MARTES Ť 21 Ť AGOSTO Ť 2001
Ť La economía mexicana todavía no toca fondo, asegura el CEESP
Cayó 92% la creación de empleos en Edomex
DAVID ZUÑIGA
Entre enero y agosto del año pasado las industrias del estado de México habían generado 80 mil empleos; este año apenas han creado 6 mil y hay sectores que ''están hechos pedazos'' y luchan por sobrevivir como las industrias textil, del vestido, automotriz y de autopartes, lo que no sólo afecta a estas empresas, sino a todas sus cadenas de abasto, reconoció Francisco Funtanet Mange, presidente de la Asociación de Industriales de aquella entidad.
En una reunión con reporteros, el dirigente informó que el jueves se firmó un convenio por medio del cual las industrias mexiquenses se comprometen a contratar a por lo menos un trabajador con salario mínimo y prerrogativas limitadas durante un lapso de seis meses. En 1995, recordó, se aplicó un plan de emergencia similar que permitió detener la caída del empleo y generar 40 mil plazas, resultado similar al que esperan para este año.
Según Funtanet, la economía mexicana ya está en recesión y hay sectores que todavía no se reponen de la crisis de 1995 debido, entre otros factores, a la falta de crédito, la caída de las ventas internas y de exportación, la fortaleza del tipo de cambio y el crecimiento del contrabando y la piratería.
El empresario recomendó a las compañías no recortar personal, ya que ello disminuye la competitividad de las empresas, pues no sólo pierden al trabajador sino también el tiempo y los recursos que se invirtieron en capacitarlo. Además, el efecto de reducir los costos de nómina con un recorte de personal son un paliativo que sólo dura tres meses. En cuanto a la posibilidad de llegar a paros técnicos si la producción y las ventas siguen a la baja, confió en que las empresas mexiquenses no lleguen a ese punto, pero dado el caso sería preferible a despedir trabajadores o cerrar plantas.
El estado de México, aseguró Funtanet, es el más industrializado del país, pues aporta 11 por ciento del producto interno bruto (PIB), proporción que podría ser de hasta 15 por ciento si se toma en cuenta que muchas compañías que operan en esa entidad tienen su domicilio fiscal en el Distrito Federal.
Por su parte, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) advirtió que si el gobierno aumenta el gasto o influye en el tipo de cambio para paliar el estancamiento de la economía mexicana sólo aumentará el riesgo de que ésta se convierta en una crisis.
En su análisis semanal, el CEESP reconoció que la economía mexicana aún no toca fondo y que la recuperación empezará el próximo año, pero ''ni por asomo'' la situación es comparable a la de 1994-95. Según el organismo, el debilitamiento de la economía no se debe sólo a lo que ocurre en Estados Unidos, sino también a la apreciación del peso, a los aumentos salariales muy por arriba de la inflación, a la excesiva regulación, a la mala calidad de los servicios públicos y a la disminución de los flujos de inversión extranjera por los casi nulos avances en reformas estructurales, entre ellas la fiscal y la del sector energético.