JUEVES Ť 31 Ť MAYO Ť 2001
Ť En un comunicado blanquiazules explican su ausencia
Plantan panistas a perredistas que abordarían el caso Robles
Ť Retan los del sol azteca a presentar juntos una denuncia para investigar los gastos de publicidad de la Presidencia
ELIA BALTAZAR
Auditorio lleno y no llegaron. El PAN dejó al PRD con la mesa puesta para el debate que devino conferencia, y emitió en su lugar un comunicado de prensa para explicar su ausencia y, una vez más, insistir sobre los gastos de publicidad ejercidos por el gobierno de Rosario Robles.
Pero antes el PRD había lanzado al PAN un nuevo reto: "Si lo que les preocupa no es el pecador sino el pecado, en este caso los gastos en materia de comunicación social, entonces vayamos juntos a presentar denuncia para que se investiguen los gastos de publicidad de la Presidencia de la República".
Fue así como Carlos Imaz, presidente del PRD en el DF, exigió de Acción Nacional "coherencia" en sus acciones, "si es que en realidad hay una preocupación por la legalidad". No obtuvo respuesta del PAN, que en cambio argumentó en su comunicado que la denuncia que el pasado lunes presentó en contra de Robles ante la Contraloría capitalina no es materia de debate entre partidos, sino de resolución por parte de las autoridades competentes.
Cobardes y misóginos
Al debate convocado por el PRD en la Asamblea Legislativa llegaron los legisladores de este partido Armando Quintero, Gilberto Ensástiga, Clara Brugada y Bernardino Ramos, así como Imaz y el secretario general Agustín Guerrero, quienes acusaron de "cobardía y misoginia" a los diputados panistas Federico Doring y Walter Widmer, así como a su presidente de partido, José Luis Luege.
Puestos a demostrar que no existe irregularidad alguna en el gasto de publicidad ejercido en la administración pasada, los perredistas presentaron diez argumentos mediante los cuales explicaron la legalidad de los recursos ejercidos.
Una a una Ensástiga dio a conocer las razones que dan legalidad al ejercicio del presupuesto dirigido al gasto de publicidad. Explicó las fuentes de financiamiento y el marco legal que facultó a las autoridades a disponer de los dineros. Todo, dijo, dentro del marco de la ley.
"Cuanta cobardía puede haber en aquellos que están dispuestos a difamar y sostener sus mentiras ante los medios, pero no a presentarse ante aquellos a los que ataca, porque sus argumentos no pueden sostenerse por sí mismos", dijo.
Imaz advirtió que los panistas están equivocados si pretenden doblar y callar al jefe de Gobierno del DF, Andrés Manuel López Obrador, para evitar sus críticas sobre las políticas federales. "Ante la oposición del López Obrador a políticas económicas como el aumento de la leche Liconsa, el PAN ha decidido no discutir temas como éste o la venta de Banamex. Y en cambio pretenden presionar para callarlo a él o a Rosario Robles".
Sobre las declaraciones que hiciera el ex empleado de Publicorp, Carlos Franco, Imaz aseguró que no descartan recurrir a una demanda, pero advirtió que en su caso "es el títere y no el titiritero. Y hoy el PAN juega a ser el titiritero".
Quintero, por su parte, recordó la actitud que los legisladores panistas mostraron en su momento, durante la primera comparecencia de Robles como jefa de Gobierno, y que hizo que ésta los llamara misóginos.
Dijo: "Son buenos misóginos, hay que reconocerlo, buenos alumnos del secretario del Trabajo, Carlos Abascal". Pero en el fondo, dijo, no han ganado un debate político ni una sola iniciativa que permita que la ciudad avance en rumbo positivo.
El coordinador del PRD en la ALDF aseguró que el blanquiazul ha hecho de la denuncia un deporte. "Se trata de una práctica nefasta, producto de invenciones que pretenden publicidad". Su objetivo, dijo Quintero, es distraer a la opinión pública de los temas centrales del debate nacional.
Frente a las acusaciones del PRD, el blanquiazul advirtió: "es una pena que con ese nivel acostumbren tratar cualquier asunto y que a estas alturas aún no hayan entendido que la sociedad está cansada de discusiones infructuosas, cuando lo que quiere son soluciones".
Asegura en su comunicado que su denuncia contra Robles no tiene nada que ver con misoginia, sino con "la falta de ética y moral", pues con su campaña de publicidad Robles sabía que obtendría beneficios.