Ť Votan a favor de desaforar a ex líder del Congreso

Exigen miles de estudiantes investigar casos de corrupción en Brasil

AFP Y DPA

Sao Paulo, 23 de mayo. Tratando de emular la protesta de los "caras pintadas", que en 1992 pidieron la destitución del ex presidente brasileño Fernando Collor de Mello, miles de estudiantes protestaron este miércoles en esta ciudad, para exigir que se investiguen las denuncias de corrupción que pesan sobre el gobierno del presidente Fernando Henrique Cardoso y parlamentarios.

En tanto, 13 de los 15 integrantes del Consejo de Etica del Senado brasileño, se votaron en favor de abrir un proceso de desafuero contra el ex presidente del Congreso, Carlos Magalhaes, y contra el ex jefe de la bancada oficialista de la Cámara Alta, José Roberto Arruda, ambos acusados de violar el secreto del voto en el Congreso, el año pasado. Cardoso, mientras tanto, acusó a la prensa y a la oposición de crear un "clima de fascismo y terror moral insoportable" que amenaza, según él, la estabilidad política del país.

En una entrevista con el diario O Globo, Cardoso aseguró: "Las tripas del gobierno están abiertas, todo está siendo investigado. Continuaré garantizado la libertad de los que me atacan, pero no voy a aceptar que me llamen corrupto".

Bajo el lema "los cara pintadas regresan a las calles", los manifestantes fueron convocados por la Unión Brasileña de Estudiantes de Secundaria, con apoyo de otras organizaciones estudiantiles y sindicales como la Central Unica de los Trabajadores, cercana al opositor Partido de los Trabajadores.

Congregados en la principal avenida financiera de Sao Paulo, los estudiantes gritaron consignas como "Fuera Cardoso", "Basta de Corrupción", "Brasil exige una Comisión Parlamentaria de Investigación".

Danilo Moreira, uno de los líderes estudiantiles, dijo que "los caras pintadas son una marca, el grito de guerra de los estudiantes brasileños contra la corrupción", que lograron la destitución de Collor.

Los senadores de la Comisión de Etica votaron tras debatir durante siete horas el desafuero de Magalhaes y Arruda, al considerar que las irregularidades en las que ambos están implicados ameritan investigación y un proceso judicial, pues estaban en plenas funciones cuando supuestamente manipularon el voto parlamentario al violar el panel electrónico de votación, el pasado 28 de junio.

Esto se habría hecho con el fin de expulsar al parlamentario Luiz Estevao de Oliveira, acusado de un presunto uso indebido de recursos estatales.