MIERCOLES Ť 3 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť El tema logró convertir una sesión de bostezo en plenaria prolífica en temas

Al archivo, el debate para rendir homenaje en los muros de San Lázaro a los caídos del 68

Ť La panista Gómez Mont y el priísta Levín Coppel refrendan su militancia en ese movimiento

ROBERTO GARDUÑO, CIRO PEREZ SILVA Y ANDREA BECERRIL

El pleno de la Cámara de Diputados dejó para otra oportunidad el debate en torno a la propuesta perredista de colocar con letras de oro, en el muro de honor del recinto de San Lázaro, la leyenda ''A los mártires del 2 de octubre de 1968''. Aquel tema trajo consigo una serie de aclaraciones de procedimiento legislativo, reclamos del PRD porque se desvió el tema y la poco usual participación de los líderes de los grupos parlamentarios.

De una sesión que prometía poco, la de ayer pasó a ser una plenaria prolífica en temas. Se presentaron iniciativas para agilizar las tareas legislativas, porque ante el desorden se requiere regresar a la Junta de Régimen Interno y Concertación Política; revisar la partida presupuestal destinada al pago de las pensiones de los ex presidentes de la República, quienes al mes reciben 140 mil pesos cada uno, lo que en total representa una erogación anual de 8 millones 400 mil pesos, y finalmente, los diputados le dieron el visto bueno al viaje de Vicente Fox, con 294 votos a favor y 27 abstenciones.

La sesión, que se inició con un quórum de 284 diputados, transcurría sin contratiempos hasta que la diputada del PRD Miroslava García llevó a la tribuna el tema del 2 de octubre para que el pleno aprobara la propuesta de colocar en letras de oro el homenaje a los mártires de Tlatelolco, y que fuera de ''urgente y obvia resolución''.

Tras la intervención de la legisladora perredista, la presidencia sometió ante el pleno la propuesta, y los legisladores votaron porque el tema se discutiera después. Esto propició la molestia en la bancada perredista, por lo que Beatriz Paredes intervino y aclaró que una solicitud de la misma naturaleza -elaborada por Rosario Tapia el año pasado- ya se encontraba como expediente en la Comisión de Régimen y Prácticas Parlamentarias.

Martí Batres intervino y dijo que si el pleno ya había negado la posibilidad de discutir la propuesta, entonces qué se estaba discutiendo, porque ''nos da la impresión que se pretende instalar una especie de efemérides, por lo tanto, nos parece que no ha lugar a la discusión ni a hechos''.

Y es que las fracciones parlamentarias de oposición al PRD pretendían seguir con el tema del 2 de octubre. Y en ese tenor, Fernando Ortiz Arana dijo que la propuesta de la diputada García no se había desechado, porque la asamblea no decidió desecharla sino que no era de urgente y obvia resolución, y por lo tanto solicitó a la presidencia de la Cámara que preguntara al pleno si se admitía o no la proposición, ''y si es admitida que pase a comisión para ser dictaminada''.

Por su parte, Felipe Calderón también se unió al coro de los priístas y pidió a la presidencia que continuaran los oradores que solicitaron el uso de la tribuna y se pusiera a consideración si después continuaba la discusión. Beatriz Paredes solicitó al pleno se definiera, y continuó la discusión, pero no sería de ''urgente y obvia resolución''. Entonces, la diputada María Teresa Gómez Mont se ostentó como activista estudiantil y criticó a Oscar Levín Coppel, quien se dice activo participante en el movimiento de 1968: ''Nos estamos quedando solos, diputado Coppal (ironizó). Cada vez apreciamos que ya se viene a hablar en tercera persona y no en primera del plural, porque cada vez somos menos los que podemos decir que ahí estuvimos''.

Levín subió a la tribuna y recordó: ''Arriesgamos la vida, arriesgamos la libertad para que en México hubiera más libertades y más desarrollo. Se hizo bien. Estaba recordando a algunos de los compañeros asesores del PRD, me recordaba al discurso que dije en aquel momento, cuando el PRI y el PRD votamos juntos poner los nombres de los mártires del 68marcha_octubre_euy en el recinto de la Asamblea Legislativa...lo hicimos juntos Martí Batres y yo''.

Batres dijo entonces que sí es momento para cuestionarse si la actual legislatura podrá hacer a un lado la mezquindad histórica y reconocer el nombre de los masacrados en 1968: ''ƑHabrá el suficiente valor, dignidad, la visión, la altitud de miras para tomar la decisión?''

Reacciones a declaraciones de Creel

El anuncio del secretario de Gobernación, Santiago Creel, de que se abrirán los archivos del Cisen, produjo reacciones distintas. Fernando Martínez Cue, del PAN, adujo que ahora ''estamos fuera de tiempo, y sobe todo hay que recordar en perspectiva histórica que aquella decisión fue una toma de posición del Estado. Eso no significa que hagamos tabla rasa del pasado, hay que recordar a los caídos, pero sobre todo conservar la unidad nacional''.

José Manuel del Río Virgen, de Convergencia por la Democracia, felicitó a Creel, porque ''estudiantes, dirigentes académicos, líderes sindicales fueron perseguidos por el Cisen, organismo que se encargó de inventar acusaciones y responsabilidades inexistentes''.

También José Elías Romero Apis, del PRI, dijo que ''hay que tener cuidado porque el esclarecimiento de estos hechos sólo pueden ser de utilidad como un tributo de justicia. Y si aquellos hechos constituyeron alguna falta, ya no se pueden castigar, ya prescribieron y los responsables, en su mayoría ya se murieron''.

Impide Fernández de Cevallos hablar del movimiento estudiantil

El panista Diego Fernández de Cevallos impidió ayer que en la sesión del Senado se abordara el tema de la masacre del 2 de octubre, como pretendía la fracción del PRD. ''No hubo el acuerdo de todos los grupos parlamentarios, en concreto del PAN, para que se tratara'', le respondió al coordinador perredista Jesús Ortega.

Era el final ya de la sesión, en la que se dio entrada a la solicitud de última hora del presidente Fox para viajar a Estados Unidos, y Fernández de Cevallos actuó bajo dos vertientes, pues mientras demandó celeridad en la autorización al Ejecutivo para ausentarse del país, se negó a que el PRD expusiera sus puntos de vista en torno a lo acontecido en la Plaza de las Tres Culturas hace 33 años.

''Al margen de que el PAN quiera o no tratar este punto, le ruego que nos permita tomar la palabra'', le insistió Ortega. Fernández de Cevallos le dijo que la negativa se basaba en un acuerdo político de todos los grupos parlamentarios, de sólo llevar a la sesión los temas acordados.

''Le recuerdo que la mesa directiva no tiene facultad para negarle la palabra a un senador'', invocó el perredista, pero Fernández de Cevallos no se movió de su postura. No, agregó, ''tope donde tope y no por soberbia de la presidencia, sino por respeto a esta soberanía a que se debe la mesa directiva''. Estaba encolerizado. ''šNo!'', le gritó a Ortega. ''No está a discusión el mandato que esta presidencia ha recibido del pleno'', pero el perredista le dijo que no aceptaban ''más actitudes autoritarias y ejercerían plenamente sus derechos''.

Los senadores del PRI, que se mantuvieron al margen de la discusión, expresaron al final descontento por la actuación ''prepotente'' del panista.