MIERCOLES Ť 16 Ť MAYO Ť 2001

Ť 9 mil muertos en abril

Impide el embargo salvar vidas, denuncia Irak

REUTERS Y AFP

Bagdad, 15 de mayo. El gobierno de Irak denunció este martes que unas 9 mil personas, en su mayoría niños, murieron en abril de este año a causa de enfermedades que no pudieron se combatidas adecuadamente debido al embargo económico impuesto por la Organización de Naciones Unidas, luego que invadió Kuwait en agosto de 1990.

El Ministerio de Salud señaló que 5 mil 696 niños menores de cinco años murieron el mes pasado a causa de diarreas, problemas pulmonares o respiratorios y otras enfermedades relacionadas con la desnutrición, cifra que, resaltó, contrasta con los 347 fallecimientos registrados en abril de 1989, un año antes de la imposición de embargo.

Igualmente, 3 mil 1021 adultos perecieron por problemas cardiacos, diabetes y cáncer.

Irak está sometido, desde su invasión a Kuwait en agosto de 1990, a un embargo de la ONU que se mantuvo a pesar de que el país árabe fue expulsado del emirato por una coalición multinacional encabezada por Estados Unidos a principios de 1991.

El bloqueo ha provocado una devastación de su infraestructura, pero principalmente ha disminuido la calidad de vida del pueblo, por lo que desde entonces, afirmó el ministerio, el número de víctimas se eleva a un millón 489 mil 959.

Sin embargo, desde diciembre de 1996 la ONU flexibilizó ese embargo, y mediante el programa petróleo por alimentos, se permite a Irak adquirir productos de primera necesidad con las ganancias de sus ventas petroleras para disminuir el impacto que tienen las sanciones sobre una población de 23 millones de habitantes.

La ONU también ha ofrecido eliminar las restricciones alimentarias si Irak permite que los inspectores de armas regresen al país después de dos años de ausencia, pero Bagdad se ha negado en repetidas ocasiones y exige que la ONU levante las sanciones sin condiciones, al alegar que ha cumplido con sus obligaciones de acuerdo con las resoluciones del Consejo de Seguridad para eliminar las armas de destrucción masiva.