SABADO Ť 21 Ť JULIO Ť 2001
Ť American Express, Northwest Airlines y Coca-Cola
Despiden empresas de Estados Unidos a 8 mil 500 trabajadores
AFP
Washington, 20 de julio. La ola de despidos continúa en Estados Unidos, donde se espera que el desempleo continúe aumentando durante varios meses antes que la reactivación económica prometida por los responsables políticos y económicos dé frutos.
American Express, con 5 mil supresiones de empleos, Northwest Airlines (mil 500) y Coca-Cola Enterprises (dos mil) se sumaron esta semana a la larga lista de empresas que han realizado recortes en sus planillas de efectivos.
Grupos como Compaq, Motorola, Nortel, Alcatel o Corning, que ya habían anunciado planes sociales que incluían miles de despidos, decidieron cesar a un poco más de sus salariados.
Ningún sector se salva de esta sangría y esta tendencia parece que continuará. "Pienso que la mayoría de los grupos va a orientar su política hacia la reducción de costos y del empleo para restaurar su rentabilidad", afirmó Rod Smyth, economista del banco First Union.
Desde comienzos del año, la tasa de desempleo pasó de 4 a 4.5 por ciento de la población económicamente activa y en el segundo trimestre la economía perdió casi 300 mil empleos, según las estadísticas del departamento de Trabajo.
Para el segundo semestre, la perspectiva es sombría y la Reserva Federal (Fed) estadunidense prevé una tasa de desempleo de 4.75 a 5 por ciento a fin de año, con una probabilidad de que suba hasta 5.5 por ciento en 2002.
Por el momento, la confianza de los hogares vacila, pero la multiplicación de los despidos podría afectar la moral de los consumidores.
"Pienso que las olas de despidos prolongarán la desaceleración", indicó este viernes Peter Morici, economista del Instituto de Economía Política.
Con una baja de la confianza, los hogares corren el riesgo de consumir menos, las empresas producirán menos y el crecimiento se mantendrá débil.
Este círculo vicioso debería sin embargo ser evitado, según Morici, que confía en "una reactivación en el segundo semestre" o en todo caso a comienzos del año próximo. La tasa de desempleo "podría aumentar a 4.6 por ciento de aquí a fin de año pero bajará nuevamente el año próximo", pronosticó.
"Las condiciones continúan deteriorándose", subrayó esta semana el presidente de la Fed, Alan Greenspan, quien destacó que "si esta situación persiste, habría que flexibilizar aún más la política monetaria".
"Para que una baja de las tasas tenga efecto deben pasar seis meses, para que tenga un impacto cmpleto, debe pasar más tiempo, y una baja ahora tendría su efecto pleno en febrero del año próximo", dijo Morici.
Previendo bajas de las tasas en las próximas semanas, "Greenspan dice de hecho que la economía va a necesitar ayuda en el primer trimestre del año próximo" y una disminución de las tasas de la Fed "significaría todavía seis meses de desaceleración", añadió.
Todo esto ocurre en un entorno económico mundial preocupante, con un dólar fuerte que encarece los productos exportados por los industriales estadunidenses que, como no los pueden vender, han sido los principales artífices de los despidos.