JUEVES Ť 12 Ť JULIO Ť 2001

Ť El general en retiro critica la "baja" sanción que recibieron dos soldados homicidas

Señala Garfias desigualdad de la justicia militar

Ť En el caso de Gallardo hay una clara intención del sistema castrense por afectarlo, dice

JESUS ARANDA

La sentencia de menos de 13 años impuesta a los dos oficiales que asesinaron a un joven en San Juan Ocotán, Jalisco, en 1997, es una sanción "baja" que demuestra la falta de uniformidad de criterios de la justicia militar para castigar a los soldados que violan la ley.

Señaló lo anterior el general retirado Luis Garfias Magaña, quien recordó que el castigo impuesto al teniente coronel Julián Guerrero Barrios y al capitán primero Rogelio Solís Aguilar -13 años y destitución del empleo e inhabilitación por el mismo periodo- contrasta con la forma en que fue juzgado el general Francisco Gallardo Rodríguez, quien por tres delitos menores fue sentenciado a 28 años de cárcel.

Garfias Magaña sostuvo que la condena inicial que emitió el Supremo Tribunal Militar en contra de los dos oficiales, por los delitos de "violencia contra las personas causando homicidio, infracción de deberes comunes a cada militar, inhumación clandestina y secuestro", no fue ni con mucho la pena máxima que establece la ley para esos casos.

Tan no fue grave la pena, expuso, que la inhabilitación del teniente coronel y del capitán por la muerte de Salvador Jiménez López, en diciembre de 1997, se limitó al tiempo que estarían en prisión, lo cual les permitiría eventualmente regresar al Ejército cuando cumplan su castigo.

Aunque quizá influyó el hecho de que el teniente coronel sea hijo del general Gregorio Guerrero Caudillo, quien recientemente se retiró del Ejército, comentó Garfias.

En cambio, añadió, en el caso de Gallardo, a éste la justicia militar le sumó las condenas máximas de los tres delitos menores que le imputaron para sumar más de 28 años de prisión, así como la inhabilitación definitiva, lo cual muestra un claro interés del sistema judicial castrense para afectarlo.

Incumple Vega García compromisos

Por otra parte, el general Garfias se quejó de que después de ocho meses, el secretario de la Defensa Nacional, general Ricardo Clemente Vega García, no ha cumplido con su compromiso de mejorar las pensiones de los más de 70 mil soldados que hay en situación de retiro.

Seguimos esperando, dijo, que se haga efectivo el incremento de 8.5 por ciento a las pensiones de los militares, ya que dicho aumento sólo fue percibido por los soldados en activo.

Comentó que también, como parte de las tareas pendientes en el Ejército en materia de asistencia social, está la modificación del Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (ISSFAM), a fin de que el concepto 64 (ayuda vitalicia a los soldados y pensionados, que se deja de entregar a los familiares a la muerte del militar) sea modificado, para que los deudos de los soldados perciban íntegra la pensión correspondiente.

Explicó que, si de por sí las pensiones de los soldados son bajas -un general de división con casi 50 años de servicio percibe alrededor de 13 mil pesos mensuales-, no es justo que al morir el soldado se reduzca en un tercio la pensión que perciben sus familiares.

Garfias sostuvo que para evitar estos problemas, el concepto 64 debe incluirse al salario de los soldados y a la pensión correspondiente.