MIERCOLES Ť 22 Ť AGOSTO Ť 2001

Mehta y la música como libertad

El director indio de la Filarmónica de Israel sueña con llevar su arte a Pakistán y Líbano

PABLO ESPINOSA

Zubin Mehta, uno de los más grandes directores de orquesta en la actualidad y titular de la Filarmónica de Israel -a su vez una de las mejores diez en el planeta-, no acostumbra dar entrevistas pero esta vez, única en el transcurso de su gira mundial, hace una excepción: concede, en exclusiva para La Jornada y antes del último de sus tres conciertos en Bellas Artes, cuarenta minutos de charla y calidez humana en su camerino sobre los temas más diversos.

-Cuando Joerg Haider resultó electo, usted anunció que al primer acto de racismo usted se alejaría de Austria. ƑHasta dónde llega, respecto de asuntos políticos, su compromiso social?

-Nadie puede vivir en aislamiento. Hay un lado positivo del hecho de estar rodeado siempre de situaciones políticas, que las hay por igual aquí en México que en Israel, Canadá, en cualquier parte. La manera en que me involucro parte de una convicción, de que la música es la respiración de las personas. Parto también de la certeza de que con música la gente puede hacer realidad los sueños, puede escapar, puede liberarse. Porque la música lo es todo. Y de esa forma, en consecuencia, podemos mantener los ojos bien abiertos frente a todo, incluyendo las situaciones políticas.

"En otras palabras: si no encaramos las situaciones políticas, nos la pasaríamos con miedo. Así, por ejemplo, al señor Haider no le tendríamos otra cosa que miedo. Gracias a Dios, su partido no ha cometido hasta el momento alguna atrocidad, además porque no tienen el poder completo, pues forma parte de un gobierno de coalición. Pero aún así desde aquí le quiero repetir: a la primera familia india que sea molestada o sea sujeta de racismo en Austria, no me volverán a ver en ese país, que fue mi patria adoptiva."

La fortuna del origen

-Usted ha logrado milagros políticos, como conciertos de gozo y lágrima entre árabes y palestinos. ƑCuál de entre esos sucesos le ha conmovido más?

-Tengo la fortuna de ser de India, pero eso no me mueve a hacer más por mi país que por los otros. Me gustaría, por ejemplo, llevar una orquesta india a Pakistán, pero eso no es posible, quizá algún día. También quisiera llevar una orquesta de Bombay a Islamabad. También anhelo volver a cruzar la frontera de Líbano con la Filarmónica de Israel.

"Respecto a su pregunta, recuerdo que estábamos en una cena en Londres, entre mucha gente, y de repente de una mesa lejana se levantó un hombre, se acercó a mi mesa y me dijo: 'disculpe, soy el rey de Jordania, Ƒno quisiera usted, le pido por favor, ir a mi país a hacer su música?' Fue maravilloso -ríe Mehta, divertido de la escena, como diciendo con la mirada: Ƒse imagina un rey así?- y ahí, al pie de mi mesa, prácticamente acordamos todos los detalles del concierto, que por cierto nunca se dio, nunca fuimos a Jordania, pero el mero hecho de soñarlo fue conmovedor."