MARTES Ť 31 Ť JULIO Ť 2001

Ť Destaca el positivo desempeño en el abatimiento de la inflación

Crecimiento menor a 2% en 2001, pronostica el BdeM

ISRAEL RODRIGUEZ

El Banco de México ajustó su pronóstico de crecimiento de la economía mexicana para el 2001 al reducirlo a menos de 2 por ciento, informó Armando Baqueiro, director general de Investigación Económica del instituto central, al precisar que el crecimiento del producto interno bruto (PIB) en el segundo trimestre del año será también menor a uno por ciento.

Explicó que ''tanto la expansión de la economía de Estados Unidos como la de México probablemente resulten más lentas que las originalmente pronosticadas para el segundo semestre. Como consecuencia, la economía mexicana seguirá registrando un crecimiento por debajo de su potencial''.

El funcionario admitió que persiste la incertidumbre acerca de una pronta recuperación de la actividad económica en Estados Unidos. ''La opinión de los analistas es que su crecimiento será de apenas 1.14 por ciento en el segundo trimestre y de 1.6 por ciento para todo el año''.

En conferencia de prensa donde presentó el informe sobre la inflación del segundo trimestre del año, Baqueiro Cárdenas destacó el positivo desempeño en el abatimiento de la inflación que a junio, en términos anualizados, fue de 6.57 por ciento, nivel ligeramente superior a la meta establecida por el banco central al situarla por abajo de 6.50 por ciento para todo 2001.

Durante la semana pasada, el presidente Vicente Fox estimó en declaraciones públicas que la inflación este año sería de entre 5 y 5.5 por ciento. Armando Baqueiro comentó a La Jornada, que ''el Banco de México da a conocer sus metas multianuales con anticipación, menos de 6.5 para 2001, alrededor de 4.5 para 2002 y 3 por ciento para 2003, y esas metas en el objetivo de inflación no cambian. En un objetivo de inflación no es posible ir cambiando las metas, porque creamos ruido a los participantes del mercado'', explicó.

Sobre el entorno internacional el funcionario precisó que los pronósticos de la expansión de la economía de Estados Unidos para 2001 se ubican en un intervalo entre 1.2 y 1.8 por ciento.

Consideró que el precio promedio de la mezcla mexicana de petróleo será de 19.70 dólares por barril y el financiamiento de la cuenta corriente será atendido en lo principal con recursos de largo plazo. Se prevé, agregó, un déficit de la cuenta corriente de 3 por ciento del PIB.

Los principales riesgos externos a los que se encuentra sujeto el escenario base, según el Banco de México son: una desaceleración más pronunciada o una recuperación más lenta de la economía de Estados Unidos; una drástica caída del precio del petróleo y un desenlace desordenado de la situación en Argentina que ponga en tela de juicio la capacidad de las autoridades financieras internacionales para manejar la crisis en los mercados emergentes.

Advirtió que los principales elementos internos de riesgo que podrían modificar el escenario base descrito son un eventual rechazo de la reforma fiscal o la aprobación de una versión con menor alcance recaudatorio que el esperado por los mercados, que diera lugar a un drástico deterioro de las expectativas; que la holgura observada en el mercado laboral no se refleje en revisiones salariales contractuales más acordes con el objetivo de inflación para el año 2002 y con los incrementos previsibles de la productividad de la mano de obra.

Ante esta perspectiva, la junta de gobierno del banco central considera que las condiciones monetarias menos restrictivas que ahora prevalecen, producto de la disminución sustancial que han experimentado las tasas de interés reales, son compatibles con los objetivos de inflación de corto y mediano plazos, pero no se descarta que en un futuro el Banco de México pudiera efectuar un relajamiento de la política monetaria a través de la disminución de los cortos.