MIERCOLES Ť 16 Ť MAYO Ť 2001

Ť Condena de todos los partidos políticos, menos EH

Estalla paquete-bomba a periodista vasco; culpan a ETA

ARMANDO G. TEJEDA ENVIADO

Vitoria, 15 de mayo. El periodista vasco Gorka Landaburu fue víctima hoy de un atentado con paquete bomba que le provocó la pérdida del dedo pulgar de la mano derecha, el destrozo de tres falanges y heridas en cara y abdomen, si bien se encuentra fuera de peligro en un hospital de San Sebastián.

La consejería vasca de Interior informó que al parecer ETA es la autora de esta acción, la primera tras las elecciones del domingo pasado, en las que triunfó el Partido Nacionalista Vasco, mientras que la coalición independentista Euskal Herritarrok (EH, señalada como el brazo político de ETA) sufrió un descalabro al perder siete de los 14 escaños que obtuvo en los comicios de 1998.

spain_explosionTodos los partidos políticos, excepto EH, firmaron un documento de condena a este "atentado contra la libertad de expresión".

Landaburu, hijo del que fuera vicepresidente del gobierno vasco en el exilio y reconocido antifalangista, recibió constantes amenazas por parte del entorno radical separatista ?su casa fue atacada en varias ocasiones con cocteles molotov y pintas en las que se leía "txakurra (perro) de la pluma"? lo que aumenta las sospechas de la autoría del grupo armado vasco.

ETA irrumpió en el escenario con este nuevo ataque contra los profesionales de la información, objetivos en más de una veintena de acciones del grupo armado.

Landaburu, colaborador del semanario Cambio 16 y de la emisora de radio Onda Cero, recibió ayer en su domicilio en la localidad de Zarautz, cerca de San Sebastián, un paquete-bomba camuflado en un sobre de una publicación que recibía en forma periódica, por lo que ni él ni sus escoltas sospecharon del contenido. Alrededor de las 10:30 de la mañana el paquete estalló y destrozó las ventanas y la fachada de la casa.

El periodista milita en el Partido Socialista de Euskadi (PSE) desde 1993, es miembro de la organización no gubernamental Gesto por la Paz, lo que le hizo blanco de varios atentados, y es hijo de Francisco Javier de Landaburu, quien fue diputado del Partido Nacionalista Vasco (PNV) durante el gobierno de la República de Manuel Azaña y que pasó posteriormente al exilio en París, donde fue vicepresidente del gobierno vasco en el exilio.

En caso de confirmarse la autoría de ETA en el atentado contra el periodista, el grupo armado comete su segunda acción violenta en menos de cinco días: el viernes un coche-bomba explotó en pleno centro de Madrid y causó heridas a siete personas. Las autoridades responsabilizaron a ETA de la explosión en la capital.

Tras el anuncio de la ruptura de la tregua unilateral, en noviembre de 1999, ETA lanzó una severa ofensiva contra los periodistas que no coinciden con las ideas nacionalistas, entre ellos se encuentra el asesinato del columnista de El Mundo y miembro del Foro de Ermua, José Luis López de Lacalle, y el atentado fallido contra la redactora de El País, Aurora Intxausti y su esposo, también periodista, Juan Palomo. El año pasado se perpetraron 23 ataques contra emisoras y sedes de medios de comunicación en actos de violencia callejera.

El ayuntamiento de Zarautz aprobó un manifiesto de condena con los votos a favor de el Partido Nacionalista Vasco (PNV), su socio Eusko Alkartasuna (EA), el Partido Popular (PP) y el PSE, y con la abstención de EH, en el que señala que "una vez más, el fanatismo y la intolerancia de quienes se creen en posesión de la única verdad ha intentado traer la tragedia a nuestro pueblo". Este miércoles se realizará en San Sebastián una manifestación contra la violencia de ETA.

El presidente del gobierno vasco en funciones, Juan José Ibarretxe, manifestó también su "firme condena" tras acudir al hospital a visitar al periodista.

Horas antes del atentado, el consejero vasco del Interior, Javier Balza, advirtió sobre una inminente ola de ataques por parte de ETA "para demostrar que sigue existiendo".

El PP rechaza "mesas a la irlandesa"

En Madrid, el Ejecutivo español, el conservador José María Aznar, se reunió con la cúpula del PP para analizar los resultados del pasado domingo, que significaron un fracaso en su estrategia para desalojar del poder a los nacionalistas vascos.

Aznar no quiso hacer ninguna declaración, aunque medios de prensa citaron a "una persona cercana", quien declaró que el jefe de gobierno afirmó que "el nacionalismo no se ha fortalecido, sino que se ha reagrupado, ya que son los mismos, pero agrupados de otra manera".

Aznar también habría señalado que el triunfo nacionalista en los comicios "es un espejismo", porque el nacionalismo vive un "estancamiento" en la región, y envió un mensaje a sus correligionarios, al señalar que el País Vasco sufrió un cambio importante, ya que el domingo tuvo "una posibilidad real de alternancia".

Javier Arenas, secretario general del PP, señaló en rueda de prensa que la política de su formación será la de "mantener un diálogo institucional" con el gobierno vasco, pero que en ningún caso acudirá a "mesas a la irlandesa que pretendan reventar las instituciones", en alusión a lo señalado ayer por Xabier Arzalluz para sentar las bases del futuro proceso de paz.

Arenas reiteró que el PP sostiene su ideario basado en el acatamiento de la Constitución y el Estatuto de autonomía, y reiteró el rechazo de los conservadores a la independencia del País Vasco.

Ibarretxe, reelecto como lehendakari, informó que en la primera ronda de contactos estarán todos los partidos políticos, incluida EH, si bien añadió que su gobierno no tendrá "relación institucional ni diálogo político normalizado" hasta que la coalición independentista se separe de la violencia de ETA.

"El mensaje de la sociedad vasca es nítido: rechaza la violencia", agregó y afirmó que las puertas de la Lehendakaritza "están abiertas" para recuperar las relaciones institucionales con Madrid y el PP.