JUEVES Ť 24 Ť MAYO Ť 2001

Ť Hoy arranca programa nacional para educar y concientizar a la población femenina

Mueren diario 9 mexicanas por cáncer de mama

Ť En la última década el número de decesos por esta causa aumentó 58%: Secretaría de Salud

CAROLINA GOMEZ MENA

Pese a que el cáncer de mama es curable en 90 por ciento de los casos si se detecta en su primer estadio de desarrollo, durante la última década las muertes por este mal aumentaron 58 por ciento en el país, lo que evidencia que las mujeres mexicanas no se practican la autoexploración periódica de sus senos, el principal método de detección temprana, reveló Lourdes Quintanilla, directora de Salud Reproductiva, de la Ssa.

En conferencia de prensa, en la que se informó que la Secretaría de Salud emprenderá una campaña nacional para educar y concientizar a las mujeres, a fin de que se realicen una vez al mes una exploración mamaria, y que arrancará hoy con el inicio del primer Seminario de Actualización en Detección Oportuna del Cáncer de Mama -organizado por la Ssa y Johnson & Johnson Medical-, la funcionaria destacó que aproximadamente nueve mexicanas mueren a diario por tumores invasores que se originaron en el tejido mamario.

Sostuvo que por su ritmo de crecimiento, las defunciones a causa de este mal son un problema emergente, y consideró paradójico que "siendo este un cáncer que sí se puede prevenir y detectar a tiempo", hoy sea la "segunda causa de muerte".

Detalló que el año pasado fallecieron 3 mil 750 mexicanas, "dato que nos asusta" y que por lo tanto da a esta problemática el carácter de asunto prioritario en salud pública.

Los factores de riesgo para padecer cáncer de mama son contar con más de 40 años (aunque también se ha detectado en mujeres de menos de 30), tener antecedentes personales o familiares de este tipo de mal, no haberse embarazado, haber tenido la primera menstruación antes de los 12 años y la última después de los 52, ser obesa (consumir dieta rica en grasas) y haberse embarazado después de comenzada la tercera década de la vida, entre otros.

De acuerdo con la norma oficial mexicana para la prevención, diagnóstico, control y vigilancia epidemiológica del cáncer de mama, se recomienda que las mujeres con dos o más factores de riesgo se realicen una mastografía (estudio radiológico) cada uno o dos años, de los 40 a los 49 años de edad, y en forma anual a partir de los 50.

Otra forma para detectar el mal es la biopsia, en la cual se somete a inspección microscópica una muestra de tejido mamario. Cuando se da el caso de tejido con cáncer y el mal se encuentra en estados 3 y 4 se debe comenzar un tratamiento que consiste en cirugía -radical o conservadora-, quimioterapia, radioterapia y hormonoterapia, esta última debido a que el desarrollo de tumoraciones está asociado a la abundancia sanguínea de estrógenos (una de las hormonas sexuales femeninas).

Por su parte, la doctora Mirella Loustat, directora del Programa de Prevención y Control del Cáncer Cérvico-uterino y de Mama, de la Ssa, dio a conocer que de los 10 mil nuevos casos registrados cada año, "sólo entre cinco y 10 por ciento son detectados en las fases precoces".

Puntualizó que al detectar el mal en periodos avanzados, lo único que se puede brindar a las pacientes "es un tratamiento paliativo y no curativo", que les restan calidad de vida a causa de su agresividad, que generalmente se expresa en amputaciones, con lo que generan traumas sicológicos de gran magnitud.

Paralelamente a lo anterior, la transición demográfica y epidemiológica que experimenta México manifiesta una ventaja en la esperanza de vida, la que se sitúa en un promedio de 77.6 años para las mujeres nacidas en el presente año; consecuentemente, cada vez un número mayor de ellas estarán en riesgo de presentar cáncer de mama.