SABADO Ť 18 Ť AGOSTO Ť 2001

Ť "Con quién estará negociando el Presidente, porque con nosotros no": diputado priísta

Sorprende a legisladores que Fox hable de acuerdo fiscal PAN-PRI

Ť Si existe tal arreglo, "yo creo que en su momento se nos hará llegar": Manuel Minjares

CIRO PEREZ SILVA

Las declaraciones del presidente Vicente Fox en el sentido de que está casi listo el acuerdo entre el PAN y el PRI para aprobar la reforma hacendaria tomó por sorpresa a diputados de ambas fracciones en San Lázaro. Los primeros comentaron que si existe tal acuerdo "esperamos que en su momento nos lo hagan llegar", mientras que los del tricolor se preguntaron con quién estará negociando el Ejecutivo, "porque con nosotros, que deberemos aprobar una reforma, no".

Manuel Añorve, vicecoordinador priísta, destacó que a pesar de que en la Cámara de Diputados se entiende la necesidad que tiene el gobierno de allegarse recursos, los funcionarios de Hacienda no han sido capaces de entregar documentos fundamentales, como el reporte del impacto que tendría en los diferentes sectores de la población la aplicación de una reforma como la que envió el presidente Fox, cuya principal fuente de ingresos -al gravar medicinas, alimentos, libros y transporte, entre otros- ya fue rechazada por las directivas nacionales de PRI y PRD, además de algunos gobernadores de todos los signos políticos.

"La reforma fiscal no es árbol para estar amarrada; con todo respeto, nosotros no tenemos conocimiento de la liana con la que se está amarrando", sostuvo el diputado guerrerense. Insistió en que como bancada e incluso como partido político no están en contra de una reforma hacendaria, pero sí de una como la que propuso el presidente Fox, que es exclusivamente recaudatoria.

El panista Manuel Minjares, responsable de una de las cinco mesas de análisis de la reforma hacendaria, confió en que las declaraciones presidenciales sean verdad.

"No, no creo que sean falsas; si él tiene la información correspondiente, yo creo que en su momento se nos hará llegar. Creo que el hecho de que se haya presentado por parte del PRI -una propuesta alternativa- es un punto de acuerdo que abona a la discusión, porque antes había sólo declaraciones a los medios de comunicación sobre la pertinencia o inconveniencia de hagámosle por aquí, hagámosle por allá. Entonces hay cuando menos una base, una propuesta; seguramente el Presidente tiene el conocimiento de que podemos llegar a algún acuerdo en este caso", declaró el panista.

A su vez Manuel Añorve recordó que todos los partidos están trabajando en las subcomisiones de Hacienda creadas específicamente para analizar la propuesta del Ejecutivo, además de las que han surgido de los grupos legislativos, gobernadores e institutos políticos.

"Este tipo de declaraciones tienen como único objetivo confundir, pero no obstante eso estamos trabajando con responsabilidad. Si el gobierno tiene en verdad ganas de sacar adelante una reforma, que presente una segunda o tercera contrapropuesta, en eso estamos de acuerdo; en lo que no estamos de acuerdo es en que esta recesión, ya reconocida por Eduardo Sojo, coordinador de políticas públicas de la Presidencia, se oculte al Poder Legislativo", aseveró.

El vicecoordinador del PRI se refirió también a la situación por la que atraviesa la economía, y a la "obcecación" del Ejecutivo por aceptarla. "Es terrible que nos digan que la economía no está mal; es algo a lo que no se le puede restar importancia. No se vale que ahora surjan voces que culpen a las administraciones pasadas por la situación de la economía. Parecen olvidar que el propio presidente Fox declaró que Ernesto Zedillo dejó una economía que garantizaba crecer al 7 por ciento, elogiando el llamado blindaje económico", insistió.

Ť Ortega: aprobar el proyecto del Ejecutivo sin consenso de todos no tendría un final adecuado

GEORGINA SALDIERNA Y LAURA GOMEZ

El coordinador de la bancada del PRD en el Senado de la República, Jesús Ortega, reprobó ayer la pretensión gubernamental de sacar la reforma fiscal sin la participación de todos los partidos.

Mientras, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, criticó el llamado del presidente Vicente Fox para que el Congreso de la Unión apruebe su reforma fiscal como único remedio para revertir una crisis económica, cuando hacerlo significaría reducir drásticamente la recaudación de impuestos y agravar la situación del país.

Luego de las declaraciones de Fox en Chile en torno a que el PAN y el PRI casi tienen acordado el proyecto de reforma fiscal, Jesús Ortega señaló que esto demuestra el menosprecio y el sectarismo del gobierno federal, y sólo conducirá a que la reforma nazca cuestionada por la sociedad.

Indicó que pretender sacar una reforma fiscal sin la participación de todos los grupos parlamentarios, en un afán pragmático, sin convencer y más bien comprando conciencias de algunos diputados y senadores, no tendrá un final adecuado ni tampoco redundará en finanzas sanas o una hacienda distributiva.

Si no se toman en cuenta los planteamientos del PRD, agregó Ortega, sólo se reafirmaría ante la ciudadanía una alianza entre el PRI y el PAN, que tiende a afectar a la gran mayoría de la población. Advirtió también que si los priístas aceptan que se graven alimentos y medicinas, su discurso quedará en mera palabrería y en demagogia, pues frente a la prensa dicen estar en contra de que se afecte a lo más pobres, pero finalmente por "intereses políticos acceden al contenido de una reforma injusta".

Aclaró que no todos los priístas y no todos los panistas están a favor del proyecto del Ejecutivo, al estimar que posiblemente el Presidente quiso anunciar que ya casi sacó su reforma fiscal para disminuir el impacto que tiene el hecho de que la economía no creció en el segundo trimestre del año.

"Posiblemente quiere generar confianza en la población frente a la terrible noticia que significa que se haya tenido un crecimiento económico de cero", subrayó, para enseguida destacar que este anuncio tiene un efecto nocivo para el país y da cuenta de la ineficacia del actual gobierno en la conducción económica de la nación. Refirió en este sentido que un país no se gobierna con la experiencia de dirigir un rancho o una empresa de cosméticos.

Por su lado el senador perredista Demetrio Sodi de la Tijera lamentó que en la propuesta hacendaria del PRI, que fue presentada el jueves, no se retome el planteamiento de gravar las utilidades de la Bolsa, y que no incluya caminos que permitan aumentar la recaudación fiscal.

Sodi de la Tijera dijo que la propuesta del PRI no es una reforma, pues dice no a todo. Habla de cambios en la cuestión legal de la entrega del presupuesto y del veto presidencial, pero eso no da recursos, puntualizó.

Andrés Manuel López Obrador consideró que con la aprobación de la inicativa de reforma fiscal, como fue enviada por el jefe del Ejecutivo, se corre el riesgo de que la recaudación de impuestos se derrumbe, por la crisis económica que se vive, cuando debe "haber un plan de emergencia para reactivar la economía para generar empleos e impulsar sectores claves, como la industria de la construcción".

El jefe del Gobierno capitalino consideró que la administración federal debe "soltar" el gasto y convocar a los sectores productivos a trabajar de manera conjunta, en lugar de esperar que mejoren las perspectivas en Estados Unidos y la dinámica del mercado responda por sí misma.