Ť Denuncian vecinos interés político en intento de desalojo

Al pie del Xaltepec, un lugar donde la vida no vale nada

Ť Dicen estar dispuestos a morir, antes que perder sus casas

BERTHA TERESA RAMIREZ

Para más de 90 familias que viven en precarias condiciones al pie del volcán Xaltepec, en la Sierra de Santa Catarina, "la vida no vale nada", dijeron estar dispuestos a morir antes de permitir que los "arranquen" de su único patrimonio del que disponen en este mundo: una casucha, construida en el costado oeste del cerro y que de acuerdo con el programa parcial de desarrollo de esa sierra, constituye una ladera "potencialmente inestable y peligrosa para esa familias".

Durante un recorrido que realizó La Jornada por esa zona, la mayoría de los vecinos dijeron no estar dispuestos a ser lanzados a la calle, externaron su preocupación por el hecho de que la medida pudiera obedecer "más a un interés político" que a un riesgo real".

Indicaron que de ser una zona de alto riesgo como afirman las autoridades, gobiernos anteriores "no habrían permitido que se construyeran en esta zona un depósito de agua con capacidad para 10 mil metros cúbicos del líquido, pues si llegara a ocurrir un desastre, el agua que escaparía sería suficiente para inundar 30 colonias en la parte baja de la Sierra de Santa Catarina".

Señalaron que, de la misma forma, el gobierno no habría construido ahí un destacamento de la policía montada y no habría accedido a proporcionarles servicios de agua, luz y drenaje.

El dirigente del Movimiento Social Quetzalcóatl, Javier Muñoz Velázquez, al cual pertenecen las familias que hace seis años se asentaron en la zona, dijo que técnicamente no hay posibilidades de advertir "cuándo podría ocurrir un deslizamiento de la tierra, podrían pasar 300 o 500 años antes de que ello ocurriera o quizás nunca llegue a ocurrir; para nosotros suena risible el argumento de que estamos en una zona de alto riesgo, dado que no sabemos sí el planeta pueda existir durante ese tiempo, porque como van las cosas, antes de un deslizamiento del volcán Xaltepec que pudiera sepultar a los habitantes que se ubican en sus faldas, puede suceder un desastre nuclear".

De hecho las familias que viven en la zona iban a ser desalojadas el pasado 6 de abril; no obstante, los vecinos señalaron que escaparon de la orden de lanzamiento "que había dado el jefe delegacional René Arce Islas, gracias a que personal eventual de la dependencia nos avisó que el funcionario les había solicitado su apoyo para desalojarnos porque el Gobierno del DF se había negado a proporcionarle personal de seguridad pública para llevarlo a cabo".

La medida resultaba inexplicable "ya que el gobierno central, encabezado por Andrés Manuel López Obrador, ha hablado de que las familias que se encuentran en alto riesgo van a ser reubicadas para elevar su calidad de vida y lo que René Arce quiere darnos es la calle", agregó. A partir de esa fecha los vecinos decidieron montar una guardia que se encargue de velar durante toda la noche el sueño de las 94 familias que habitan en el terreno "pues el jefe delegacional ha contemplado la posibilidad de llamar al Ejército Mexicano para llevar a cabo el desalojo".

Al pie del empinada pendiente, el dirigente, añadió que las personas que habitan en la zona, no son delincuentes, ni invasores, "no hemos despojado a nadie y todo eso cuenta a nuestro favor" . Precisó que los habitantes de Xaltepec compraron ese predio en 1994, al señor Felipe Martínez Vargas del pueblo de Santa Cruz Meyehualco quien cuenta con las escrituras del mismo, igualmente el gobierno lo indemnizó por el tanque de agua que construyó en la zona".

Las familias que se asentaron hace seis años en las faldas del volcán proceden de los estados de Oaxaca, Puebla y Guerrero, se trata de personas que al llegar a la ciudad se emplearon como pepenadores de basura, trabajadoras domésticas, entre estos hay también ancianos jubilados. La organización Quetzalcóatl, a la que pertenecen es integrante de la Organización Democrática Independiente Nacional (ODIN), e integrante de la corriente democrática del PRD.

Un estudio realizado por el doctor Daniel Rodríguez Velázquez, académico de la Escuela nacional de Trabajo Social y del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, advierte que el riesgo en Xaltepec "no está precisado científicamente, e incluso la Dirección General de Desarrollo Urbano, estableció en el año 2000 que los estudios realizados en la zona son preliminares .

 Señaló que la problemática de Xaltepec es de hecho y no derecho, "en primer lugar porque se trata de un asentamiento que como la mayor parte del territorio de la ciudad de México, se ha venido consolidando desde la propia condición de precariedad y pobreza". Sus habitantes compraron legalmente el terreno donde viven "tal como lo expresaron recientemente ante el Tribunal de lo Contencioso Administrativo del DF ante la notificación de desalojo y demolición que les envió la delegación Iztapalapa en abril de este año". El académico dijo que es necesario un nuevo diagnóstico ante la cercanía de las lluvias sin embrago, advierte que "el lucimiento político no ayuda como método, debe tenerse cuidado de no caer en las pretensiones de hacer historia y afirmar: que ahora si vamos a trabajar", sobre bases equivocadas

Hasta hace algunos años, el volcán Xaltepec funcionó como cantera para la extracción de materiales de construcción, con lo que la estabilidad de la ladera se vio modificada y pasó a ser una ladera potencialmente inestable.

El área de peligro, ocupada actualmente por en buena parte por construcciones de materiales resistentes se encuentra dentro de una zona de reserva ecológica, donde frecuentemente se presenta la caída de detritos o fragmentos pequeños.

La modificación de la estabilidad del cerro favorece el fácil desprendimiento de las capas de material piroclástico pendiente abajo.

El movimiento de un volumen considerable originado por una potencial remoción puede ocurrir de manera súbita.

El peligro principal en esta zona tiene que ver con las pendientes pronunciadas que se han inducido y con deslizamiento de laderas que afectan a las viviendas y otras obras ubicadas en la base de la pendiente.

La recomendación en este caso es la reubicación total de las personas ya que no es posible garantizar la seguridad se los habitantes ante los peligros geológicos a los que se encuentran expuestos. (Fuente: Programa Parcial de Desarrollo Urbano de la Sierra de Santa Catarina, Delegación Iztapalapa 2000). BERTHA TERESA RAMIREZ

Darío Mendoza: Lo único que queremos es que nos dejen vivir en paz, nosotros sinceramente compramos con nuestro dinero y tenemos escrituras privadas, no tiene caso que nos desalojen, que nos reubiquen. Las autoridades dicen que nos van a dar departamento, todos aquí sabemos que eso cuesta mucho dinero, nosotros no tenemos para sufragar esos gastos, entonces para que nos vamos a echar a cuestas esa deuda que sería impagable. Nosotros queremos pagar impuestos, es preferible esa a estar viviendo así. Ahorita en lugar de tenerle miedo al cerro, le tenemos miedo al gobierno, al desalojo, aquí hay muchos niños pequeños, hay muchas madres que no merecen eso.
 
 

Raquel Martínez Trejo, viuda: Trabajé 35 años en una cocina económica. Con los centavitos que me dieron al retirarme de ese trabajo compré un predio aquí y construí mi casa. Tengo 68 años. Ahora nos asustan con el desalojo; no somos invasores ni paracaidistas, nosotros compramos aquí. ¿Por qué hace siete años el señor Arce no vio que esto se empezó a vender? ¿Por qué nos permitieron construir?