VIERNES Ť 3 Ť AGOSTO Ť 2001

Ť La ANP jamás ha respetado el alto del fuego, acusa el premier Ariel Sharon

Pide el Papa que cese toda forma de violencia en Medio Oriente y se reanuden las pláticas de paz

Ť Demanda Arafat a líderes italianos apoyo para el envío de observadores internacionales

AFP, REUTERS Y DPA

Castengaldolfo, Italia, 2 de agosto. El papa Juan Pablo II pidió hoy "con firmeza" que cese toda forma de violencia en Medio Oriente y se reanuden las conversaciones de paz, du-rante una entrevista que sostuvo con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasser Arafat, en la casa veraniega del pontífice, ubicada en esta ciudad.

Al expresar su dolor por las numerosas víctimas causadas por los enfrentamientos entre palestinos y soldados israelíes, el Papa reiteró con firmeza la absoluta necesidad de que "se detenga todo tipo de violencia y se reanuden las conversaciones con la ayuda de la comunidad internacional para obtener la paz", afirmó el portavoz adjunto de Juan Pablo II, Ciro Benedettini.

ITALY_ARAFATPor su parte, Arafat, quien concluyó este jueves una visita de dos días a Italia y el Vaticano, pidió tanto a los numerosos líderes italianos políticos y sociales con los que se entrevistó, como al Papa, que apoyen el envío de observadores internacionales a Medio Oriente para evitar más derramamientos de sangre.

Antes de entrevistarse con Juan Pablo II, el presidente palestino sostuvo un encuentro privado con el primer ministro italiano Silvio Berlusconi.

Según el comunicado del gobierno italiano, Arafat "ilustró la grave situación de los territorios palestinos, expresó su fuerte preocupación por el continuo deterioro de las condiciones de vida y seguridad de la po-blación palestina y pidió al gobierno de Italia a que contribuya al envío de observadores internacionales" a la región.

Berlusconi, por su lado, le reiteró "la voluntad de Italia de servir como mediador en la conflictiva región, con el fin de abrir espacios concretos para las negociaciones de paz", según el comunicado entregado por Roma a la prensa.

En tanto, Tel Aviv cuestionó la credibilidad del llamado que lanzó Arafat en Roma para suspender "toda forma de violencia", indicó un alto responsable israelí.

"No es la primera vez que Yasser Arafat hace este tipo de declaraciones, incluso se comprometió por escrito a poner fin a la violencia, pero estos compromisos nunca fueron cumplidos", declaró Daniel Ayalon, consejero para las Relaciones Exteriores del primer ministro Ariel Sharon.

También descartó, una vez más, la idea de que observadores internacionales puedan ser enviados a Medio Oriente, como lo re-claman los palestinos.

Paralelamente la policía israelí decidió reforzar su dispositivo de seguridad en los alrededores de la Explanada de las Mezquitas, en Jerusalén este ocupado, para contrarrestar eventuales incidentes durante la plegaria musulmana del viernes.

Asimismo, Sharon, afirmó que "la ANP no ha respetado jamás el alto del fuego", y la acusó de ser directamente responsable de la muerte de 45 por ciento de las víctimas israelíes del terrorismo.

Mientras, el jefe de Yijad Islámica, Ra-madán Abdala Shala, prometió este jueves "sangre y guerra" a Israel en respuesta a la operación del ejército de Tel Aviv que costó la vida a ocho palestinos, entre ellos dos niños, el pasado martes en Cisjordania, ante mil partidarios reunidos en un suburbio del sur de Damasco, la capital de Siria.

Por su parte, el grupo guerrillero Hezbollah dijo este jueves a través de un comunicado que Estados Unidos comparte con Israel la responsabilidad por las muertes de palestinos durante los ataques israelíes, e instó a los árabes a lanzarse a las calles en señal de protesta.