Ť Pieza de Aceves Navarro y José Luis Cruz que se estrenará en Casa de la Paz
Van Gogh-Artaud... ofrece un recorrido atemporal por las entrañas de la creación
Ť Danza, música, canto y artes plásticas concurren en ese trabajo interdisciplinario
MERRY MAC MASTERS
El próximo 24 de septiembre el pintor y maestro de varias generaciones, Gilberto Aceves Navarro, cumplirá 70 años. Con una diversidad de festejos en la mira -ya se efectuó una sesión de dibujo con su alumnado en el Museo Universitario del Chopo-, y aunque señala que es pura coincidencia, el 1 de junio se estrenará en el Teatro Casa de la Paz (Cozumel 33, colonia Roma), Van Gogh-Artaud. Viaje en la luz del alma, la propuesta dramática que el artista plástico escribió con José Luis Cruz.
Más que una obra de teatro, la pieza constituye el recorrido atemporal por las entrañas de la creación y del inframundo irrecuperable hacia donde la sociedad masificada y globalizada confinó, o desterró, a quienes ''bastardamente ha llamado locos''.
Convertir vidas mediante líneas paralelas
¿Quiénes son realmente los lúdicos?, es la pregunta planteada por el binomio que, mediante atmósferas, ambientes y representaciones sensuales da forma a la búsqueda incesante de la luz, en Van Gogh, y del sentido del alma, en Artaud.
En vez de hacer una biografía de este par de creadores, su propuesta dramática parte de las líneas paralelas en las que fueron convertidas sus vidas. Mientras que Van Gogh se convirtió en un ''suicidado de la sociedad'', como de él decía el mismo Artaud, el escritor surrealista fue colocado en el abismo. El fundador de dicha corriente, André Breton, describía a su compatriota francés como un hombre que al caminar traía un halo de rayos y relámpagos en la cabeza. Aceves Navarro y Cruz, entonces, reivindican el ámbito creativo en donde los personajes logran conservar su libertad. Van Gogh-Artaud... es resultado de un trabajo interdisciplinario con danza, música, canto, artes plásticas, mediante el juego, la crítica satírica, el humor negro y la escatología como reminiscencia casi infantil.
Para Cruz, también director de la puesta en escena, la escatología figura en el montaje porque ''en las sociedades cerradas representa la posibilidad de un respiro, de salir y explorar las tendencias humanas''. La música original es de Arturo Márquez y Luz Angélica Uribe. Por su parte, Márquez fusionó la voz de Artaud con una pieza de tintes vivos y violentos, donde las palabras del escritor francés son lacerantes, heridas aún abiertas.
En la obra, cuya escenografía es de Aceves Navarro, actúan Sergio Acosta, Pedro Sicard, Javier Escobar, Gabriela Reynoso, Angélica Lara, Lázaro Patterson, Susana Payró, Isi Rojano, Layo Oviedo y Luz Angélica Uribe.