Ť Anuncia que en la segunda mitad del año el gobierno hará grandes inversiones

Propone Fox un esquema de desregulación al estilo Domino's Pizza; el peso, fuerte, asegura

Ť En China y El Salvador se aprueba un negocio el mismo día que se solicita, señala

JUAN MANUEL VENEGAS

La moneda mexicana tiene "una fortaleza real" y no "necesita estarse devaluando", ya que nuestros niveles de inflación son similares a los de Estados Unidos y Canadá, afirmó el presidente Vicente Fox, quien insistió en su confianza de que en los últimos meses del año la economía nacional "agarrará un poquito más de fuerza y de brío".

En la reunión que tuvo ayer con los secretarios de Desarrollo Económicos de los gobiernos estatales, el titular del Ejecutivo Federal señaló que otro "elemento" que puede favorecer sus expectativas de repunte económico, es que el gobierno hará sus "inversiones grandes, fuertes" precisamente en esta parte del año, además de que insistirá en el programa de desregulación para impulsar la inversión, en un esquema que él quisiera "un poco al estilo de Domino´s Pizza".

Abundó al respecto: "Quiero ir más lejos y plantearnos un compromiso más de fondo en esta materia (de desregulación): yo acabo de visitar El Salvador y acabo de visitar China, el área de Shanghai, y ahí efectivamente trabajan con ventanilla única, sólo que tienen un compromiso un poco al estilo de Domino's Pizza: ahí, a las 10 horas del mismo día el emprendedor o la emprendedora sale ya con sus aprobaciones para arrancar su negocio al día siguiente. ¡No veo por qué nos tienen que ganar El Salvador o nos tiene que ganar China!".

Punzó a los funcionarios estatales: "reto a los estados y reto a mi propia gente (en el gobierno federal) a ver quién es el primero que pone esa ventanilla única, y que resolvamos las cosas en el término de un día. ¡Eso es posible! Sólo creo que le tenemos que poner voluntad, voluntad fuerte".

Mantiene la confianza en el repunte...

En la conversación abierta con los secretarios de Desarrollo Económico (que sostuvieron su encuentro nacional ayer en las instalaciones de la Secretaría de Economía), el presidente Fox hizo una amplia exposición de los factores que le hacen confiar que la economía del país no sufrirá las "turbulencias" que se registran en otras naciones.

"Nosotros estamos firme en materia de reservas, que están por arriba de los 40 mil millones de dólares; en materia de inflación, va a la baja de manera consistente y a la mitad de año, prácticamente ya estamos en la meta que nos habíamos propuesto: una inflación de 6.5 por ciento. Hoy podemos hablar de una inflación, quizá menor al 6 por ciento, para el final del año", indicó.

Esto significa "una gran aportación" a las familias y a los trabajadores, porque su ingreso está conservando su valor.

Los buenos indicadores inflacionarios, agregó, da una "fortaleza real, un sustento real al valor de nuestra moneda, porque ciertamente ya no necesita estarse devaluando si ya no hay diferencias en los niveles de inflación con nuestros socios comerciales (Estados Unidos y Canadá), con los que hacemos el 85 por ciento de nuestro intercambio. Esta debe ser una buena noticia, incluso, para los exportadores".

No sólo eso, dijo Fox, también las tasas de interés van a la baja (igual con miras a alcanzar "la convergencia" con los socios del norte), en tanto que el flujo de inversiones sigue llegando "con mucha fuerza": tanto la inversión extranjera como las remesas de "nuestros paisanos".

En cuanto a la pérdida de empleos, añadió, este fenómeno se ha concentrado en siete estados, mientras que en el resto "no sólo no tienen pérdidas, sino que están ligeramente o sustancialmente arriba" en relación al ritmo de crecimiento de fuentes de trabajo que registraron el año pasado.

Finalmente, señaló que en materia de presupuesto federal "seguiremos manejándonos con plena disciplina; vamos a cumplir con nuestras metas de déficit fiscal, y la administración del presupuesto no será causa de desorden".

Con todo esto, "esperamos que la economía se caliente y agarre un poquito más de fuerza y brío en la segunda parte del año. Debemos esperar que las situaciones vengan un poquito más ágiles", confió el mandatario, teniendo al lado secretario de Economía, Luis Ernesto Derbez, quien la víspera había descartado cualquier mejoría en la economía para los próximos seis meses.