DOMINGO Ť 8 Ť JULIO Ť 2001

Ť Logró el respaldo de la mayoría de los miembros del congreso extraordinario

Joseph Blatter, firme en la presidencia de la FIFA

BuAnos aires, 7 de julio. A la vez que confirmó su presencia en la fase final de la Copa América, el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, consiguió el sábado el respaldo del congreso extraordinario de la entidad rectora del futbol mundial, luego de que su puesto estuvo amenazado por la quiebra de la empresa ISL, que manejaba los derechos de comercialización del Mundial 2002.

En el tercer día de sesiones, el congreso ratificó la condena de la FIFA al racismo, la creación de un tribunal arbitral especial, el nuevo sistema de traspasos de jugadores y la rotación del Mundial, que empezará con Africa en 2010.

Blatter fue aplaudido de pie por los 204 delegados, ante lo cual dijo: "la FIFA está más fuerte y unida que nunca", pero advirtió que esto no le ha dado "un cheque en blanco" para su posible relección en un congreso ordinario antes del Mundial.

Uno de los temas que más afectan la gestión de Blatter es la quiebra de ISL, que provocó un déficit presupuestal de 51 millones de dólares, pero, dijo el funcionario, "tenemos 13 de los 15 patrocinadores globales que necesitaríamos para funcionar en pleno. Están en marcha las negociaciones con los dos restantes, uno del sector de Internet; estoy seguro de que lo acordaremos antes del verano".

El nuevo sistema de traspasos consiste en que los jugadores serán dueños de su pase tras concluir el contrato con su club. Esta disposición tiene como límite para entrar en vigor el 1Ɔ de septiembre. De igual manera se acordó, entre otros puntos, que si un club contrata a un jugador menor de 23 años tendrá que pagar una compensación económica a la institución que lo formó.

La enmienda al artículo 63 para la creación de un tribunal arbitral de futbol tendrá como función resolver "las disputas que atañen a la FIFA, confederaciones, asociaciones nacionales, ligas, clubes, jugadores, funcionarios y agentes con licencia" y será "la instancia jurisdiccional suprema", con lo que busca prescindir de los tribunales ordinarios de cada país.

Los presentes aprobaron la entrada en vigor de un calendario unificado a partir del 1Ɔ de enero próximo. AFP Y DPA