SABADO Ť 25 Ť AGOSTO Ť 2001

Ť Impulsará la RMALC un plebiscito continental para frenar el ALCA

México, lugar de honor entre países empobrecidos por la globalización: Wise

Ť Afectado por las políticas neoliberales aplicadas desde 1986 y su cercanía a EU, afirma

HUMBERTO ORTIZ MORENO

México ocupa "el lugar de honor" en un "selecto club" de países depredados y empobrecidos por la globalización que ya representa, para los activistas del mundo, el principal laboratorio para entender los problemas derivados del libre comercio, en virtud de su relación tan cercana con Estados Unidos y por sus políticas neoliberales aplicadas desde 1986, para hacerle entender al mundo que el modelo neoliberal no sirve, afirmó Tim Wise, del Instituto de Desarrollo Global y Medio Ambiente de Boston, Massachussets.

Así, desde este país arrancará una intensa campaña hemisférica de información, formación y educación populares para realizar, enseguida, un plebiscito continental que permita frenar el Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA), puntualizó por su parte María Atilano, coordinadora Ejecutiva de la Red Mexicana de Acción frente al Libre Comercio (RMALC).

En el marco del seminario denominado La respuesta de las organizaciones civiles y sociales mexicanas ante la integración económica: estudio de casos, coordinado por la RMALC, El Colegio de México, la Unversidad de Tufts y el Instituto de Desarrollo y Medio Ambiente de Boston, ambos líderes antiglobalización expusieron, junto con dirigentes de ONG y agrupaciones de productores rurales, ocho casos documentados sobre los impactos negativos de la integración económica en México.

"La pobreza, la desindustrialización de grandes sectores nacionales, el desempleo, la bancarrota de miles de pequeños productores y empresarios, marcan los signos de la globalización en el país", advierten.

Para los sectores golpeados por dicha integración, apuntan, la lucha ha sido por la sobrevivencia y la resistencia para enfrentar las nuevas condiciones.

Se presentaron los casos de los productores de café y granos básicos; la situación de los trabajadores en las maquiladoras; las remesas que los mexicanos que viven en Estados Unidos envían a sus comunidades de origen; la lucha de los campesinos ecologistas presos; biopiratería, plan Puebla-Panamá y los megaproyectos del Istmo de Tehuantepec, además de los conflictos en torno de los basureros tóxicos que empresas estadunidenses instalan en territorio mexicano.

María Atilano anunció que habrá manifestaciones durante la próxima reunión que en México realizará la Organización Mundial de Comercio (OMC), los días 31 de agosto y primero de septiembre, con la presencia de al menos 300 activistas contra la globalización.

Exigió respeto a la libre expresión y manifestación de grupos civiles, asegurando que la línea política de la RMALC es pacífica, de "protesta con propuesta".

Y es que, añadió, en realidad hay proyectos alternos al ALCA que no se oponen a la integración económica, sino que están más centrados en los derechos de los pueblos.

"Nos hemos empobrecido enormemente y a México le ha impactado más porque nos consideran del Primer Mundo y país rico, en detrimento del apoyo internacional para proyectos fundamentales de combate a la pobreza, apoyo a los productores del campo, la educación sindical y la ayuda a pueblos indígenas".

Adelantó que en próxima fecha habrá un foro público en el que los funcionarios del gobierno del presidente Vicente Fox explicarán e informarán con detalle en qué consiste el ALCA.

"La globalización debe existir, no estamos en contra de ella, sino de lo que hacen los sistemas neoliberales que no benefician a la población; de las trasnacionales; estamos de acuerdo en que haya inversiones extranjeras, pero reguladas", aseveró.

En opinión de Tim Wise, la experiencia mexicana ofrece mucho porque los pueblos de América aprenderán en serio lo que han sido los impactos, posibilidades y alternativas al ALCA.

"Lo que nos parece clave es afirmar que el modelo existente no sirve para atender las necesidades de los pueblos más pobres ni del medio ambiente", subrayó. Y es que, mencionó, ya hay "un club bastante grande de países afectados muy fuerte por la globalización y el neoliberalismo", en el cual "México ocupa un lugar de honor.