DOMINGO Ť 12 Ť AGOSTO Ť 2001

Ť El monto quedaría fuera de control en caso de un brinco en las tasas de interés, señala

La deuda del IPAB por $800 mil millones, agujero negro para las finanzas públicas: Bursamétrica

Ť Considera que Citigroup se alocó y compró muy caro el grupo Banamex

HUMBERTO ORTIZ MORENO

El Grupo Bursamétrica advirtió que los 800 mil millones de pesos de deuda que permanecen en la panza del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB) sin que nadie los cubra, significan una bomba de tiempo para la economía y uno de los agujeros negros que el gobierno mantiene en las finanzas públicas.

En caso de un brinco en las tasas de interés, el monto quedaría fuera de control, sería inmanejable y prácticamente impagable, comprometiendo el futuro del país, previno Ernesto O'Farril, presidente del organismo consultor y de calificación financiera.

Conforme a sus análisis, llegó a la conclusión de que Citigroup "se alocó" y compró muy caro Banamex, pero los socios solamente lograron recuperar lo que invirtieron y "no ganaron nada".

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A su juicio, los accionistas del Grupo Banacci bien pudieron conservar su patrimonio y capital en este banco, en caso de haber tenido la posibilidad de acudir al financiamiento internacional que es más barato que en México. Pero a propuesta del Ejecutivo, el Congreso impuso un candado dentro del la ley y el IPAB tiene que acudir a los mercados locales para fondear los intereses de la deuda, cuya tercera parte es cubierta por el gobierno federal y las dos restantes por el instituto convertido hoy en la empresa más grande del país.

Para O'Farril, el fondeo del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario es uno de los problemas más graves para la economía y las finanzas nacionales, además de que encierra muchos mitos.

"El IPAB tiene que acudir a los bancos para pedir prestado y si no paga le cobran altos intereses. Aquí hay un pasivo enorme y nadie se preocupa por saber quién los va a pagar", externó en entrevista con La Jornada.

Ante confusiones en cuanto a que el IPAB nos está costando a todos los mexicanos, el analista puntualizó que una tercera parte de los intereses de la deuda del IPAB los paga el gobierno federal con el presupuesto público, en tanto que para cubrir las dos restantes el instituto tiene que salir al mercado a buscar los recursos.

"Y no pasa nada con el principal de 800 mil millones de pesos, nadie pregunta ni se preocupa por quién los va a pagar", exclamó O'Farril con extrañeza. "La tesis de Ernesto Zedillo y sus tecnócratas fue en el sentido de que la economía era tan grande que no había problema y se acabó", criticó enseguida.

Explicó que el IPAB fue, en su momento, el primer mecanismo real de rescate de toda la banca y, en realidad, todos los socios perdieron su patrimonio, excepto unos cuantos privilegiados.

Y ahora, cuestionó, no solamente malbarataron al Grupo Bancomer ?absorbido el año pasado por el español BBVA?, sino que Banamex bien pudo haber conservado su patrimonio e intereses financieros, pero finalmente vendió caro a Citigroup sólo para recuperar lo invertido.

La realidad, en opinión del presidente del Grupo Bursamétrica, es que el principal del IPAB tiene que pagarse y "nadie se ha preocupado por ello".

Se preguntó por qué los legisladores y el Ejecutivo separaron al instituto del gobierno tan sólo para pagar tan altos intereses, cuando era posible financiarse más barato en moneda extranjera. Molesto porque esta solución ha costado demasiado caro al país, O'Farril calificó a los tecnócratas gobernantes de ignorantes.

El presidente de Bursamétrica apuntó que otros agujeros negros de las finanzas públicas lo constituyen la baja captación de impuestos ?"a unos cuantos causantes cautivos nos traen fritos", deploró? y el sistema de pensiones del sector público.

En cuanto al primer punto, expuso que urge una reforma fiscal seria y completa, "no la que se pretende consensada políticamente".

Esto es, explicó, que Hacienda despliegue una verdadera fiscalización, porque actualmente es tan débil que de nada sirve cambiar las leyes si existen muchos mexicanos que no pagan impuestos. "Ahí está la economía informal, ni quién la toque..."

O'Farril sabe que las discusiones entre las fracciones parlamentarias y el gobierno serán arduas pero la reforma fiscal, insistió, es inaplazable. Propuso autorizar un impuesto al consumo (IVA) con una tasa pareja, de preferencia que proteja a los estratos de población de menores ingresos.

Y en cuanto al Impusto Sobre la Renta (ISR), tomó el caso de Irlanda y postuló un 12 por ciento igualmente único, de modo que quienes ganen más paguen lo que les toca y los de menores ingresos contribuyan con lo justo.

Al mismo tiempo, sugirió que los pagos de IVA e ISR sean deducibles y que los mismos causantes exijan facturas de sus adquisiciones.

"Sí habrá un fuerte debate en el Congreso, pero seguramente será consensada en el próximo periodo ordinario de sesiones para que entre en vigor en enero", previó.