JUEVES Ť 27 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001
Ť La recesión del país se prolongaría hasta el primer semestre de 2002, advierte
México usará los 18 mil mdd ofrecidos por el FMI si continúa el deterioro de mercados: Bursamétrica
Ť Aumento de tasas de interés, más inflación y volatilidad del tipo de cambio, prevé
ANTONIO CASTELLANOS
El gobierno federal dispondrá de la línea de crédito contingente por 18 mil millones de dólares ofrecida por el Fondo Monetario Internacional (FMI), si los mercados financieros del mundo siguen deteriorándose y se complica la aprobación de la reforma fiscal. Una decisión en tal sentido es ''altamente probable como medida de blindaje'', adelantó la consultora Bursamétrica.
En este nuevo escenario, el riesgo país en México se ubica en la recesión que se prolongará posiblemente hasta el primer semestre de 2002. Se podrán retrasar las inversiones programadas para la última parte del año, se incrementará la expectativa de ajuste del gasto y se vuelve prioritario aprobar la reforma fiscal.
En un informe especial distribuido entre inversionistas nacionales y extranjeros, los analistas de la consultora encabezada por Ernesto O'Farrill, Noé Romero y Pablo Alvarez-Icaza, exponen que los fundamentos de la economía de México son los más sólidos de América Latina. Sin embargo, se han debilitado ante el deterioro de la economía mundial.
El impacto en los mercados financieros se evidenciará en el aumento de las tasas de interés por expectativas de mayor inflación; volatilidad de corto plazo en el tipo de cambio que podría llegar a 9.90 pesos por dólar y en que el Indice de Precios y Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores se consolidaría en 5 mil 750 unidades.
De acuerdo con las proyecciones de los expertos de Bursamétrica, en el mercado de bonos soberanos mexicanos los precios se podrían ajustar a la baja debido a la minimización de pérdidas de los portafolios y a que el 30 del próximo mes los manejadores de bonos cierran posiciones.
En el documento hacen notar que los efectos del imprevisto choque externo derivado de los atentados contra Estados Unidos no se deben confundir con la tendencia recesiva ya presente en la economía mundial y en la mexicana en particular. A la interrupción de la actividad productiva habrá que anexar las repercusiones obvias en ciertos sectores como transporte aéreo, turismo, banca y seguros.
Ahora los resultados reales son que la producción industrial cayó 3.3 por ciento en julio y aunque la de la construcción observó una caída de 2.7 por ciento en ese mes, se considera una baja mucho más moderada que en los meses anteriores. La recesión industrial en Estados Unidos sigue perjudicando la producción orientada a las exportaciones. Las empresas maquiladoras redujeron su producción 8 por ciento y las de transformación en 3.8.
A pesar de lo anterior, el secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, rechazó la propuesta de aplicar un plan anticíclico que implique una política expansiva del gasto público. Esto, dijo, afectaría el déficit fiscal de 0.65, las tasas de interés y el tipo de cambio, pero ante las circunstancias actuales, concluyeron los analistas, ''es altamente probable que el gobierno federal disponga de la línea de crédito otorgada por el FMI por un monto de 18 mil millones de dólares''.