JUEVES Ť 12 Ť JULIO Ť 2001
Ť El gobierno enfrentará expresiones de desigualdad, dijo
Control demográfico, sin dañar derechos humanos: Creel
Ť Sarukhán destacó el contraste de los "dos Méxicos"
ALONSO URRUTIA, RENATO DAVALOS Y KARINA AVILESX
La obligación del gobierno es hacer frente a las "múltiples expresiones de la inequidad demográfica" que se entrelaza con la miseria, admitió ayer el secretario de Gobernación, Santiago Creel, luego de dialogar de política social y pobreza con el comisionado del área, José Sarukhán Kermez.
El progreso macroeconómico no se ha reflejado en progreso social, externó por su parte el ex rector de la UNAM y hoy comisionado de Desarrollo Social del gabinete foxista. No quiso calificar como "neoliberal, ni de ninguna otra manera" al gobierno de Fox. Y se refirió también a los dos Méxicos contrastados socialmente.
Creel, en la celebración del Día Internacional de la Población, aludió al círculo vicioso de la pobreza que sólo puede romperse mediante la ampliación de las capacidades y oportunidades de las personas.
Frente a los responsables de las políticas demográficas de los estados y el director del Consejo Nacional de Población, Rodolfo Tuirán, el secretario de Gobernación destacó la necesidad de utilizar los instrumentos demográficos para impulsar políticas tendientes a reducir la desigualdad social y promover una distribución más equilibrada de la población en el territorio nacional.
Tienen que aprovecharse las oportunidades en esta etapa de transición demográfica que enfrenta el país. Es nuestra obligación enfrentar los retos económicos y sociales derivados del cambio en la estructura por edades y aprovechar las oportunidades que se derivan del rápido aumento de la población en edades laborales.
Por su parte, Tuirán comentó que pese a la sustancial reducción del ritmo de crecimiento natural de la población, México sigue experimentando un incremento de 1.7 millones de personas por año.
Tuirán mencionó que la pobreza, la marginación y las formas diversas de vulnerabilidad social se manifiestan, entre otros síntomas, en la incapacidad de las personas para dirigir su vida y futuro, así como en sentimientos de precariedad, indefensión, impotencia, inseguridad y exclusión.
Por todo ello, destacó la imprescindible necesidad de "emprender un ataque frontal contra la pobreza y vulnerabilidad", pues sólo por esta vía será posible superar las insuficiencias y desigualdades del desarrollo.
Creel subrayó que el fin de las políticas demográficas es elevar la calidad de vida de la población.
Dijo que las políticas poblacionales son derivadas de una decisión soberana y autónoma del país, mismas que están formuladas bajo un marco de "respeto irrestricto a las libertades y derechos de las personas; están plenamente identificadas con nuestra cultura, idiosincrasia y valores".
En consecuencia, apuntó, el despliegue de las diversas acciones de control demográfico parte de tres valores básicos: la inviolabilidad de la persona, el respeto a su autonomía y libertad de reconocimiento a su dignidad.
Debemos entender que existen elementos indispensables en la definición de una política integral de población: garantizar el pleno ejercicio de los derechos humanos; favorecer una mayor capacidad de decisión, libertad y autonomía de las mujeres en todas las áreas de la vida ciudadana y transformar la forma de la relación con el hábitat.
Estamos a una distancia muy grande del desarrollo integral, admitió entrevistado en el seminario Innovación tecnológica y desarrollo humano, convocado por la ONU.
A su juicio, sí han habido algunas anomalías como la riqueza en extremo y "algunas mejorías", en el alivio de la pobreza. No obstante, "tenemos una tarea muy grande" y aunque se hayan mejorado "pequeños puntos porcentuales", el problema no está resuelto, detalló más tarde en un foro universitario.
Se requiere una política económica que tenga a la sociedad como el objetivo central, apuntó.
En el foro tecnológico convocado por Naciones Unidas, Sarukhán dijo que a nadie deja satisfecho que México haya sido colocado en el lugar 51 en cuanto a desarrollo humano se refiere. Refleja el gran contraste social. Ello, pese a que el país tiene una de las economías más grandes de la región.
Creo que los dos Méxicos tienen que conjuntarse; "ese es el eje central de la política del presidente Fox", aseguró.
Además, adujo que una de las "preocupaciones fundamentales" del actual gobierno es hacer llegar a las zonas más marginadas "el acceso a las vías electrónicas".
A través de ese esfuerzo que coordina la Secretaría de Comunicaciones, añadió, se podrán remitir elementos educativos, de formación y de capacitación laboral, pero se trata de una tarea que no haremos "de la noche a la mañana", pues hay que considerar al gran número de pequeñas comunidades que ni siquiera tienen energía eléctrica.
Si la gente se queda fuera de ese avance, se configurará un "nuevo analfabetismo", es decir, un profundo aislamiento de las corrientes de pensamiento mundial. Además, hay que considerar las bajísimas cifras de acceso telefónico de las comunidades.
En consecuencia "tenemos un retraso gigantesco que deberá resolverse a pasos agigantados".
El propio informe de Naciones Unidas, citó, puso de relieve la importancia de la tecnología en el desarrollo humano. Pero esta condición "no es la panacea" para tal desarrollo.