LUNES Ť 10 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001
Ť Fallece un efectivo y dos más resultan heridos cerca de El Bosque
Emboscan por tercera ocasión en un mes a policías chiapanecos de Seguridad Pública
ANGELES MARISCAL Y ELIO HENRIQUEZ CORRESPONSALES
Tuxtla Gutierrez, Chis., 9 de septiembre. Por tercera ocasión en menos de un mes, policías de Seguridad Pública fueron emboscados por "delincuentes".
Los hechos dejaron un policía muerto y dos uniformados heridos. En otro contexto, alrededor de diez indígenas resultaron lesionados al enfrentarse a golpes evangélicos y católicos en la comunidad Mitzitón, de San Cristóbal de las Casas, informó la Subprocuraduría de Justicia Indígena estatal.
La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) dio a conocer en un comunicado que la emboscada ocurrió al filo de las 13 horas a tres kilómetros de la cabecera municipal El Bosque, cerca de donde ocurrieron las dos anteriores.
La dependencia agregó que un convoy al mando del agente del Ministerio Público Manuel Trejo se trasladaba del municipio de Simojovel al de Bochil, cuando lo atacaron "personas desconocidas". Durante la agresión murió el policía Carlos Velasco, y resultaron lesionados Trinidad Domínguez y Mateo Pérez.
La PGJE añadió que debido a estos hechos se reforzó la acción policiaca y las medidas de seguridad para la población en carreteras de la zona norte. Abundó que esta acción, "lejos de inhibir la acción de la justicia, aporta nuevos datos contra los gavilleros" que operan en la región
La primera emboscada, que la Procuraduría General de la República (PGR) atribuyó a "grupos dedicados al narcotráfico", ocurrió el 18 de agosto a la altura de una base mixta de policías y militares en Puerto Caté, a unos 20 kilómetros de El Bosque. En esa ocasión murió un agente de la PGR.
La segunda, que dejó siete lesionados, se perpetró en el municipio de Simojovel, cerca de Puerto Caté, el 31 de agosto anterior. Entonces, el grupo agresor usó 16 detonadores a distancia, cargados de dinamita.
Mientras tanto, unos diez indígenas salieron heridos de un enfrentamiento a golpes entre evangélicos y católicos de Mitzitón.
La Subprocuraduría de Justicia Indígena estatal explicó que los hechos ocurrieron este medio día, luego que los protestantes Francisco, Carmen y Pablo Díaz fueron retenidos por católicos, quienes pretendieron obligarlos a firmar un documento en el que aceptaban abandonar la comunidad "por su propia voluntad" o dejar su religión.
Los evangélicos se negaron y cuando se les llevaban a la cárcel local varios de sus compañeros los defendieron; entonces inició el enfrentamiento entre los grupos.
El origen del conflicto entre ambos grupos de Mitzitón, que data de hace años, es por un templo evangélico construido con madera, que los católicos exigen sea destruido.
Poco después del zafarrancho, las autoridades estatales enviaron policías para prevenir nuevas confrontaciones. Según la Subprocuraduría de Justicia, al momento "la calma ha retornado a la comunidad". Hasta el cierre de esta edición ningún indígena había sido detenido y los golpeados declaraban ante el agente del Ministerio Público.
Piden indígenas que se tipifique como delito la venta de mujeres
Durante el foro Compromiso con las Mujeres, una Nueva Agenda Legislativa, la indígena Sebastiana López Díaz denunció las constantes violaciones de los derechos humanos en contra de su género ocurridas en la entidad. "Es necesario que las autoridades dejen de ver esta situación de la venta de las indígenas como una costumbre o una transacción intrínseca de la cultura pluriétnica de Chiapas, sino como un delito que las leyes deben castigar", sostuvo.
López Díaz, candidata a síndica municipal de El Bosque, manifestó que las zonas Altos y Sierra son donde más se da el "comercio" de mujeres indígenas, propiciado por los propios padres de familia, quienes las cambian por dinero, alcohol, maíz o animales.
Ante diversas organizaciones femeniles y candidatos a diputados locales de distintos partidos políticos, López Díaz dijo que "lo más grave es que esta práctica" ocurre, en la mayoría de los casos, "sin el consentimiento de la mujer", a quien se obliga "a casarse con quien no desea".
Entre tanto, decenas de mujeres integrantes de organismos no gubernamentales se manifestaron ante la catedral de San Cristóbal de las Casas para exigir que cesen las agresiones y violaciones sexuales contra mujeres, que se han presentado recientemente en la zona.