Ť El titular de Sagarpa dice no estar preocupado por movilizaciones de jornaleros

En el campo "no hay crisis, sino inconformidades"

Ť Usabiaga admite que el agro "necesita una restructuración total, una cirugía mayor"

ANGELICA ENCISO Y KARINA AVILES

Para el secretario de Agricultura, Javier Usabiaga Arroyo, no hay crisis en el campo, sino una serie de inconformidades. Y pese a ello, aceptó que hay riesgos de que la situación en el agro empeore, pero se defendió: los problemas no vienen de hace ocho meses, sino del pasado. Frente a las movilizaciones que están por venir, pidió a las organizaciones que también asuman su responsabilidad.

Reconoció que la gente del campo no tiene confianza en el gobierno, y sobre las críticas a su trabajo, confió en que "algún día las necesidades superen a las necedades". Para el funcionario, la situación en el campo merece una calificación de cuatro, en una escala de uno a 10, pero ofreció subir cuando menos un punto cada año.

Dijo que todos los cuestionamientos que se emiten "me hacen ruido; qué casualidad que en este momento se hayan dado cuenta de todos los errores". La secretaría asume su responsabilidad, pero organizaciones como el Congreso Agrario Permanente, que han estado vigentes desde hace mucho tiempo, debieron haber hecho sentir antes todas sus inconformidades, sostuvo.

En medio de un periodo de movilizaciones de cañeros, productores de maíz y de arroz, y frente a las que se esperan en los próximos días, entre las que están plantones de campesinos en las delegaciones de la Sagarpa y posibles tomas de puentes aduanales, el funcionario dijo no estar preocupado, "siempre que vengan acompañadas de planteamientos", y precisó que la dependencia a su cargo, "hasta donde sé, no es responsable de las aduanas".

De esta manera respondió a los cuestionamientos que se le hicieron ayer en entrevistas, al término de una reunión con la Comisión de Desarrollo Rural de la Cámara de Diputados y luego de la firma de un convenio con la Secretaría de la Reforma Agraria.

El funcionario sostuvo que su pretensión es la de "resolver los problemas de fondo, no de la coyuntura", aunque después rectificó y dijo que se pretende enfrentar al mismo tiempo los asuntos inmediatos y los de largo plazo. "El campo necesita una restructuración total, una cirugía mayor".

Usabiaga consideró que el agro necesita eficientar sus costos e individualizar las producciones, lo que significa que "cada campesino reciba lo que realmente merece, de acuerdo con la calidad y con el volumen que entregue".

Para él, los problemas de pobreza en el campo se dan "por la escasa rentabilidad y transferencia de recursos de la balanza alimentaria contra la agrícola y pecuaria". Por ello calificó el problema como de "rentabilidad", debido a que de cada peso que paga el consumidor final por un producto, al agricultor "no le llegan ni 16 centavos", y la meta sería que al terminar el sexenio obtuviera entre 65 y 70 por ciento del valor total. Cuando se logre esto el "campo volverá a renacer", dijo.

Expresó que "la mayor de las ignominias es no pagar la raya a un trabajador o una cosecha a un productor", lo cual es totalmente criminal, porque por las razones que esto fuera, "demuestra que esta gente no tiene un compromiso de empresa".

Respecto al problema de mercado que existe en los diferentes productos, destacó que establecerá una política que incluya instrumentos de defensa "de los ataques de otros agentes en los mercados nacionales y fortalecer los internacionales". A cuatro meses de que concluya el actual ejercicio presupuestal, aseguró que no existe subejercicio, pero admitió uno "pequeño" en Alianza para el Campo.

Negociaciones con los cañeros

En relación con la crisis azucarera, el secretario expresó que si contara con empresarios "profesionales, comprometidos", dispuestos a apostarle a su industria, seguramente ésta ya se habría consolidado. En la firma del convenio con la Reforma Agraria, opinó que el "conflicto ya está resuelto", y más tarde, en la Cámara de Diputados, dijo que se resolverá en "breve".

Sin embargo, los integrantes de la unión de cañeros de la CNC anunciaron que mantendrán su plantón frente a las instalaciones de la Secretaría de Agricultura debido a que no se ha llegado a una solución en los ingenios La Concepción, Independencia y San José de Abajo. Ayer estaban a punto de romper negociaciones por la falta de acuerdos con el grupo Seoane, propietario del ingenio Independencia, debido a que había "detalles" en los que no había acuerdos, explicó Pascual Alvarado.

Detalló que en el resto de los ingenios ya están los acuerdos en el papel, pero todavía no fluyen los recursos para los cañeros.