República y preveía que una vez concluída la marcha magisterial, los participantes se trasladarían a las inmediaciones de la Secretaría de Educación Pública (SEP), en las calles de Venezuela y Brasil, para iniciar un plantón. De hecho, la falta de información sobre las protestas de los maestros en la SSP se notó desde el pasado lunes, cuando la citada dirección consideró que se llevarían a cabo posibles marchas del SNTE y la CNTE, pero éstas no ocurrieron.

Por ello, los uniformados se mantuvieron alerta desde temprano para reportar cualquier concentración de maestros que detectaran. Así, el Centro de Información Policial notificó que a las 8:30 había 600 profesores de Michoacán y Oaxaca en el Zócalo, mientras que en San Cosme llegaron 130 en dos autobuses. Otros 120 estaban en la Plaza de Santo Domingo, 70 en la estación del metro Normal y 90 en la calle de Venezuela. Al final, todos se concentraron frente a la Normal, junto con unos cuantos integrantes del CGH y del Frente Popular Francisco Villa.

Aun así, los mismos policías resultaron sorprendidos de que no se siguiera el tradicional recorrido para llegar a la Plaza de la Constitución sobre Ribera de San Cosme, Puente de Alvarado, Paseo de la Reforma, avenida Juárez y Francisco I. Madero. En lugar de ello los maestros disidentes optaran por avanzar por San Cosme, dar vuelta en Insurgentes Norte, rodear la Plaza de la República, hacer una parada frente a las oficinas del ISSSTE, continuar por Reforma hasta Bucareli para protestar frente a la Secretaría de Gobernación y de ahí seguir por Río de la Loza, donde se detuvieron frente a las instalaciones del Tribunal de Conciliación y Arbitraje hasta virar en Venustiano Carranza para realizar un mitin en la plancha del Zócalo, frente al Palacio Nacional.

La confusión sobre el itinerario de la marcha se evidenció a través de los mensajes ?"no nos quieren decir qué rumbo seguirán"? que entre sí se mandaban los uniformados y los jefes encargados de ordenar los cortes viales pertinentes, entre ellos la superintendente Esperanza Galicia, titular del Agrupamiento Femenil. La situación provocó que incluso a mediodía, cuando el contingente avanzaba sobre Río de la Loza, se pensara que en lugar de arribar al Zócalo los maestros habían optado por dirigirse a la residencia oficial de Los Pinos, donde Gerardo Fernández Noroña, dirigente de la Asociación Ciudadana de Deudores de la Banca, pretendía incendiar un juego de boliche para probar que "sí se pueden quemar Los Pinos"  .