MIERCOLES Ť 3 Ť OCTUBRE Ť 2001
Ť La estrategia incluiría recorte de impuestos y financiamiento por 100 mil mdd
Bush discute con líderes legislativos la puesta en marcha de un plan de reactivación económica
Ť El jefe de economistas de la Casa Blanca reconoce que existe el riesgo de recesión
Ť Alan Greenspan advierte que el paquete deberá evitar el aumento de las tasas de interés
REUTERS, AP Y DPA
Washington, 2 de octubre. El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, debatió este martes junto con varios líderes legislativos un plan de estímulo al consumo y la inversión, con el fin de reactivar la economía estadunidense, que está en peligro de recesión tras los atentados del 11 de septiembre.
En esta estrategia, según se esbozó, se incluiría la práctica ya empleada por Bush de recortar impuestos a las empresas y, según trascendidos, un financiamiento del orden de unos 100 mil millones de dólares.
"La probabilidad de que haya dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo es alta y la perspectiva no es buena", admitió el jefe de economistas de la Casa Blanca, Glenn Hubbard, al ser interrogado sobre las posibilidades de una recesión en Estados Unidos.
La próxima semana podría anunciarse el programa
La Casa Blanca dejó claro este martes que el paquete de medidas para reactivar la economía, y que podría anunciarse la semana próxima, deberá ser limitado en tamaño y magnitud para evitar un impacto duradero en los balances presupuestarios que pudiera provocar un alza en las tasas de interés a largo plazo y que acabe por frenar el crecimiento.
"Lo que se necesita es un paquete de estímulo lo suficientemente grande como para reactivar la economía a corto plazo, pero lo suficientemente pequeño para que no afecte las tasas de interés a largo plazo", sostuvo Bush, quien señaló que "no hay duda de que nuestra economía ha sido afectada por los atentados del 11 de septiembre. Vamos a hacer algo para remediarlo".
El presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, ha advertido al Congreso públicamente que se debe cuidar que el paquete no fomente el alza en tasas de interés, lo que subiría el costo de créditos, hipotecas y otros préstamos. La Reserva, por lo pronto, ha recortado las tasas de interés a corto plazo para lo que resta del año y el martes anunció una nueva rebaja de medio punto porcentual.
Greenspan, asimismo, aseguró desde la semana pasada que serían necesarios 100 mil millones de dólares -equivalentes a 1 por ciento de la economía estadunidense- en el paquete diseñado para enfrentar la crisis. Dicha cifra incluiría 15 mil millones de dólares para sanear la industria aeronáutica civil y unos 20 mil millones para financiar la guerra contra el terrorismo internacional.
Bush, por lo pronto, dio a enten- der que el paquete podría incluir recortes en los impuestos pues dijo que el Congreso busca maneras de estimular la inversión del sector empresarial, especialmente en la industria manufacturera. "La mejor manera de estimular la demanda es dar a la gente dinero para que pueda gastarlo", planteó el presidente.
Fuentes oficiales informaron que líderes del Congreso están estudiando la posibilidad de estímulos fiscales para las empresas, incluidos algunos que les permitirán deducir más rápidamente las compras de software, computadoras y equipo.
Trascendió además que los demócratas están presionando para que se adopten reembolsos por el impuesto sobre el ingreso, que son los que financian la seguridad social, pues la población de menores recursos no se ha beneficiado de los rembolsos que envió este año el gobierno y que formaban parte del plan de recorte de impuestos por 1.3 millones de dólares que firmó Bush.
Fuentes del gobierno indicaron que todas las posibilidades se están considerando para la creación del paquete de medidas para la reactivación de la economía.
En todo caso, el secretario de Comercio estadunidense, John Evans, aseguró que Washington no tiene previsto imponer sanciones económicas o comerciales contra ningún país, como parte de la represalia por los ataques contra el World Trade Center y el Pentágono.