Mentiras no vencerán argumentos contra Texcoco, dice López Obrador
Ť Legítimo que el gobernador mexiquense defienda su proyecto de aeropuerto, pero detrás hay intereses de constructores, traficantes de suelo e inmobiliarias, asevera el mandatario
ELIA BALTAZAR
El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, advirtió que no será con mentiras como combatirán "nuestros argumentos en contra de la construcción del aeropuerto alterno en Texoco". Esto, frente a la versión difundida por diputados panistas en el sentido de que las autoridades locales pretenden construir un relleno sanitario en aquella zona.
López Obrador aclaró que "de ninguna manera pretendemos hacer un basurero en Texcoco. Lo cierto es que esto lo crearon como parte de una campaña para quitar fuerza a los argumentos del gobierno de la ciudad. Y si van a utilizar mentiras, pues no progresarán".
Respecto al recorrido por la zona, en helicóptero, organizado el pasado miércoles por el legislador panista Jacobo Bonilla, el mandatario expresó: "Quisiera saber quién pagó ese recorrido. Si fue la iniciativa privada, por qué razones. Porque me parece que un viaje en helicóptero algo cuesta".
Cabe recordar que en su momento Bonilla sólo dijo a los reporteros que el costo del recorrido corrió a cargo de organizaciones no gubernamentales y la iniciativa privada, pero no mencionó nombres.
López Obrador insistió que sería muy lamentable que se impusieran intereses de grupo en la elección del lugar donde se construirá la nueva terminal aérea. "Es muy legítimo que el gobernador del estado de México, Arturo Montiel, defienda su postura, pero creo que hay más gente involucrada, como grupos constructores, traficantes de uso de suelo y empresas inmobiliarias", manifestó.
Así, aunque no hay recursos legales para enfrentar la decisión federal, el jefe de Gobierno reiteró que no se quedará callado ante cualquier irregularidad. "Los vamos a denunciar, vamos a ver quiénes compran y qué planes de desarrollo urbano tienen. Lo tienen que pensar muy bien, porque el negocito no les va a funcionar".
Sobre los estudios elaborados por una empresa consultora japonesa que habría recomendado la construcción de un nuevo relleno sanitario, López Obrador aseguró: "Si se hicieron esos estudios en alguna administración pasada (habrían sido encargados por Cuauhtémoc Cárdenas como jefe de Gobierno), sinceramente les digo que ni los conozco".
Hay que potenciar lo que tenemos
Pese a su franca oposición a que se construya la nueva terminal aérea en Texcoco, López Obrador afirmó que el GDF no se opondrá a la decisión del gobierno federal, pues aún confía en que una estrategia de persuasión podría convencer de que el proyecto del estado de México no es el más apropiado, por los riesgos y problemas que significa para la ciudad y el país, dada la situación económica que se enfrenta.
"Los pronósticos económicos advierten sobre la posibilidad de que haya un crecimiento cero hasta el año 2003 y esta es una situación verdaderamente grave. Y en este contexto no se puede pensar en negocios, sino en potenciar lo que tenemos".
Advirtió que en esas condiciones no se puede pensar en desperdiciar la infraestructura del actual aeropuerto, cuyas operaciones tendrían que cancelarse si se construyera uno nuevo en Texcoco.
El país, dijo, no está para pensar en una inversión de más de 5 mil millones de dólares, cuando el resto de las naciones están ajustando sus inversiones, porque no se ven muchas opciones hacia el futuro. Habría que pensar, incluso, en la posibilidad de construir una pista más en el aeropuerto actual.
Sobre las declaraciones del secretario de Gobierno, José Agustín Ortiz Pinchetti, en el sentido de que se estudiaría la posibilidad de impugnar la decisión del gobierno federal si fuera contraria a los intereses de la ciudad, el jefe de Gobierno dijo que las posiciones de ambos no se oponen, sino son complementarias.
"El secretario de Gobierno está revisando el marco legal respecto de las facultades generales y las leyes secundarias. Pero la elección corresponde al gobierno federal; es el que decide, y nosotros no podemos oponernos. Pero vamos a actuar con mucha responsabilidad. Soy muy respetuoso de la investidura presidencial, pero no voy a dejar pasar todas", advirtió el jefe de Gobierno.