MARTES Ť 22 Ť MAYO Ť 2001

Ť En ella "hay todo, menos autonomía; nos dice cómo debemos gobernarnos", afirma

Obsoleta, la Ley Orgánica de la UNAM: Cazés

Ť Abrirán página en Internet para informar de los trabajos del Consejo Universitario

El grupo de trabajo del Consejo Universitario comenzó en su sesión de ayer la revisión y análisis de las propuestas que recabó la coordinación de Reforma Universitaria; además está trabajando en la definición de los criterios básicos para analizar las posibles fórmulas de conformación de la comisión especial organizadora del congreso universitario y los mejores mecanismos de consulta a la comunidad.

De igual forma, se acordó abrir una página de Internet para mantener informada a la comunidad universitaria de los trabajos del grupo, mismo que lo integran 15 consejeros, entre directores de escuelas y facultades, investigadores, profesores, alumnos y un trabajador administrativo. José Narro Robles, quien es coordinador general de la reforma universitaria, también forma parte de dicho grupo, con voz y sin voto.

El director del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades, Daniel Cazés Menache, dijo que el congreso universitario ofrecerá un espacio ideal de reflexión para modificar, modernizar y encaminar adecuadamente las tareas sustantivas de la UNAM para el siglo XXI.

Entrevistado luego de participar en la inauguración de la primera Feria del Libro de la Torre II de Humanidades, el investigador señaló la necesidad no sólo de revisar con "mucha atención" la Ley Orgánica de la UNAM, sino también los estatutos general y particulares de la casa de estudios, con la participación de los diversos sectores universitarios.

Consideró que el ordenamiento jurídico universitario actual es obsoleto, pero sobre todo limitativo. "En la ley hay todo, menos autonomía, porque señala que la institución es autónoma, pero nos dice cómo debemos gobernarnos, cuáles son nuestras autoridades y qué es lo que tenemos que hacer".

"Tal vez fue útil en 1945; quizá era lo que se necesitaba en ese momento. Sin embargo, ahora tenemos que revisarla y mientras se revisa y se aprueba una nueva Ley Orgánica, los universitarios debemos asegurar que el Congreso de la Unión votará la ley que la comunidad en su conjunto proponga y no la que se le ocurra a algún senador o a un grupo de diputados".

Cazés Menache reiteró que el congreso universitario no es un gran acontecimiento o una catástrofe, sino un proceso necesario que llevará tiempo. "Un espacio para la discusión sin vociferaciones, sin discusiones estériles, una movilización universitaria para transformar la institución".

Lo importante del Congreso, afirmó, es que quienes tienen visiones diferentes y contrapropuestas lleguen a consensos y hagan compromisos y pactos para transformar a la Universidad Nacional Autónoma de México con base en ello, y se mantengan espacios abiertos para continuar la discusión en aquellos aspectos en los que no se han logrado acuerdos comunes.