En Hollywood las cosas vienen tan rápido como se van: George Clooney

Ť Mi intención es trabajar siempre con gente talentosa y buscar el equilibrio entre la bondad y la maldad que existen en este negocio Ť También ha sido guionista para televisión y cartonista político

MARIANNE RUUTH ESPECIAL

Woody Allen dijo alguna vez: "El éxito te permite ser la persona que tu deseabas ser". Un tipo que parece conseguir más y más con creciente éxito es George Clooney. Conociéndolo, es difícil encontrar algo que no guste en él.

Antes de tener una reacción femenina hormonal por su look ?ojos expresivos, portentosa quijada, piel suave y dorada, así como un cuerpo atlético usualmente ataviado con jeans, camisa y botas color negro? escuchemos otra opinión de uno de los galanes más cotizados de Hollywood. "Tiene una encantadora y pícara combinación de lo que es gracioso", dice Michael Hoffman, quien lo dirigió en One fine day, junto con Michelle Pfeiffer. "George tiene un aire vulnerable y, gracias a Dios, no se toma a sí mismo tan en serio", comenta la misma Michelle (su hermana menor Dedee salió con el actor y todavía habla bien de él). "Son sus ojos. No puedes parar de verlo aunque no diga una palabra", afirma Nicole Kidman. Para Quentin Tarantino, "tiene algunas cualidades de Steve McQueen o Robert Mitchum". Mientras el actor Mark Wahlberg argumenta que "es un gran actor, un gran hombre, que además es muy divertido".

Pero el mismo Clooney afirma: "Yo sólo voy a mi trabajo, intento ser una linda persona y hago mi labor lo mejor que puedo, manteniendo la máxima de Spencer Tracy: nunca les permitas atraparte en tu actuación".

Suena simple, pero su éxito ha sido en verdad repentino. Comenzó su ardua jornada de vida en el tiempo que su padre, Nick (anfitrión de un talk show) alternaba éxitos con periodos de desempleo. Desde los cinco años conoció con detalle el interior de un canal de televisión y hasta apareció en algunos sketches. Aun así no se considera un actor de carrera, porque está consciente de las altas y bajas, no sólo por la situación de su padre, sino también por la de su tía, Rosemary Clooney, superfamosa cantante y actriz de cine cuya carrera terminó abruptamente en un hospital siquiátrico. Por 14 años ella estuvo casada con José Ferrer, a quien George consideraba "uno de los actores más finos de todos los tiempos". Pese a ganar un Oscar y ser postulado a otro, Ferrer experimentó los frecuentes rechazos que son parte de la vida de un actor...

En la escuela, Clooney se especializó en guión televisivo y drama, aunque encontró su pasatiempo ideal en dibujar cartones políticos. Fue entonces cuando su primo, el actor Miguel Ferrer, lo invitó para que visitara la locación de una cinta en la que trabajaba con su padre, José. George fue, se hizo de un pequeño papel y quedó enamorado de la actuación. "Nunca pensé que ganaría algo de dinero con la actuación; adoro hacerlo."

Ardua lucha

A la edad de 21 años se fue a Hollywood e hizo tareas domésticas para su tía Rosemary. Luego de varios años de rechazos, consiguió su primer papel -muy pequeño- en la televisión. Luchó al grado de dormir en un pequeño rincón del apartamento de un amigo actor.

Su apariencia parecía haberlo limitado. Por más de una década obtuvo algunos pequeños papeles en comedias de televisión por su aspecto mono. Clooney se encoge de hombros y dice: "Mi cabello tenía buena apariencia para salir en tv".

Pero decidió cambiar todo y peleó por formar parte del elenco de una serie de televisión que llevaba por nombre ER. De hecho se convirtió en el galán de la pantalla chica, lo cual fue la catapulta para que Robert Rodriguez lo escogiera para su película Del crepúsculo al amanecer. Luego de esta intervención vinieron otras apariciones como estelar y coestelar: One fine day , comedia "en la que me pagaron por besar a Michelle Pfeiffer"; la versión de Batman y Robin en la que encarnó al mítico héroe; Out of sight, en la que hizo de novio de Jennifer López; Tormenta perfecta y Dónde estás hermano, en la que fue dirigido por los hermanos Cohen y que le dejó grandes satisfacciones. "Antes de leer el guión de Dónde estás... dije que sí actuaría en esa cinta. Es que como actor, hay pocos lugares en los que quieres estar aunque sea una vez en tu vida, y uno de esos, para mí, era en un set actuando bajo la dirección de Ethan y Joel Cohen".

Recientemente Clooney terminó la grababación de una nueva versión de la parodia -que protagonizaron antes Frank Sinatra, Sammy Davis y Dean Martin- Ocean's eleven, dirigida por Steven Soderbergh.

Clooney también ha producido y comenta que la razón de producir viene de que "habrá un periodo en un futuro no muy distante en el que la gente se saturará de ver la imagen de Clooney en las pantallas. Para ser sincero yo ya me he enfermado de verme en las películas".

Guapo, soltero y cuarentón, Clooney es centro de atención en los tabloides porque lo ligan sentimentalmente a muchas mujeres. "Sí he salido con algunas mujeres, y es cierto que he tenido algunas largas relaciones que han fracasado (dos años con Kelly Preston, ahora casada con John Travolta, y tres con una modelo francesa) y un matrimonio que no funcionó. Algunas de esas caídas han sido a causa de mis defectos. Pero, ¿es verdad lo que se dice en los diarios? Muy poco hay de cierto. La verdad es que hubiera deseado haberme ido a la cama con Elle McPherson y otras amantes que me han inventado. Suena como que muy divertido. Si hubiera hecho una de diez en las que me involucran, no habría tenido la energía y el tiempo para trabajar. De cualquier manera esas historias no me importan mucho."

Ahora mismo la única preocupación del actor es su casa de ocho cuartos en Hollywood Hills, así como su mascota llamada Max, un enorme cerdo. De igual manera se pueden encontrar en su casita una alberca grande y un garage que alberga un Corvette 1959, un Ford Bronco y tres motocicletas. Pero lejos de estos objetos materiales, él sólo piensa en su futuro próximo: "Mi intención es siempre trabajar con gente talentosa. Conozco las trampas de trabajar aquí, además poder equilibrarte entre la bondad y la maldad que existen en este negocio y ser consciente de que a veces estás arriba y otras abajo. Ahora puedo ser el bombón del mes y en un par de años podría verme trabajando tras el mostrador de una tienda de abarrotes diciendo: ¿se lo envuelvo en plástico o papel? En Hollywood las cosas vienen tan rápido como se van".