VIERNES Ť 14 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001

Ť La organización celebra su décimo aniversario

El CG-500 pide a René Juárez Cisneros rechazar la ley indígena

Ť Guerrero y pobreza, temas de seguridad nacional, dice el mandatario

ROSA ROJAS ENVIADA

Chilpancingo, Gro.,13 de septiembre. Al inaugurar los festejos del décimo aniversario del Consejo Guerrerense 500 años de Resistencia Indígena (CG-500), el gobernador del estado, René Juárez Cisneros, afirmó hoy que Guerrero y la pobreza son asuntos de seguridad nacional. ''Quien no lo vea así, no está viendo el México de hoy'', dijo. Asimismo, confió en que el presidente Vicente Fox voltee los ojos hacia esta entidad, ''y lo haga con oportunidad, no vaya a ser que cuando lo haga ya sea demasiado tarde.''

Ante unos 500 delegados representantes de los pueblos tlapanecos, mixtecos, amuzgos y nahuas, reunidos en la alameda de esta ciudad, quienes participan en el cuarto Congreso Estatal de Pueblos Indígenas, el dirigente Luis Zacarías solicitó al gobernador, a nombre del CG-500, que presente una controversia constitucional ante la Suprema Corte para rechazar las reformas en materia indígena, lo que -dijo- está plenamente justificado tomando en cuenta que de los 46 diputados locales sólo uno votó a favor de esa ley aprobada por el Congreso de la Unión.

Zacarías recordó que, en su momento, el gobernador dijo a los legisladores locales: ''Si yo fuera diputado, votaría en contra de la ley indígena aprobada, porque no representa a los pueblos indígenas''.

El integrante del consejo directivo del CG-500 solicitó al mandatario estatal que instruya a quien corresponda para el desistimiento de la acción penal contra todos aquellos que fueron acusados de haber tomado el Congreso local, ''tan sólo por no aceptar una ley indígena contraria a los acuerdos de San Andrés y por debajo de la iniciativa de la Cocopa.''

Recordó a los dirigentes de la organización que han muerto, como Sabino Estrada, Gregorio Alfonso Alvarado, quien está desaparecido desde el 26 de septiembre de 1996; a Marcelino Isidro de los Santos y Antonio Feliciano López, encarcelados injustamente por luchar por la creación del nuevo municipio de Rancho Nuevo de la Democracia, y por el desarrollo de esa microrregión mixteca; a los más de 80 indígenas apaleados por pedir servicios para sus pueblos, y a varios dirigentes ''perseguidos políticos'', por haber tomado el Congreso local en junio.

Planteó también que la organización se retiró del proceso de la reforma política estatal. El Congreso local ''está secuestrado por partidos políticos grandes y pequeños, con su visión excluyente, donde no entramos las organizaciones civiles, pues sólo nos quieren en sus foros como objetos decorativos de una escena de loros con auditorio sordo, en los cuales no hay perspectivas ni posibilidades para alcanzar un gobierno incluyente. Aspiramos a tener derecho a voz y voto, con capacidad para decidir verdaderamente, con una visión integral del reordenamiento estructural que en materia de desarrollo integral y de derechos y cultura indígenas nuestro estado necesita. Por eso nos hemos retirado de esos foros sobre reforma politica del estado de Guerrero, que simulan apertura para que no cambie nada, no seremos comparsa.''

Al referirse a la iniciativa de reforma a la Constitución estatal sobre derechos y cultura indígenas, presentada por el gobernador Juárez Cisneros al Congreso guerrerense, Zacarías indicó al mandatario que aprecian su intención de reconocerles sus derechos, ''pero no aceptaremos que se nos pretenda rebajar aún más nuestros derechos tan sólo por ignorancia política, deliberada o no, de quienes le elaboraron su propuesta legislativa. No aceptamos que engañosamente se nos quiera reconocer como núcleos de población indígena, como reza su iniciativa'', porque eso no tiene encuadre en el derecho positivo internacional. ''Necesitamos ser reconocidos como pueblos indígenas con derechos plenos, particulares y específicos, reconocidos como sujetos de derecho público.''

No somos etnias, somos pueblos indígenas y tenemos derechos, agregó Zacarias: ''No producimos solamente artesanías, tenemos arte indígena; no tenemos dialectos sino lenguas o idiomas propios; no tenemos usos y costumbres, tenemos derecho indígena; no aceptamos que se nos quieran solamente dar terrenos o parcelas negándonos nuestro derecho al territorio, como pretende el Procede. Tenemos derecho a la tierra y al territorio indígena, al que no renunciaremos jamás. No aceptaremos que nos representen otros en los congresos, pues hemos entendido que nadie hará por nosotros lo que a nosotros nos corresponde hacer por nosotros mismos elaborando las leyes que nos beneficien. Igualmente, hemos comprendido que tenemos que acceder a los espacios de gobierno para alcanzar las metas de nuestros pueblos.''

Por su parte, Juárez Cisneros rechazó que su gobierno persiga a algún dirigente por cuestiones ideológicas; afirmó que el suyo no es un gobierno que reprima o persiga por razones partidarias o políticas, sino que ha tenido una disposición ''clara y decidida'' a escuchar los planteamientos del CG-500 para construir una relación respetuosa, y manifestó que recogía el planteamiento del desistimiento de las acusaciones contra dirigentes del consejo ''con pleno respeto a los poderes''.

Señaló que en los últimos dos años y cinco meses, su gobierno ha canalizado recursos a comunidades indígenas a través del CG-500, aunque reconoció que éstos han sido insuficientes porque no alcanza el dinero que tiene el gobierno para atender todas las demandas. ''Es necesario que el gobierno federal sea también solidario con Guerrero'', enfatizó.

Finalmente, dijo que la reforma indígena debe ser mejorada para recoger el sentimiento de los pueblos indios, y en relación con la enviada por él al Congreso estatal señaló que se está enriqueciendo.