Lourdes Galaz
Ť Nada de lo ocurrido en Génova es gratuito
Ť Equipo moderno contra protestas callejeras
Ť Expertos operadores con historia de represión
Un policía de historia negra
SE LLAMABA CARLO Giuliani y tenía 23 años. La foto del joven anarquista, hijo de un sindicalista italiano, dio la vuelta al mundo. Con un tiro en la cara y rematado por la camioneta de los carabinieri, un Carlo inerte fue la imagen viva de la represión de hace una semana allá en el primer mundo. De hecho, para muchos observadores y protagonistas todo apunta a demostrar que los "desórdenes de Génova" son el resultado de una operación policial perfectamente coordinada con el fin de romper la coherencia del movimiento contra la globalización ultraliberal. Sin embargo, el horror vivido por los militantes detenidos, las pruebas filmadas de la evidente colaboración de un grupo de extrema derecha que sembró el caos, la influencia de las ONG que avanzan en la protesta mundial contra la deshumanización del libre mercado, más la intervención de los líderes políticos europeos, no auguran días fáciles para Silvio Berlusconi. Con todo y que el premier italiano dice a su parlamento y al mundo entero un increíble "no ocultaré la verdad... si hubo excesos, abusos y violencia, no habrá encubrimiento para quienes violaron la ley".
NADA DE LO ocurrido en Génova es gratuito. Como ningún hecho represivo es espontáneo en un enfrentamiento policial con ciudadanos inconformes y demandantes. La violencia que se desató en Italia, como la que aquí mismo hemos visto -no hace mucho en Cancún, cuando el Foro Económico Mundial-, marca la voluntad de los Estados occidentales (cuyas policías se capacitan y coordinan) para poner término a las protestas contra la globalización. La Jornada reseñó puntualmente las protestas de contras de la globalización allá en Génova, como acá en Cancún en ocasión del Foro Económico Mundial. En el Caribe mexicano se enfrentó la protesta callejera con un brutal operativo policial, precisamente el día que el presidente Fox acudió al evento. La exigencia de que se investigaran los hechos tuvo respuesta del mandatario y de su flamante equipo de seguridad pública. Como ahora Berlusconi, el presidente Fox ofreció abrir una investigación y aplicar la letra de la ley. Luego por ahí se acusó al comandante de la policía municipal y algunos de los gendarmes a su cargo. No pasó a más.
AQUI MISMO, en esta Página 9 (4 de marzo de 2001) le comenté que al frente del operativo de Cancún habría estado un militar con historia. Decía entonces que así como Vicente Fox ofreció su palabra a los indígenas y al EZLN de que "su movimiento pacífico será respetado" -cuando venían en caravana al DF-, "jamás ofreció a los globalifóbicos que protestaron en las calles de Cancún que no serían reprimidos... Créalo o no, quien responde por el operativo de seguridad de la PFP en las calles de Cancún es el mismo militar que la madrugada del 23 de octubre de 1975 coordinó un desalojo de agraristas en el Valle del Yaqui. La matanza de siete campesinos en San Ignacio Río Muerto le costó la gubernatura al sonorense Carlos Armando Biebrich. Lo conocí entonces como teniente coronel, y su nombre Francisco Arellano Noblecía. Era el jefe de la Policía Judicial del estado. Hoy, ya general, tiene el encargo de su jefe Alejandro Gertz Manero (SSP) de coordinar las Fuerzas Especiales de Apoyo de la PFP".
TRAER LOS RECUERDOS no es gratuito. Por estos días la seguridad pública ha sido noticia a nivel federal. Y allá en el norte, en Baja California y Sonora, la cadena de periódicos Healy ha destacado en la primera plana de sus diarios varias entrevistas, comentarios y notas informativas sobre aquellos sucesos de septiembre de 1975. Todo a propósito de que el general Arellano Noblecía ha tenido que apersonarse en aquella región del noroeste, con motivo de su encomienda en la SSP. El pasado jueves 19 de julio, el general pasó por Mexicali. Y desde entonces la cadena de diarios norteños no ha quitado el dedo del renglón de aquella página de San Ignacio Río Muerto, donde fueron acribillados siete agraristas apostados a las orillas de los campos agrícolas. Eran campesinos sin tierra. Fueron ejecutados con armas para uso exclusivo del Ejército. Hoy, a casi 26 años, las familias de aquellos muertos aún exigen justicia. También algunos protagonistas de aquellas tomas de tierras, las cuales poseían unas cuantas familias del sur sonorense y luego expropió el gobierno federal.
COMO TODA LA semana el asunto estuvo en las portadas de los diarios norteños, hasta el comisionado de Seguridad Nacional en la oficina del presidente Fox ya se comprometió a que se abrirá la investigación. Adolfo Aguilar Zinser ni enterado estaba del asunto. Ocurrió que pasó por Caléxico (frontera con Mexicali) para un evento de la Patrulla Fronteriza, y en declaraciones a los reporteros se comprometió a que remitiría el caso con el secretario Gertz Manero para que se investigue la historia del coordinador de las fuerzas de apoyo de la PFP. Más aún, precisó que la SSP tiene un mecanismo para la selección de su personal y los mandos de la PFP, "que está siendo revisado... ya se hace una depuración". En cambio, ni el general Arellano Noblecía ni su jefe Gertz Manero han hablado del asunto. En privado, el general comenta que "algunos enemigos pretenden acusarme del pasado... de cosas que no fui responsable". En 1975 -lo recuerdo bien-, dos días después de la matanza de los campesinos, el jefe de la Judicial del estado fue retirado del cargo. Semanas después cayó el gobernador Biebrich. Arellano regresó a su base militar, en el Estado Mayor Presidencial.
TRAER A CUENTO por estos días la matanza de San Ignacio Río Muerto pone en la mesa política un caso con demasiadas aristas. Allá en Sonora, el procurador de Justicia del estado, Miguel Angel Cortés Ibarra, ha perdido la memoria y el sueño. En 1975 también tenía a su cargo la Procuraduría estatal y, por lo mismo, de él dependía el teniente coronel Arellano Noblecía, entonces jefe de la Policía Judicial. Y acá en la administración federal, uno de los principales jefes policiacos de la SSP tiene un expediente que puede ser sujeto de investigación, cuando el secretario Gertz Manero denuncia corrupción en la PFP y hasta exige la renuncia del secretario técnico del Consejo Nacional de Seguridad Pública. Más aún, Gertz reúne a los gobernadores y sugiere designar en el encargo a Gloria Brasdefer, con quien el funcionario hizo equipo allá por los setenta en la Secretaría del Trabajo y en la PGR. Si bien recuerdo, el ex jefe de Gertz y Brasdefer, Pedro Ojeda Paullada, era procurador de la República cuando la matanza de campesinos en Sonora. Y hay más, mucho más... como el endurecimiento de las políticas de "seguridad pública" y hasta la adquisición de equipo especial para reprimir las protestas callejeras, como allá en Nuevo León. En fin, si hace 26 años no se abrió una averiguación, será difícil que hoy, con todo y los aires del cambio, alguien ordene averiguar y fincar responsabilidades de aquella ejecución de campesinos sin tierra... es harina del mismo costal, dicen los paisanos de Sonora.
EN 3 TIEMPOS
Gobernar con "una dictadura sería más fácil": Bush
EU legaliza a millones de migrantes
Para impulsar el ALCA, más de 200 mdd a Toledo
SI VICENTE Fox se queja de que el Congreso no le acepta su reforma fiscal, ayer el argentino Fernando de la Rúa logró reunir a los legisladores para sacar adelante un programa de recortes fiscales. Y en Washington, la mayoría demócrata en el Senado entró en una vía de enfrentamiento con el presidente Bush, cuando apenas cumple seis meses en la Casa Blanca. El conflicto de Bush no sólo es con los demócratas. En el Congreso, de mayoría republicana, las divergencias alcanzan desde el aborto hasta la circulación de camiones mexicanos por carreteras estadunidenses. El viernes, un comité del Senado echó para atrás la prohibición de Bush de otorgar fondos a grupos proabortistas en el exterior. Otro comité votó por aumentar las normas de seguridad a los transportistas mexicanos. Cómo estarán las cosas, que ya Bush bromea con que "una dictadura sería más fácil".
CON TODO, POR primera vez el jefe de la Casa Blanca admitió la posibilidad de que millones de inmigrantes ilegales de varios países, no sólo de México, puedan obtener la residencia permanente. Y aunque cualquier plan de Bush tendrá que ser aprobado por el Congreso, para evitar cualquier suspicacia por un tratamiento especial a los mexicanos, ya el texano declaró esta semana que "se considerará a todo el mundo en este proyecto... todas las opciones están sobre la mesa". Será difícil para los personeros de Bush el cabildeo en el Congreso, hasta con los republicanos. El ala más conservadora de su partido exige al presidente una clara justificación. Bush hace política y quiere el voto de los latinos, también el de los empleadores que le exigen mano de obra barata... por lo pronto la intención es ganar el voto de los hispanos.
Por fin el presidente peruano asumió el poder, precisamente en el 180 aniversario de la independencia de su país. Todavía no juraba ante el Congreso ni portaba la banda presidencial, cuando Alejandro Toledo, de 55 años, ya había recibido el apoyo contante y sonante del gobierno de EU. El representante comercial de la Casa Blanca, Bob Zoellick, ofreció a Toledo 206 millones de dólares en programas de asistencia económica, todo para reconocer los esfuerzos por llevar a Perú a la democracia. Y es que según Zoellick, "el libre mercado florece mejor en un ambiente democrático". Para Washington, el nuevo mandatario peruano que en el pasado reciente se empleó en el Banco Mundial, ahora podría ser "el mejor amigo" de EU en el Cono Sur, para impulsar el libre comercio hasta Tierra del Fuego.