MARTES Ť 24 Ť JULIO Ť 2001
Homenaje a Katharine Graham
Las exequias de la periodista congregan al mundo político y empresarial de EU
AGENCIAS
Washington, 23 de julio. El mundo político, empresarial y de la prensa de Estados Unidos rindió hoy un homenaje a Katharine Graham, la veterana periodista que dirigió The Washington Post durante más de 20 años, tiempo en el que el rotativo difundió documentos secretos sobre la guerra de Vietnam y el histórico escándalo de Watergate.
El ex presidente Bill Clinton; su esposa, la senadora Hillary Rodham; el vicepresidente estadunidense, Dick Cheney; Ted Kennedy; el presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, y hasta el alcalde Nueva York, Rudolph Giuliani, figuraron entre las 3 mil 700 personas presentes en la ceremonia que tuvo la solemnidad de un acto de Estado.
"The Washington Post fue un permanente crítico de muchos aspectos de la administración en la que yo trabajé. Pero esta aparente paradoja fue completamente superada por la admiración y el afecto que llegué a sentir por Kay como persona", dijo el ex secretario de Estado Henry Kissinger, una de las personalidades asistentes.
El violoncelista Yo Yo Ma tocó una pieza ante el ataúd de Graham, fallecida el pasado martes 17 a los 84 años, a causa de una caída sobre el pavimento cuando asistía a una cita de negocios.
El escándalo Watergate
El informe de The Washington Post sobre el escándalo Watergate, que costó la presidencia a Richard Nixon, significó "un nuevo reconocimiento del importante papel de la prensa independiente", dijo el historiador Arthur Shlesinger.
La ex editora fue recordada como una empresaria exitosa, defensora de la libertad de expresión, mentora de jóvenes mujeres periodistas y una anfitriona excepcional en Washington. Graham fue presidenta del Post durante dos décadas y transformó al rotativo, que su padre compró en bancarrota, en un imperio que abarca diarios, revistas, radio y cable. Katharine Graham tenía 43 años y era madre de cuatro hijos cuando tomó el control del diario en 1963, luego de que su esposo, Phillip Graham, se suicidió.
La rapidez con la que convirtió al Post en un periódico poderoso se hizo visible en la década de los setenta, al hacer público el escándalo de Watergate. Ella fue quien autorizó a dos reporteros del Post, Bob Woodward y Carl Bernstein, a investigar una extraña incursión, el 17 de junio de 1972, en las oficinas del Partido Demócrata, en el complejo Watergate. Este caso de espionaje desembocó en la renuncia de Nixon, el 8 de agosto de 1974.
El Post sintió el peso del enojo presidencial y las críticas de lectores que consideraron que el diario tenía como objetivo atacar a Nixon. "Fue un momento particularmente solitario para el periódico. Muchas veces pensé en privado: Ƒsi ésta es una noticia tan importante, dónde están los demás", comentó alguna ocasión Graham.