Ť La ocupación a la sede de la OLP, un "mensaje cortés" a palestinos para que frenen matanzas: Peres
Masiva huelga general en protesta por el cierre de la Casa de Oriente
Ť Irrumpen tanques de Tel Aviv en la localidad de Jenin
y destrozan puesto policiaco de la ANP
Ť En Ramallah y Cisjordania los enfrentamientos provocan
un muerto y ocho heridos
AFP, REUTERS Y AP
Jerusalen,
Martes 14 de agosto. La huelga general contra el cierre de la Casa
de Oriente fue acatada este lunes en forma masiva en la parte oriental
de esta ciudad y en los territorios autónomos palestinos, al tiempo
que la policía reprimió a manifestantes que desplegaron una
bandera palestina en las inmediaciones de esa institución, sede
oficiosa de la Organización para la Liberación Palestina
en Jersualén.
Mientras, en las primeras horas de este martes, tanques israelíes penetraron en la localidad cisjordana de Jenin y destruyeron dos sedes de la policía palestina. En Ramallah fuerzas israelíes hirieron gravemente a un miembro de la guardia del presidente palestino, Yasser Arafat.
La incursión en Jenin, cuyo saldo no estaba precisado al cierre de esta edición, siguió a una nueva jornada de violencia en la que un palestino acusado de la muerte, hace tres semanas, de una joven israelí, murió por disparos de una unidad especial de la policía israelí, cerca de un control en la carretera entre Jerusalén y Ramallah. Y en Hebrón, Cisjordania, seis palestinos fueron heridos de bala, uno de ellos de gravedad, durante disturbios con el ejército israelí tras los funerales de una niña palestina fallecida el domingo por disparos israelíes.
Golpean a periodistas
Otro incidente ocurrido este lunes fue el ataque de soldados israelíes a dos periodistas egipcios, a los que patearon y golpearon cuando éstos filmaban un control militar en Cisjordania.
En Jerusalén oriental, ocupada por Israel desde 1967, la policía israelí reprimió una manifestación en los alrededores de Casa Oriente, rompiendo pancartas y deteniendo a quienes portaran una bandera palestina.
La
huelga de este lunes, la más extensa desde la firma de los acuerdos
provisionales de paz en 1994, fue ampliamente acatada en esa parte de Jerusalén,
donde tiendas y oficinas de las administraciones permanecieron cerradas,
al igual que en las grandes ciudades autónomas de Cisjordania y
en la franja de Gaza, donde unas 3 mil personas se manifestaron, entre
ellas niños con cinturores de explosivos falsos, constató
Afp.
El llamado a huelga general lanzado el domingo por una coalición de los principales movimientos palestinos, también fue obedecido por miles de jordanos en los campos palestinos de Siria y en los campos de refugiados palestinos del Líbano, en muestra de solidaridad.
Israel cerró la semana pasada la Casa de Oriente, símbolo de las aspiraciones palestinas a contar con Jerusalén oriental como capital, y otras nueve oficinas palestinas de la parte oriental y su periferia, en respuesta a un atentado suicida en el centro de Jerusalén que dejó 16 muertos. Anoche, otro atentado suicida palestino causó 15 heridos en una café de Haifa.
En este contexto, el ministro israelí de Relaciones Exteriores, Shimon Peres, obtuvo autorización del primer ministro israelí, Ariel Sharon, para negociar un cese del fuego con dirigentes palestinos, aunque no con Yasser Arafat, según confirmaron fuentes cercanas al gobierno.
Peres, del moderado Partido Laborista, podrá reunirse con responsables palestinos a condición de estar siempre acompañado por un general, para asegurarse que no se trata de "negociaciones políticas".
En su mayoría, los israelíes son hostiles a la apertura de negociaciones con los palestinos para alcanzar un cese del fuego, de acuerdo con un sondeo publicado este lunes por el diario israelí Yediot Aharonot. El 54 por ciento de los encuestados se opone a estas negociaciones, contra 44 por ciento que las aprueba.
Para 36 por ciento de los israelíes, la solución del conflicto pasa por una separación unilateral de los dos pueblos, mientras que 19 por ciento se declaró favorable a la reanudación de negociaciones, y 17 por ciento a la continuación de los ataques aéreos contra palestinos.
Un editorial del Yediot Aharonot sotuvo que el derechista Sharon, un ex militar de línea dura, decidió autorizar a su canciller a negociar debido a que "en la actual situación, no puede obviar el aura internacional de Peres, premio Nobel de la Paz", puesto que el laborista "logra neutralizar (en el mundo) las dosis de veneno derramadas contra Israel".
Peres, por otro lado, se refirió hoy al cierre de la Casa de Oriente, al asegurar que pretende enviar un "mensaje cortés a los palestinos para que pongan fin a las mantazas", pero sostuvo que esa sede será reabierta "próximamente". Sin embargo, el jefe de la policía de Jerusalén, Micky Levy, declaró que la orden de cierre es de seis meses, que pueden ser prorrogados.
Arafat puede hacer más: Bush
En Estados Unidos, el presidente George W. Bush tomó un receso durante un partido de golf en sus vaciones en Texas para decir a la prensa que Yasser Arafat "puede hacer más para convencer a la gente de las calles de que pare estas acciones de terrorismo".
"Mientras continúen los actos de terrorismo, será imposible la puesta en marcha de las recomendaciones del informe Mitchell o emprender cualquier otra negociación de paz bajo la amenaza de terrorismo", añadió Bush.
Desde septiembre pasado, cuando comenzó esta intifada, la violencia en la región ha dejado más de 700 muertos, tres cuartas partes de ellos palestinos.