Ť La OTAN, lista para una acción decidida: Alemania
Acuerdan Washington y la UE amplia coalición antiterrorista
Ť La guerra no termina en Afganistán, advierte EU
AFP, AP, REUTERS Y DPA
Bruselas, 20 de septiembre. La guerra mundial proclamada por Estados Unidos contra el terrorismo "no termina en Afganistán", advirtió hoy aquí el subsecretario estadunidense de Estado, Richard Armitage, quien rindió un informe a sus aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) sobre la investigación de los atentados de Nueva York y Washington, aunque no hizo ninguna petición de ayuda
Estados Unidos y la Unión Europea (UE), entre tanto, se comprometieron a trabajar en la "amplia coalición para combatir el terrorismo", según una declaración conjunta divulgada por el Departamento de Estado en Washington.
"Actuaremos concertadamente para aumentar y mejorar esta cooperación alrededor del mundo. Los responsables de los recientes atentados debe ser perseguidos y juzgados. Pondremos en marcha un esfuerzo global, sistemático y duradero para eliminar al terrorismo internacional, sus dirigentes, sus actores y sus redes", señaló el comunicado.
La cooperación ?que incluye el aumento de medidas de seguridad, control de migración, cooperación policial y judicial, incluyendo extradición de sospechosos? fue anunciada al término de un encuentro entre el secretario de Estado estadunidense, Colin Powell, y una troika europea compuesta por el canciller belga Louis Michel ?cuyo país tiene la presidencia de la UE?, el alto comisionado en política exterior y seguridad, Javier Solana, y el comisario europeo de Relaciones Exteriores, Chris Patten. Este viernes se realizará en Bruselas una cumbre extraordinaria de jefes de Estado y de gobierno de los 15.
En esa ciudad, Armitage informó a los embajadores de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) sobre los esfuerzos para formar una coalición global que apoye lo que el presidente George W. Bush ha denominado una guerra ininterrumpida contra el terrorismo.
Hay que "dejar claro de forma drástica y explícita que esto es una guerra global contra el terrorismo, no se limita a Afganistán", dijo el subsecretario de Estado, quien agradeció a los 19 miembros de la OTAN por invocar rápidamente la cláusula de defensa mutua, nunca antes usada, tras los atentados.
Más tarde, en Berlín, el secretario general de la OTAN, George Robertson, dijo que la hipótesis de un ataque exterior contra Estados Unidos se confirma poco a poco y que la alianza atlántica está lista para una "acción decidida" en cuanto reciba confirmación de Estados Unidos. Los ministros de Defensa de la OTAN tienen prevista una reunión en Nápoles el próximo miércoles.
Derecho a la defensa propia
Por lo pronto, funcionarios de la OTAN citados por Ap dijeron que el envío de barcos y aviones por parte de Estados Unidos al Golfo Pérsico en la llamada Operación Justicia Infinita, no requiere aprobación formal de la alianza, puesto que el gobierno de Bush "retiene el derecho pleno a la defensa propia".
Sin embargo, en Berlín, el canciller federal, Gerhard Schroeder, reafirmó el apoyo de Alemania a una eventual operación de la OTAN, pero sostuvo que "debe haber consultas en el seno de la Alianza" antes de realizar ataques. Según el diario Die Welt, una unidad de elite de soldados alemanes está lista para partir a Asia y colaborar en enventuales operaciones estadunidenses.
En París, el presidente francés, Jacques Chirac, y el primer ministro británico, Tony Blair, se expresaron a favor de una "respuesta apropiada y eficiente" a los atentados del 11 de septiembre.
"Si Estados Unidos decide una acción militar, Francia y Gran Bretaña la apoyarían, si el golpe es apropiado y eficiente", aclaró Chirac, tras dialogar durante una hora con Blair, quien luego viajó hacia Nueva York y Washington.
Sólo dos horas antes de su discurso ante el Congreso, Bush recibió a Blair para analizar la cooperación antiterrorista.
Los gobiernos de España y Portugal, por su lado, autorizaron hoy a Estados Unidos a utilizar bases militares en sus respectivos territorios. En el caso de España, la autorización corresponde a un pedido formal de Washington para la utilización de esas instalaciones, especialmente la base aérea de Morón de la Frontera, en Sevilla, y la naval de Rota, en Cádiz, que ya ejercieron un importante papel durante la Guerra del Golfo. Desde Morón hoy fueron vistos despegar a lo largo del día una decena de aviones de combate estadunidenses F-16 y de transporte C-17.
En el caso de Portugal, el gobierno cumplió un procedimiento formal al autorizar el uso de la estratégica base en la isla de Azores, un portaviones fijo, pues se ubica a mitad del océano Atlántico, y ya está en manos de los estadunidenses.
Decenas de países han prometido ayudar a Estados Unidos en la guerra contra el terrorismo, pero mientras unos han ofrecido un apoyo incondicional, como los británicos, otros aceptarán sólo intercambiar información o brindar ayuda financiera.
Según el diario The Times, Estados Unidos y Gran Bretaña tienen planes secretos para una guerra contra el terrorismo de diez años de duración, denominada Operación Aguila Noble, de la cual las acciones militares apenas serían una parte.
El canciller saudita Saud al Faisal dijo este jueves en Washington, donde ofreció su apoyo a Estados Unidos, que una respuesta militar abrumadora podría crear "una brecha insalvable entre el mundo occidental y el mundo islámico"
En tanto, la Unión Europea se encuentra en plena movilización contra el terrorismo. Los ministros de Justicia e Interior de la UE, reunidos este jueves en sesión especial, se comprometieron a llegar a un acuerdo político antes de final de año sobre una orden europea de busca y captura y la tipificación del delito de terrorismo.
Además, adoptaron varias medidas para reforzar la colaboración con Estados Unidos y decidieron una batería de medidas, como mayor presión a países cuyos sistemas bancarios facilitan transferencias de fondos que financian el terrorismo, y crear la primera unidad antiterrorista dentro de la Europol.
La ONU busca su lugar
En Nueva York, el secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Kofi Annan, se reunió hoy con representantes de los gobiernos de Gran Bretaña, Rusia y Alemania para discutir el papel de la ONU en la coalición antiterrorista.
El ministro alemán de Relaciones Exteriores, Joschka Fischer, señaló tras el encuentro que la ONU "puede ejercer un papel importante", pero no quiso responder si su país considera necesario que Estados Unidos obtenga la aprobación del Consejo de Seguridad de la ONU para realizar ataques militares.
Estados Unidos nombró recientemente como embajador ante la ONU a John Negroponte, un diplomático que representó a su país en las situaciones más polémicas de la reciente historia estadunidense.
Negroponte fue agregado político de la embajada en Saigón durante la guerra en Vietnam, luego delegado en las negociaciones de paz con ese país. En la década de los ochenta fue embajador en Honduras, en la época en que ese país de Centroamérica era la plataforma de Estados Unidos en su lucha contra el gobierno sandinista de Nicaragua. Las violaciones a los derechos humanos en Honduras durante ese periodo generaron fuertes opiniones contrarias al nombramiento de este diplomático ante la ONU.
Desde Londres, la organización humanitaria Amnistía Internacional pidió al Consejo de Seguridad de la ONU que asegure que los Estados no pondrán en riesgo "la vida, el bienestar y los derechos humanos de la población cívil" en su búsqueda de justicia. "Podemos elegir un patrón que honre nuestros valores y respetar los derechos humanos, o uno que persiga la venganza", sostuvo en la declaración.