DOMINGO Ť 5 Ť AGOSTO Ť 2001

Ť Ingresó a la misma clínica que Robert Downey Jr.

Ben Affleck admite su adicción al alcohol e inició su rehabilitación

DPA

cine-pearl-harbor-6Nueva York, 4 de agosto. Pocas semanas después del estreno de la superproducción Pearl Harbor, el actor y guionista Ben Affleck ha admitido su adicción al alcohol y ha iniciado una cura de desintoxicación. Para ello, el ganador de un Oscar ingresó en un centro de rehabilitación en Malibú (California), explicó su portavoz en la noche del viernes.

Según David Pollick, Affleck se decidió a seguir una terapia al darse cuenta de que sin whisky, champaña o ginebra puede tener una vida más plena. "Ben ha decidido recurrir a ayuda profesional. En el futuro pretende vivir de una manera más sana. Su familia y amigos le apoyan".

El ejemplo de Affleck es la dramática continuación de una serie de casos similares en el mundo del espectáculo. En la misma clínica, favorita de personajes prominentes, se encuentra por su adicción a las drogas también Robert Downey Jr., conocido más recientemente por su participación en la serie Ally McBeal.

Hace pocas semanas, también una figura de la escena musical reconoció su adicción a la bebida. El cantante A.J. McLean, del grupo de pop Backstreet Boys, sorprendió a sus fans al admitir que ingresaba en una clínica para tratar de superar sus problemas con el alcohol. La banda tuvo que cancelar varios conciertos de su gira mundial, aunque espera poder reanudarla a finales de agosto.

James Hetfield, guitarrista del grupo estadunidense Metallica, se encuentra también internado en una clínica por su adicción al alcohol.

El pasado jueves se dio a conocer oficialmente que la cantante pop Mariah Carey, de 31 años, se está sometiendo a una terapia en un centro psiquiátrico debido a un colapso nervioso. Al parecer, intentó quitarse la vida, pero esta versión ha sido rechazada hasta la fecha por sus agentes.

Affleck, que el 15 de agosto cumplirá 29 años, interpretó el año pasado el papel de un alcohólico en el drama Bounce. Los críticos afirmaron que su trabajo fue "extraordinariamente convincente". Entre sus títulos de mayor éxito se encuentran Armageddon y Shakespeare enamorado, además de haber ganado un Oscar junto con su amigo Matt Damon por el guión de Good Will Hunting, en 1997.

Antes sólo actuaba colocado: Samuel L. Jackson

La mayoría de las actuales estrellas estadunidenses eran sólo niños en 1970, cuando Janis Joplin y Jimi Hendrix murieron por sobredosis de heroína. Sin embargo, a lo largo de su carrera han conocido las dos caras de la moneda en el engañoso juego de Hollywood: por un lado han tenido un gran éxito y por el otro éste ha ido unido a drogas y alcohol. La lista de los enfermos por adicción en la "factoría de los sueños" es larga.

Samuel L. Jackson, la estrella de películas como Shaft o Pulp Fiction, ocupa un puesto destacado en esa lista. "En los 10 primeros años de mi carrera cinematográfica sólo actué colocado", dice, asegurando haberse metido en el cuerpo todo lo que podía: hachís, marihuana, heroína, cocaína, etcétera.

No son pocos los que, al igual que Robert Downey Jr., aprendieron a liar carrujos cuando eran todavía niños. Drew Barrymore, la graciosa Gertie en la película de Steven Spielberg E.T., se emborrachó por primera vez a los nueve, a los 10 fumó hachis y a los 12 probó cocaína. Después de un intento de suicidio en 1989 pudo reencaminar su vida y su carrera.