VIERNES Ť 13 Ť JULIO Ť 2001
Ť Arrecian pugnas entre el comercio organizado; disidentes tienen gran peso
Reforma o ruptura, la disyuntiva del CCE
Ť Niega Claudio X. González que se modifiquen estatutos para ser relecto por tercera vez
DAVID ZUÑIGA
A casi 25 años de su creación, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) tuvo ayer una primera reunión con miras a modificar sus estatutos y estructura y determinar quién ocupará el lugar que el año pasado dejó vacante la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco).
Los interesados son la propia Concanaco, la poderosa Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD), el Consejo Mexicano de Comercio Exterior (Comce) y la Confederación Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Conacom), integrada por la ANTAD y por las cámaras de las ciudades de México, Puebla, Guadalajara y Monterrey, disidentes de la Concanaco. El problema es que en la estructura actual del CCE sólo hay un lugar con voz y voto para el comercio organizado. Si bien la Concanaco es por ley órgano de consulta del Estado y las cámaras deben estar afiliadas a ella, la ANTAD y las organizaciones disidentes tienen un gran peso en la economía nacional.
La dirigencia del organismo cúpula buscó inicialmente que la Concanaco se reconciliara con los disidentes y con la ANTAD y que formara un solo bloque representativo de todo el comercio; sin embargo, las pugnas entre comerciantes se han recrudecido a tal punto que cada organismo busca tener su propio lugar con voz y voto.
Luis Santana, presidente de la ANTAD, señala que esto no implicaría desequilibrio y mencionó el caso del sector financiero, que tiene tres organismos en el CCE: la Asociación de Banqueros de México (ABM), la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) y la Asociación Mexicana de Intermediarios Bursátiles (AMIB).
Algunos analistas y empresarios ven esta iniciativa como una táctica del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios (CMHN, que agrupa a los 34 empresarios más poderosos de México) para consolidar su control sobre el CCE.
Al respecto, Santana explica: "Aun cuando un industrial sea consejero y accionista de un banco, su principal interés es la industria porque su capital principal está en esa actividad; lo mismo pasa con los industriales y los banqueros".
Por su parte, el presidente del CCE, Claudio X. González, negó que se planee modificar los estatutos para que él resulte electo para un tercer periodo, como ocurrió en el CMHN. "Yo me comprometí a dos años y con el favor de Dios los cumplo en julio y punto". Confió en que la restructuración del organismo cúpula termine este año.
Ricardo Tirado, del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM y autor, junto con Matilde Luna, de El CCE: una radiografía, considera que "lo más lógico" sería que este organismo se dividiera en tres coordinadoras que aglutinaran a los tres grandes sectores: industrial, financiero y comercial. De esta forma, señala, se contrarrestaría la excesiva representación de "la élite financiera" y se recuperaría cierto equilibrio.