MARTES Ť 28 Ť AGOSTO Ť 2001
Ť Acompañarán a la caravana 220 funcionarios chiapanecos
Retornan hoy a sus poblados 61 familias indígenas desplazadas
Ť Teme el obispo Felipe Arizmendi que autoridades de Chenalhó y Las Abejas incumplan acuerdos de no agresión
ELIO HENRIQUEZ CORRESPONSAL
San Cristobal de las Casas, Chis., 27 de agosto. El subsecretario de Protección Civil, Horacio Schroeder Vejarano, informó que más de 200 personas de distintas instancias del gobierno estatal conforman el grupo de apoyo que acompañará a las 61 familias indígenas desplazadas de comunidades de Chenalhó que este martes retornarán a pie a sus lugares de origen.
En tanto, el obispo de la diócesis local, Felipe Arizmendi Esquivel, manifestó su esperanza de que el regreso de estos 333 indígenas que hace casi cuatro años abandonaron sus viviendas por la violencia paramilitar sea el inicio del proceso de retorno de los miles de desplazados en Chenalhó y otros municipios de Chiapas.
El secretario de Pueblos Indios, Porfirio Encino, quien encabezará el operativo de acompañamiento por parte del gobierno del estado, informó que "todo está listo" para que el grupo salga este martes temprano del campamento de X'oyep hacia las comunidades de Yashjemel y Puebla y al barrio de Chuchtic.
Comentó que para evitar incidentes y en respuesta a la petición de los propios desplazados, se ha solicitado al Ejército Mexicano y a la Policía de Seguridad Pública estatal que no realicen movimientos en el municipio de Chenalhó este martes.
Piden frenar operativos contra extranjeros
El gobierno estatal, agregó, también solicitó al Instituto Nacional de Migración que no efectúe operativos contra extranjeros, ya que por invitación de la organización Las Abejas, a la cual pertenecen los desplazados, varios integrantes de organismos internacionales acompañarán la caravana que tiene previsto salir a las seis horas de Xo'yep. "Tenemos todo un equipo preparado para dar las garantías necesarias para que el retorno se realice en tranquilidad".
Schroeder Vejarano explicó que los desplazados tomaron la decisión de regresar caminando desde el campamento de refugio hasta sus comunidades de origen, ubicadas a unos 12 kilómetros. Sin embargo, aceptaron que 117 niños y seis ancianos viajen en seis microbuses.
Detalló que el operativo de acompañamiento, apoyo y asistencia a los indígenas que regresarán a sus viviendas está integrado por 216 personas de las instituciones del gobierno de Chiapas; diez ambulancias, 42 unidades móviles (camiones, microbuses, camionetas), una red de radios de comunicación enlazados a un centro que estará en la Sepi, "en cuyas oficinas ubicadas en esta ciudad permanecerá el secretario de Gobierno, Emilio Zebadúa.
Además habrá apoyo de telefonía satelital. Aparte estará el grupo de acompañamiento de las organizaciones no gubernamentales, agregó.
Señaló que en el tramo X'oyep-Puebla se instalarán cuatro módulos de asistencia con médicos, paramédicos, personal de protección civil y de Pueblos Indios, con agua, frutas, entre otros servicios para los indígenas y sus acompañantes.
Por separado, Arizmendi Esquivel expresó en entrevista su esperanza de que las condiciones para el regreso sean favorables, "como se ha ofrecido y prometido para que esto anime a otros grupos que están indecisos", pues "veo que lo que han sufrido en los campamentos, a pesar de la ayuda que se les ha dado, es indecible, que ya no quieren que sus familias sigan padeciendo tanto".
Sin embargo, el prelado dijo que existen algunos temores "de que no se cumplan los acuerdos de no agresión firmados por las autoridades municipales de Chenalhó y Las Abejas, porque ya hay experiencias anteriores que nos infunden miedos y preocupaciones, pero veo que ahora las condiciones son más favorables, hay el apoyo que se ha solicitado".
Subrayó que "todos estamos con deseos y compromisos de que los desplazados retornen pacíficamente, y espero que sea el principio de una solución más adecuada para tanta gente que ha sufrido durante cuatro años".
"Conveniente, reducir la presencia militar en la entidad"
Por otra parte aseveró que "sería conveniente que el Ejército Mexicano disminuyera el número de sus efectivos no sólo en Chenalhó sino en todo Chiapas, por- que eso daría mayor tranquilidad".
Esta situación, abundó, sería como una invitación a la comandancia zapatista de que debe dar otro paso en el proceso de pacificación en Chiapas, ya que de momento no se puede reanudar el diálogo directamente, pero con acciones como las mencionada sí se pueden crear condiciones más propicias para la paz".